Capítulo 3

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Ignoré el "incidente" de la nuca, total, solo lo sé yo ya que no se ve... Fui al instituto en cuanto dejé de estar en shock y, al parecer, llegué tarde.

- Vaya, ¿primer día conmigo y ya llega tarde? A esto se le llama empezar bien, ¿no? -todos mis compañeros se rieron de la "coña" de satanás, quiero decir la profe de literatura.

-Lo-lo siento, no me di cuenta de la hora. No creo que vuelva a ocurrir.

-¿No cree? Más le vale que no vuelva a pasar, señor... -empezó a mirar la lista buscando mi  nombre.

- Tanner, Chris Tanner

-Pues eso, siéntese señor Tanner, por ser el primer día no le pondré falta.

Me senté en la primera mesa que encontré, y resulta que Chuck, Alex, Jennifer y Jim habían guardado una mesa para mí que rodeaban entre todos, cosa que me hizo soltar una risita que no fue ignorada por la profesora y que fue correspondida con una mirada de "vuelve a hacerlo y te arranco el cuello con los dientes". 

La clase fue de lo más corriente posible: como era el primer día nos hizo escribir una redacción sobre lo que había sido nuestro verano, como lo habíamos imaginado, que hubiésemos cambiado y el primer día de curso, 650 palabras en media hora y sin faltas de ortografía. Todos nos quedamos extrañados ya que eso es prácticamente lo que hacen los niños pequeños el primer día, pero nadie se quejó, porque sabíamos que eso hubiese conllevado más trabajo y mas difícil, así que todos lo hicimos y lo entregamos a tiempo, bueno, todos menos Chuck, que solo escribió la mitad porque se empanó mirando por la ventana y filosofando sobre la libertad y la escuela (si, nos ENCANTA filosofar). Después de esto nada especial, más clases comunes, un patio lleno de risas, coñas, algún filosofo improvisado y alguna broma a algún nuevo, como invitar a 7 nuevos a una fiesta en una casa abandonada (no había fiesta, por si acaso alguien no lo entendía), más clases normales y al fin el momento de irse a casa a comer. 

Como siempre, Chuck y yo cogimos el mismo camino y lo acompañé a casa (que me pillaba de camino a la mía), lo dejé ahí y me fui a comer. En casa me esperaba mi madre con una noticia: ¡la habían ascendido! La felicité y bromeé un poco con ella:

-Bueno, ese ascenso nos beneficiara a los dos, ¿no? Aumento de paga, más horas de trabajo que se transforman en más horas con la casa para mi, algún regalillo de vez en cuando...

-Oye oye, tampoco te flipes eh. De todo lo que has dicho creo que solo te vas a quedar con lo de más horas con la casa sola -después de esto reímos los dos y nos pusimos a comer.

Salvo porque estábamos comiendo sopa en pleno septiembre la comida fue bastante normal. En cuanto acabé me fui a lavar los dientes y a leer un poco, ya que sabia que tenia media hora que matar hasta volver al insti. Justo cuando cogí el libro me empezó a sonar el móvil. Era Chuck, que se aburría. Hablamos un rato y al final me dejó tranquilo para poder leer, había encontrado algo en su habitación que no recordaba tener y que después me enseñaría. Me quedaban 10 minutos así que me leí dos capítulos y, aunque me quedaba algo de tiempo, paré de leer (no puedo dejar de leer en mitad de un capítulo, tengo que acabarlo) y me puse a mirar por mi habitación a ver si yo también tenía algo que no recordase. Me levanté y miré debajo de la cama y, cuando iba a mirar por la estantería, me sonó la alarma para que me fuese ya. Cogí mi mochila y me fui de nuevo al instituto, pasando por casa de Chuck.

-Mira, ¿te suena esto? -me dio un juego de la PS1 al que solíamos jugar de pequeños.

-¡Ostia! ¿No te acuerdas de las tardes que pasamos jugando a esto? -puso cara de ingenuidad, a lo que contesté recordándole uno de los trucos del juego- ¿X, X, R2, L2, R1, L1, X, X?

-¡Coño! Me acuerdo. Recuperar salud -y reímos, pero yo porque en realidad ese era el de recuperar estamina.

