Cuando la música de un baile pasa de electrónica a lenta es por una razón; bailar en pareja y Melody yo estábamos hasta arriba de comer nachos mojados y cócteles.
Todos se unieron y It Must Have Been Love hizo de su guiño ajustando una iluminación rojo pálido ante la bola de discoteca. Era como volver a una prom party de los ochenta. No obstante el aburrimiento pasó de efecto en cuanto me vibró el móvil.
Notificaciones apuntaban a mensajes de whatsapp. Una vez más era el número de la noche anterior. Daba sensación a Scary Movie.
WHATSAPP (Número desconocido)
19:23 -¿No vienes a saludarme?. ✓✓
19:23 -Aún no te he visto. ✓✓
19:23 -Tranquilo, en nada me verás. ✓✓
19:24 -Debes saber que paso de este juego. ✓✓
19:24 -En cuanto me veas, se acabará. ✓✓
19:25 -Ojala. ✓✓
19:25 -Te espero en el jardín de atrás. ✓✓
19:25 -Déjame unos minutos. ✓✓
-¿Me vas a dejar aquí tirada en medio de toda esta zarzuela?-tragó un poco de cóctel y me miró ansiada. -No me tardes demasiado, creo que volveré pronto a casa.
-Igual que yo...-me levanté. -No tardaré en venir.-le dí un beso en la mejilla y marche hasta el lugar que me había citado. Un jardín trasero de abetos bien cortado entre rosales y orquídeas negras.
Bajé las escaleras de atrás en lo que salía de la cocina y miré hacia el alrededor. Una luz brillante se veía a ratos entre unos arbustos y ahí vi una mano en señal de que ahí estaba. Era como encontrar un alfiler en un pajar.
Al llegar al jardín de las rosas, paré de trotar y caminé muy sereno mirando a los lados. Me tenía mala espina, malas sensaciones pero a la vez, lombrices recorrían mi cuerpo.
-No era tan difícil.-dijo Damien con una rosa en sus manos. Vestido con un esmoquin azul noche, mostró una sonrisa pícara y se acercó a mi oliendo la rosa.
-Gracias.-cogí la rosa que me entregaba. -¿Que te trae por aquí entre misterio y misterio?
-Nuevos aires...-puso sus manos sobre mis hombros y se acercó lentamente. -Necesitaba volver a verte. Simplemente y nada más.
-Ya veo que te gustan esos juegos de suspense.-asentí con la cabeza.
-Soy experto en entretenimiento.
-La verdad es que me impresiona volver a verte.
-Quería decírtelo pero al cambiar de numero...no pude encontrarte.
-Aparte te tenía bloqueado en el anterior con lo cual te era imposible...
-Si pero eso ya pasó porque ahora se que esos errores ya no se deben de cometer.
-Pues se lo dirás a tu futura pareja porque yo no prefiero vivirlos.
-¿Perdón? no intentes darle a la tuerca Cat, sabes que esto nunca acabó.
-¿No? idas y venidas, luego te vas del instituto y ahora vuelves con una rosa. He tenido que dejar a mi mejor amiga tirada y destrozada.
-Pero no es cosa tuya.
-¿Y que más da? mi amiga lo es todo y me ha mostrado más que tu en un año.
-Nunca te dejaste querer como los demás chicos.
-¿Habla el gay frustrado al que conocí como hetero?
-Aquellos eran tiempos de guerra, apenas me conocía.
-Pues para no conocerte, bien que conocías al resto del instituto. Damien, admite que has venido a perder el tiempo. Toma tu rosa y vuelve de donde viniste.-le dí la rosa ya casi partida y Damien se negó a cogerla dejándola sobre el suelo.
-Tu mismo.
-Lo sé, yo, yo mismo y el tiempo.
Con la misma me giré y abandoné aquel lugar. Subí de nuevo las escaleras y marché hacia Melody pero al volver hasta la barra, su copa permanecía allí, vacía. Melody se había dado a la fuga y de lo primero que sospeché fue de Zackary. No debía haberla dejado sola. En ese entonces le pregunte al coctelero.
-Perdone, ¿has visto a mi amiga, una chica rubia, de esta estatura, con un vestido rosa claro?-dije mientras iba detallando con gestos.
-Subió a la planta de arriba.
-Okey, muchas gracias.-dije corriendo al subir las escaleras. Entre escaleras y más escaleras, mis piernas estaba destrozadas y aún seguía sin rastro de Melody así que empecé a abrir cada una de las habitaciones. Varias estaban prácticamente vacías, otras permanecían cerradas, en otras había una pareja manteniendo relaciones sexuales y algunas ni mirarlas. Así que subí a la azotea que era la siguiente planta.
Allí giré a la derecha y encontré a Zackary y Melody juntos mirando el mar. Me paré un poco y me agaché detrás de un cuarto. No quería romper aquel momento. Dos borrachos bien borrachos, contando sus penas bajo una cálida noche de verano con la luna puesta sobre el cielo y una ligera brisa marina.
-He sido una tonta tener que coger una cabreo que ni yo misma llegué a comprender. Fui una estúpida, lo admito.
-No digas eso, todos nos sentimos mal.-la acogió en su hombro.
-Me sentí como una niña mimada y yo nunca he sido así y tu me conoces igual de bien que Cateo...pido perdón.-le miró fijamente alzando el dedo meñique.
-Disculpas aceptadas-alzó también el meñique y le dio un pequeño beso tímido. -Tenia que hacerlo.-rió.
-Vaya, que lindo...-dijo mirando al otro lado. -Por cosas como estas prefiero no perderte, me haces sentir especial, loca y una risueña, así te conocí.
-Recuerdo aquellos días de septiembre cuando nos sentábamos en el césped hablando de la vida, de lo que nos rodeaba y de la filosofía más explícita.
-Bonitos recuerdos...-sonrió.
-Hasta que llegó Cat y puso todo patas arriba.-rió también. -Gracias a el hemos vivido momentos inolvidables que por si fuera poco ¿dónde se ha metido?
-Marchó a hablar con Damien, esta en la fiesta.-asqueó con toda su alma. -Es buen chico y ha costado conocerle pero al fin y al cabo tiene mucho sentimientos por descubrir, gracias a el somos una pandilla única.
-Gracias chicos.-salí detrás del cuarto en lo que ambos se separaron. -No no, continuad así.-encogí de hombros y me puse de cuclillas. -Yo también me alegro de haberos conocido.
-No quería llorar pero se me ha salido una lágrima.-bromeaba Zackary con la tontería y la chispa que aún llevaba encima.
-¿Volvemos a la fiesta?-dijo Melody poniéndose los tacones. -Quiero disfrutar.
-¡Vamos!-dijimos Zackary y yo a la vez.
ESTÁS LEYENDO
Siempre ángeles © ✔️
Подростковая литератураEsta historia es desde aquí en adelante un fenómeno que describe así los cuentos de hadas como obras dónde siempre han acabado con una final feliz. Un príncipe encantador, una princesa hermosa, el famoso beso, las andaduras de la antagonista bella y...