Capítulo 14.

241 30 10
                                    

Antes que nada, quiero decirles que no será Adele y Peter, más adelante se enterarán del porqué.

-te exijo que la sueltes.

-No, no lo haré, tienes que llevarla a este lugar- Le entregó una dirección.

-¿Cuando? -Pregunto con resignación.

-El Viernes, a las 6 de la tarde, sola.

-No puedo llevarla a ella sola, querrá llevar a los niños.

-Ingeniatela para llevarla a ella sola, si no lo haces, Tu familia pagará -Sweets se levanto y se retiró junto a Alex.

*Narra Adele*

Los niños se acostaron a dormir, estaban agotados, subí a la habitación que compartía con Simón y él ya estaba poniéndose su pijama, me quedé observando como se desnudaba, era realmente atractivo, me encanta su espalda ancha, no resisti más y camine hacia él sigilosamente, coloque mis manos en sus hombros y baje hasta sus glúteos, los apreté y lo abrace.

-Oh Adele -Susurro Simón y soltó un sollozo.

-¿Que sucede? -Bese su espalda y su aroma me "Desperto" mis ojos se empañaron y lo abracé mas fuerte -Perdóname, por favor.

-¿Que fue lo que sucedió? -Me separe de él y le di la espalda -Por favor, dime.

-Yo... él... -Tenia un nudo en la garganta que me impedía hablar.

-Te entregaste a él -Coloco sus manos en su cadera y bajo la mirada negando.

-¡No! Te juro... te juro que intente detenerlo, pero él era más fuerte, no pude evitarlo -Simón me dio la espalda y yo caí a los pies de la cama -Perdóname.

-No, no tengo nada que perdonarte amor, Perdóname a mi, no te pude proteger -Simón se arrodilló a mi lado -Pero lo haré pagar, lo haremos pagar mi amor.

Me envolvió en sus brazos y me sentí culpable por el beso de esta tarde con Peter, ¿Que mierdas estaba pensando? Si yo amo a este hombre.

-Vamos a dormir bebé -Se levanto y me cargo en brazos, me recosto con cuidado y me desnudo -Voy por tu pijama.

Cuando volvió, traía en manos una de sus camisetas de deporte, una de las más holgada, me senté y él me vistió, se sentó frente a mi y yo acaricie sus manos, subí por sus brazos, sus hombros, llegue a su cuello y luego meti mis dedos en su barba, él me sentó en su regazo y yo lo abrace fuertemente por el cuello escondiendo mi rostro en él, sus fuertes brazos me rodearon y me pego más a él.
Me hace sentir segura ahora que lo sabe, es él mejor hombre que he podido conocer, él nos protegerá.

-Vámonos, por favor -Apenas susurró contra su cuello.

-¿Quieres unas vacaciones? -Comenzó a acariciar mi cabello.

-Permanentes -Simón me separo para verme a la cara- ya no quiero estar aquí, podriamos irnos a italia, Londres de nuevo, México.

-Amor, lo pensare, ¿Esta bien? -Beso mi frente y me bajo de él -Ahora a dormir.

Me acosté y él se abrazo a mi, coloco su cabeza en mi pecho y se quedo profundamente dormido.

-Perdón amor, por llegar a pensar que no te amaba más, que estúpida fui, estaba confundida, tu eres mi hogar, tu me haces sentir segura, una vida sin ti, no es vida, Te amo tanto.

*Narra Olivia*

Apenas el señor konecki me entrego el video esta mañana, lo vi miles de veces, era más que evidente que algo había pasado, pero si ella no decía la verdad, no podríamos hacer nada.

-¿Sigues viendo ese video? -Ed estaba parado frente a mi -Es tarde, ven a la cama.

-No puedo, yo... estoy confundida.

-Mañana veras eso con más claridad, ahora ven a la cama conmigo -Extendió sus manos.

-Esta bien -Lo abrace y él beso mi frente.

-Te amo liv, vamos a descansar -Me miro picaramente.

-Lo dudo mucho, pero vayamos.

*(La mañana siguiente) Narra Simón*

Extendi mi mano al lado de Adele, pero ya no estaba, me senté de golpe y la busque, pero no estaba, la luz del baño estaba apagada así que no estaba ahí, me levante de la cama y salí de la habitación, fui a la de chris primero, no estaba allí, me dirigí a la de Taylor, pero tampoco estaba, llegue a la de Angelo y la vi, estaba acostada en la cama con él, ambos dormidos, Angelo tenia sus ojos llorosos y su nariz roja, era tan parecido a Adele cuando lloraba.

-Shh, no la vayas a despertar papi -Angelo se sento.

-Pensé que estabas dormido -Él, se bajo de la cama con mucho cuidado.

-No, no puedo dormir, mamá esta cansada, yo no, vamos, hay que dejarla dormir -Tomó mi mano y tiro de ella hasta sacarme de la habitación -Esta noche dormire contigo.

-Esta bien, mi pequeño gran hombre, ¿Cuando creciste tanto?

-¿Cuando te volviste un oso? -Reí.

Llegamos a la habitación y él me arropo, se acostó a mi lado y abrazado a mi, se durmio.
Yo me le quede observando un poco más, ¿Cuando habían crecido tanto? Ya no era un pequeño Peanut, si seguía así, mañana se iría a la Universidad.

Capítulo corto, si, si. Pero sentía que debía actualizar ya, nos leemos después, besos.

Let it out 2Donde viven las historias. Descúbrelo ahora