Nos pasamos el trayecto recordando las tardes que pasamos jugando, los jefes más difíciles, cagadas que nos hicieron repetir niveles, y el maratón no-sleep que hicimos cuando estábamos casi a punto de acabar el juego: nos pasamos una noche entera para acabar los dos últimos niveles del juego. Decidimos que este fin de semana lo volveríamos a jugar para ver si era tan difícil como lo recordábamos. 

Llegamos al instituto para más clases comunes, aunque el tema que tratamos en sociales me interesó (bueno, en parte): ese día empezamos a estudiar la cultura griega y, aunque no soy muy de historia, me interesé mucho por la mitología, y es que a mi siempre me había parecido un tema interesante, la mitología griega y la celta, aunque la griega me interesó antes. Todo lo de los dioses, los semidioses, las criaturas, los mitos, las leyendas... Me había pasado tardes enteras investigando mitos y leyendas que tenían que ver con criaturas mitológicas y, aunque no soy ningún experto en ningún mito ni ninguna leyenda, si que me se algunos que me parecen interesantes, aunque por encima (tampoco me voy a pasar una tarde entera investigando a fondo cada detalle de un mito,  me gusta más saberme algunos y de que van, soy friki pero no tanto).

Al fin, después de un día agotador y de haber sorprendido al de sociales y también un poco a la clase con mis conocimientos sobre mitología griega llegué a casa para hacer unos deberes que, por fin, me gustaba hacer: investigar sobre una criatura de la mitología griega y presentar a la clase lo que habíamos descubierto sobre ella. Había tantas y que molaban tanto , ¡decidir era imposible! Hipogrifos, medusa, hadas, trolls, cancerbero, pegasos, unicornios, dragones, hydras... Le envié un correo al profesor preguntando si podía hacer el trabajo con más de una, y me dijo que como máximo de 3, pero que los 3 debían estar muy bien investigados. Le dije que no había problema, que gracias por aclararme la duda y me despedí.

¿Qué 3 iba a escoger? Cancerbero seguro, porque mola un huevo: un perro de tres cabezas que guarda las puertas del infierno... Los dragones están un poco muy vistos, pero aun así la gran variedad me llama la atención, así que también están. Y por ultimo: ¿hipogrifo o pegaso? Creo que me quedare con el pegaso, aunque si tuviese el hipogrifo en el trabajo tendría 3 criaturas de Harry Potter... Nah, me gusta demasiado el pegaso.

Me puse a hacer el trabajo sobre el cancerbero el primero, puesto que era mi favorito y el que más me molaba, eso de guardar y proteger el infierno... Después fui con el pegaso, un caballo alado, y, aunque con este fue más difícil encontrar información relevante, fue igual de divertido.

Y, por último, los dragones. Sobretodo expliqué de donde viene el mito y las múltiples imágenes que se tienen de él: que si una pequeña lagartija que escupe fuego, que si una criatura con alas que hecha fuego por la boca, que si una bestia enorme de mas de 50 metros capaz de destruir ciudades enteras con su potente llamarada de fuego abrasador... Incluso en algunas culturas los veían como criaturas peligrosas que se escondían de los humanos y que merecían respeto divino y eso. Pero lo que mas me sorprendió fue un mito que tenían en un pequeño pueblo de las afueras de Roma en el que decían que los dragones podían adoptar formas humanas y incluso procrear con humanos para crear híbridos entre las dos especies capaces de hacer todo lo que hace un dragón pero con el cuerpo de un humano (o más o menos, ya que algunos decían ser cuerpos humanos pero con rasgos de reptil), que eran malvados y destruían pueblos y ciudades haciéndose pasar por humanos normales y no se que de que era muy raro pero pasaba, incluso fuentes de la época que decían ser esos híbridos y dibujos suyos, y hasta un nombre para esos híbridos: drakontrophos (investigando vi que era la mezcla de humano y dragón en griego transliterado).

-Flipante -dije mientras leía- lo mal que estaba la peña de esa época...

Pensé en ponerlo en mi trabajo, pero nah, vamos a ceñirnos a lo oficial si queremos sacar buena nota, ¿no? Guardé el trabajo y lo imprimí, y dejé en el olvido la paranoia esa del pequeño pueblo de Roma. Cené y me estuve un rato en Instagram hasta quedarme dormido.

Llamas cruzadasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora