Un Amor Sin Limites

Capítulo 20

Química, la clase que compartían Derek y Cathlen, el laboratorio se encontraba casi vacío, eran los primeros en llegar. Se sentaron en medio de la clase, tenían que empezar con el experimento. Después de la noche anterior, Cathlen sabía que debía disculparse con Derek. Pues no había sido realmente honesta con él después de todo. No podía seguir con su consciencia tranquila si no lo hacía, por eso iba a empezar con su disculpa cuando el profesor entró al salón junto a los demás estudiantes, muchos preferían esperar afuera para disfrutar un poco más del aire libre antes de entrar y tener problemas con los olores del interior del laboratorio.

―Muy bien, chicos ―Comenzó el profesor mientras repasaba con la mirada todos los puestos, asegurándose que no faltaba nadie―. Empecemos con un poco de Química real, para eso van a realizar el experimento de la página 56, tienen todos los ingredientes en sus mesas, en una hora empezaré a calificarlos.

Cathlen asintió a las instrucciones y comenzó, junto a Derek, a realizar el experimento. Realmente ninguno de los dos tenía una buena idea de lo que estaban haciendo, pero al mismo tiempo se esforzaban tanto como podían para no tener problemas de ningún tipo. Ya pasado un buen tiempo, ella se dio cuenta que si quería disculparse debía de hacerlo en ese momento, respiró hondo tomando un poco de valor.

―Erm... Creo que te debo una disculpa, Der...

―¿Por qué? Si es que lo puedo saber... ―El chico la miró un poco curioso, aunque sabía que no ella no se disculpaba sin más.

―Pues... porque... ya sabes... ―Las palabras eran difíciles para ella, para dejarlas fluir, en su mente era mucho más fácil, pero Derek no leería su mente, así que se obligó a sacarlas―. Lamento haber jugado contigo desde el principio ―Tomó in respiro profundo y soltó el aire lentamente―. Te di falsas esperanzas por haberme engañado a mí misma, eso no es algo de lo que estar orgullosa.

―No te preocupes por eso ―Una sonrisa se asomó en sus labios, negó suavemente―. Algo como eso me llevó a conocer a Natally... Si no hubiera pasado algo entre nosotros, nunca habría ido con Andrew para buscarte y haberla visto a ella, ¿sabías que se iría esa misma noche? Ni siquiera siendo amigos la habría conocido.

―Quizás tengas razón, pero eso no es excusa para haberte tratado como lo hice, no debí engañarnos a ambos.

―Entonces, supongo que debo decir que acepto tus disculpas, aunque para mí no había una verdadera razón de tus disculpas. Al final también yo estuve jugando contigo.

―Nunca fue ni de cerca a lo que hice yo... No tengo razones para haberlo hecho, ni siquiera sentí que lo hicieras...

―¿Crees que yo no sabía que estabas enamorada de Andrew? Se notaba de lejos que ambos lo estaban, yo simplemente preferí molestarle a él, así como me dijiste que lo había hecho, sólo que la forma de hacerlo era alejándote de él.

―Pero incluso aunque eso fuera así, te llevaste buenos golpes a causa mía...

―Sí, los recibí gustosamente, tenía una recompensa al final. Obstinar a Andrew y ganarme a su chica, no significa que no me gustaras o que no sintiera algo por ti, lo hacía, pero también era divertido a veces verlo a él así...

―Bien... entonces aceptamos las disculpas de ambos y terminamos el tema por la paz... ―Un olor fétido la hace mirar la mezcla que tenían y se da cuenta que la misma era amarilla con volutas negras cuando debía ser verde brillante―. Mejor sigamos con esto que nos van a matar porque hace vomitar...

Derek asintió y retiró la probeta con el contenido para desecharla, con sólo media hora de clase, por eso debían apurar con lo que hacían, al menos lo mejor posible para no tener problemas con el profesor. Al acabar la clase, su experimento estaba casi terminado, por lo que los dejaron irse con sus compañeros aunque no lo habían terminado realmente, estuvieron muy cerca, a pesar de que habían perdido la primera probeta.

Al salir de la clase, Andrew y Natally ya estaban fuera esperando. Tenían una hora libre después del almuerzo, por lo que se tomaron su tiempo para ir al Gran Comedor. Al entrar lograron vislumbrar a los gemelos con Virginia, era poco usual en ellos eso de estar con otras chicas, por lo general porque eran tan unidos que no se dejarían separar por una chica, pero estaban tan concentrados esta vez que quizás habían encontrado a la persona que los haría separarse un poco. Los cuatro decidieron dejar al nuevo trío solo y fueron por la fila de la comida hasta que al final se unieron para buscar una mesa, había una libre al fondo, cerca de unas mesas de futbolín que usaban los alumnos para distraerse después de comer y antes de las clases.

Sentados finalmente en su lugar la paz estaba reinante, ya no había discusiones o tensiones por lo que había pasado, eran dos parejas que no tenían más problemas que lo que vendría después, al menos así era hasta que algo nuevo fuera a interponerse entre ellos.