Déjame Amarte

Movidas, parte 3

Se encontraba sentado en la ventana, sus ojos azules fijo en algún punto específico, frio, helado, tanto así que le erizaba la piel.

Aquel chico de cabellos negros y ojos azules, el cual era el mismo reflejo que Yumiko estaba allí, quieto, como esperando algo.

-la sangre llama a la sangre...-murmuró suavemente, lo podía ver, sus ojos la podían ver perfectamente. Sabía que estaba allí.

-Yumiko... ahora... necesito de tu ayuda- susurró suavemente, dejando que su voz viajara con la brisa.

El sonido de las suelas de los zapatos al pisar se escuchó tras de sí.

-tu eres... el noble de la otra vez?- preguntó el pelinegro sin girar.

-y tú el chico de la otra vez...que haces aquí?- preguntó Kain.

-sentado... esperando-. Murmuró desinteresadamente.

-qué esperas?-

-una respuesta...-fue lo único que dijo, el noble pudo sentir que este no le diría casi nada, así que simplemente no preguntó. Pero se quedó allí, cruzándose de brazos y apoyando su espalda en la pared, tal vez por aquel presentimiento que tenía, algo malo se acercaba y tal vez aquel niño tenía algo que ver, y respecto ha algo que se enteró por parte de Aidou, estaba más que claro, que el chico frente a él, era el sirviente de Shizuka.

-te llamas Neru, cierto?- preguntó.

-te enteraste por Ichiru?.

-no- fue la respuesta del vampiro.

-si, soy Neru... y tu eres Akatsuki , cierto?-

-precisamente- contestó calmadamente el pelinaranja.

Luego de eso, ambos estuvieron en completo silencio.

¿Cuánto tiempo?, ¿Quién sabe?, pero el silencio no fue incómodo, al menos no para Neru, ya que su atención no estaba en el vampiro, sino en su hermana, la cual podía verla y sentirla.

Sonrió de medio lado, obtuvo la respuesta, ahora podía hacer su movimiento también, aunque bien sabía que tal vez mucho no podría ayudar.

Se puso de pie y entró hacia adentro, ya no tenía por qué estar muriéndose de frío allí.

Quedó frente de Akatsuki, formó una sonrisa algo arrogante y le miró fijamente a los ojos. Casi hipnotizándolo con el mar azul que eran sus orbes.

-cuando me aburra de jugar al estudiante aquí... tal vez pase por tu habitación- dice para guiñarle un ojo y comenzar a caminar, pasando por al lado del vampiro e irse.

Akatsuki parpadeó ante lo dicho por aquel de oscuros cabellos, ¿a qué se refería?, Mas parecía una insinuación.

Lo vió caminar hasta perderlo de vista.

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La pareja Kuran se encontraban en el despacho del director, ya hacia algunos minutos que estaban allí, Cross les habia informado la situación actual y todo lo que hasta ahora habia acontecido.

Juuri dio un pequeño suspiro y se cruzó de brazos.

-o sea... que puede ir detrás de su hijo mayor....-murmuró pensativa.

-para mi es lo más lógico- contesta el rubio – aunque puede que esté equivocado-

Con lo que dijo Cross fue lo suficiente para llamar la atención de ambos Kuran.

-a qué se refiere?- preguntó Haruka realmente intrigado, si no iba a por Zero, debido a la peculiar naturaleza con la que éste habia nacido entonces ¿por quién más iría?.