Mis ojos se intercalaban de la puerta a Jauregui, y los de ella igual.
-Abre la puerta.
-No, abre tú.
-No, tú.
-Hazlo tú.
-Es tu casa.
-Cierto.- Sonrió divertida y se acercó con lentitud a la puerta. -¿Será buena idea?- Preguntó dudosa.
La verdad estaba en contra de que fuera buena idea, pero algo dentro de mí sentía que no pasaría nada malo.
-No lo sé.
-Mejor no la abro...- Sus palabras se cortaron al instante de que la puerta fue abierta abruptamente provocando que Jauregui se cayera hacia atrás.
Intenté no reírme, aunque fue casi imposible.
Ingresaron tres chicas a la pocilga, digo, a la casa de Lauren.
-¿Qué hacen ustedes aquí?- Interrogué en un tono molesto, parecían ser inofensivas, sin embargo, eso no quitaba el hecho de que hace un rato me sacaron un susto.
Jamás las había visto y por la expresión de Jauregui deducía que ella tampoco las conocía.
-¿Era necesario entrar de esa manera?- Reclamó la dueña de la casa mientras se levantaba y sobaba su trasero.
-Pues ustedes no abrían.- Se defendió la más alta.
-¿Por qué están aquí?- Volví a interrogar.
-Observamos cómo te perseguían y quisimos ayudar.-Contestó la morena.
-¿No pudieron mejor ayudarme mientras me estaban siguiendo?- Comenté indignada.
Claro, vienen justo ahora cuando ya no estoy en peligro.
-Esos son detallitos.- Le resto importancia la alta. -Además, puede que te perdieran esta vez, pero es seguro que volverán y te buscarán hasta encontrarte.- Agregó.
-Es cierto. Ellos no descansaran hasta obtener lo que desean de ti.- La morena me miró directamente. -Supongo que has de tener una idea de la que buscan.- Concluyó.
Negué con la cabeza.
-¿En serio no sabes?- Intervino la rubia. -Quieren las esferas del dragón.- La morena le dio un codazo.
Yo la miré sin entender de qué hablaba.
-No seas tonta Dinah, se llama esfera apocalíptica, ¿verdad?- Miró a la rubia menor y ella solo asintió, aún no había dicho una sola palabra, empezaba a creer que era muda.
-Es casi lo mismo.- Se encogió de hombros. -El punto es que estamos aquí porque queremos ayudarte a salvar el mundo.- Declaró la chica llamada Dinah.
¿Salvar el mundo?
¿Esto era una especie de cámara escondida?
Decidí seguirle la corriente.
-¿De verdad?- Pregunté "esperanzada".
-No, en realidad no teníamos nada mejor que hacer.- Admitió. -Podríamos estarnos besando, pero Normani no quiere.- Hizo un puchero y recibió un golpe de la morena. -¡Ouch! Eso dolió.- Se quejó. -Bueno, ella sí quiere salvar al mundo.- Señaló a la pequeña, todas las miradas se enfocaron en la más bajita.
-Mi nombre es Allyson Brooke Hernández, me enviaron desde el Vaticano.- Se presentó.
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Deseo concedido... ¿Don o maldición?
FanficCamila Cabello una adolescente de 18 años, verá su vida cambiar después de entrar a una extraña tienda y comprar una esfera misteriosa... #Humor #46 en Historia Corta (Septiembre 2017) #43 en Historia Corta (Octubre 2017) #104 en Humor (Noviembre 2...