Capítulo 13

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Los dos días siguientes del viaje hacia los demás estados son bastante tranquilos y relajantes, aunque ni Craig ni yo bajamos la guardia en ningún momento por lo que aún pueda ocurrir hasta que lleguemos.

En todos los medios de comunicación sólo se ha hablado una y otra vez de la extraña persecución de una furgoneta blanca, sin ninguna imformación referente a sus conductores, por desgracia, a la que se ha calificado como "ataque terrorista", imagino que con la finalidad de ponerlo como excusa para intensificar la vigilancia a lo largo de todo el país.
Aun así, esto no nos ha supuesto ningún problema, ya que hemos ido eligiendo los sitios más pequeños y alejados posibles para avanzar con normalidad, y hemos tratado de evitar cualquier control policial por inofensivo que pareciese.

-Si todo va bien -habla Craig soltando la bandeja de su desayuno sobre nuestra mesa, para después sentarse frente a mí y apoyar los codos en la superficie con aire despreocupado.- deberíamos llegar a la base cuando haya oscurecido.

Ahora nos encontramos en un pequeño y aislado motel de carretera, donde hemos pasado la noche y preparado el coche para el siguiente trayecto, a pocas horas ya de alcanzar nuestro destino final.

-¿La base? -pregunto mientras introduzco una cuchara metálica en mi bol de cereales con leche.-

El ruido de los cubiertos al tintinear y un sosegado murmullo de voces son los sonidos predominantes en el pequeño buffet de la primera planta, y un agradable sol matutino ilumina por sí solo perfectamente toda la estancia, sin ayuda de cualquier otra lámpara de alrededor.

-La base es un antiguo complejo que varios astrónomos utilizaban para realizar sus estudios -explica Craig entre sorbo y sorbo a su café, con la mirada fija en su comida, y cogiendo sus cubiertos para empezar a desayunar.- Pal conocía a varios, así que, cuando cayó en desuso, dejaron que él lo ocupara. Nos gusta llamarlo así.

-Imagino -intervengo yo cuando termimo de masticar mientras lo observo a él y a las demás personas sentadas a nuestro alrededor, comprobando que no nos están prestando ninguna atención.- que muy pocas personas saben de su existencia, ¿verdad?

Craig asiente sin mirarme, concentrado únicamente en comer y sin darle mucha importancia a la pequeña posibilidad de que alguien nos esté escuchando en este momento.

-Allí estamos seguros -contesta de la misma manera, ajeno a todo lo demás.- Pal se aseguró de eso.

Lo observo ahora pensativa mientras él continúa con su labor, imaginando ese sitio por dentro y kilómetros y kilómetros de carretera y campo a su alrededor.

-¿Por qué confiáis tanto en ese Pal? -pregunto entonces después de reflexionar uno segundos sobre todo lo que me ha dicho.-

Ahora deja de prestarle tanta atención a su desayuno y levanta la vista hacia mí, dedicándome una mirada con un poco de extrañeza que hace que mis palabras parezcan meras estupideces.

-Él nos salvó -contesta encogiéndose de hombros, como si fiarse de él fuese lo menos que pudiesen hacer para agradecérselo.-

-Y también ayudó a convertirnos en esto -inquiero echándome hacia atrás en mi asiento para apoyarme sobre su respaldo y cruzarme de brazos mientras lo observo.-

Entonces, suelta sus cubiertos y comienza a incorporarse en su silla echándose hacia atrás de la misma manera en la que yo lo he hecho, dejando caer sus manos sobre la superficie de sus muslos.
No podría confirmarlo con exactitud, pero parece estar un poco molesto por el descaro al soltarle mi opinión.

-Obviamente Pal es un científico -comienza a decir con calma y expresión neutral, mientras continúa mirándome conforme va explicándose.- Vive por y para la ciencia, y sus creencias lo llevan siempre a seguir avanzando y a mejorar lo que ya tenemos hoy en día -vuelve a echarse hacia adelante, esta vez para poner sus brazos en la mesita y hablarme con amabilidad.- y eso es justo lo que hizo en aquél momento con nosotros.

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