Capítulo 18

54 8 0
                                    

—¿Durmió bien?—dijo Melody muy extrañada mientras se amarraba los cordones de sus zapatillas

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

—¿Durmió bien?—dijo Melody muy extrañada mientras se amarraba los cordones de sus zapatillas. —Es raro con lo nervioso que es el, seguro tenias un incienso en tu cuarto y por eso estaba cegado.

—¿Que dices? para nada, tal vez este más cercano porque Damien se ha ido.

—¿Y antes? son excusas baratas.—aludió Melody en lo que se sentaba en el suelo para hacer las flexiones. —Y hablando del rey de Roma...—dijo cuando Zackary apareció con un pantalón corto azul de chándal y una camiseta de tirantes blanca. Nos saludo y se marchó con unos amigos de clase al otro lado de la cancha.

—¿Ves? no es nada de otro mundo.—ladeaba la cabeza mientras hacía flexiones de brazos sin quitarle ojo de encima.

—¿Te imaginas que sienta algo? lo mataría.—rió sola en lo que yo había quedado mudo.

—¿Porque harías algo así?—arqué la ceja.

—Zack es nuestro amigo en común, somos hermanos juntos y sería muy turbio que tengas algo con el, para mi eso sería muy decepcionante y no te lo perdonaría.—se levantó.

—Lo entiendo y créeme, tampoco iba a pretender que pasara eso.

—Aparte si lo hubiera hecho ayer con el, el me lo hubiera contado e incluso quedaría como la zorra del instituto porque siempre acabas tirándote a todo cristo.

—Eso no es así.—crucé de brazos.

—Sea lo que sea estas advertido Cat.

—Pero ¿a ti que te pasa? juro que no tendría nada con Zack a menos que este borracho o cegado con medicamentos. No entiendo porque te asombras y adviertes de tantas cosas. Ni que lo fueras a perder.

—No es eso, es que él es muy importante, ya está.—dijo mientras Zackary se acercaba hasta nosotros.

—Hola Zack.—salude girándome hacia el mientras use una mano sobre su hombro. Melody miró con revuelo y se marchó hasta los vestuarios. Zackary se quedo confuso y no supo decir nada mientras yo puse de asombro. —En fin, crisis.—reí.

—¿Sabes si Melody tiene pareja para el baile de fin de curso?—preguntó mirando a todos los chicos de clase.

—La verdad es que no pero supongo que será contigo, como últimamente solo tiene ojos, voz y escucha para ti...—aparté mi mano y cogí un balón.

—¿Así? vaya, no lo sabía, pues espero que me acepte porque no se con quien ir y ella es mi único remedio. Una pean que no sea gay sabes...

—¿Perdón? yo no voy a ir al baile de fin de curso pero si iré para recoger mi diploma y a sacarme una foto con el profesor.

—¿No tienes algún chico especial por ahí aparte de Damien?

—La verdad es que no.

—¿Que? será una broma. No me puedo creer que hayas tirado meses de tu vida detrás de ese gilipollas en vez de estar con más gente.

—Me lo dices o me lo cuentas. Y además ¿porque tengo yo que ir a una baile? no es lo mío.

—¿Ah no? pero si tu fuiste a la de otoño y te encantó.

—Pero aquellos eran otros tiempos, era otro yo y estaba feliz.

—Lo que tu digas Cat.

HORAS DESPUÉS

La tarde transcurría de forma tranquila y serena. El perro de Melody rondaba por las habitaciones en cada momento mientras yo hacía un repaso a los apuntes que tenia repartidos por la cama de Melody. En ese entonces, Melody regresa de la cocina con un par de manzanas y se sentó sobre una silla pegada al escritorio.

—¿Que te había contado Zack cuando yo me fui?—dijo bastante interesada mientras daba un mordico a la manzana.

—Hablaba sobre el baile de fin de curso y preguntaba si ya tenias pareja.

—¿En serio? vaya...pues le hubieras dicho que si, sin más.

—Pero no fui capaz porque yo también suponía que tenías pareja.

—Llevo esperando meses para este momento, ¿como iba a dejarlo escapar? obvio que estaré con el de pareja y será todo un honor.

—¿Y cuando se lo vas a decir?—pregunté misterioso.

—Mañana mismo, en el recreo.

—Bien.—asentí con la mirada.

—Y sobre todo esto, te pido perdón.

—Es igual, no es la primera vez que tenemos problemas entre nosotros.—mostré una sonrisa tímida.

—Esta semana estoy bastante presionada con los exámenes y siempre lo acabo pagando con el resto, además lo que pasó con Damien y esto de Zackary me hacen sentir aún peor. Lo siento mucho.

—Disculpas aceptadas.

—Oye, ¿y tu?—arqueó una ceja.

—¿Te refieres a mi pareja? estará por ahí suelto, cabalgando como una mota de polvo en pleno verano al son del calor intenso y ardiente Sol.—fantaseé con el tema y seguí observando los apuntes.

—Venga, estoy segura de que alguien esta libre esperando tu respuesta. ¿No sabes quienes están aun sin pareja?

—No conozco mucha gente.—encogí de hombros y me levante a coger una de las manzanas que ella había traído.

—Te podría ayudar trayéndote a un chico.—se mordió el labio en lo que yo daba un mordisco.

—No gracias, no soy tan macabro y retorcido.—puse una mirada de cierta inseguridad.

—Es mi primo idiota, es gay también.—guiñó el ojo.

—De veras, no quiero a nadie en mi vida.—dejé la manzana sobre el plato.

—No pasa nada, es un niño muy tranquilo.—asintió.

—¡Melody, en serio, no quiero nada!—alcé la voz y suspiré hondo. No quiero ir al baile de fin de curso, ya se lo dije a Zackary. No estoy preparado para ir y menos para estar quieto y solo al lado de una esquina viendo como todos se divierten. Prefiero quedarme en casa.

—Cateo, no digas eso. Pobre...en serio, Zack y yo haremos todo lo posible para que estés alegre y así disfrutes con nosotros del baile. ¿Confías en mí?—alzó una mano.

—No se que decir...confiar ahora mismo es un decir.

—Anda, no seas tonto. En la obra hay varios chicos, ¿quien sabe si ahí pica alguno?—se levantó y cogió un póster de la obra en la que aparecían todos los fichajes, incluido yo. —¿Y este?

—¿Alfredo? ni hablar, es egocéntrico.

—¿Y este de acá?—señaló.

—¿Lucas? es muy golfo y además muy escurridizo.

—¿Y este que está a tu lado?—me miró.

—Apenas habla, es muy tímido con el mundo en si.—volteé la cabeza.

—Y por último...¿este?—miró de reojo.

—Tal vez.

—Mmm...hay mucha tela que cortar.—dijo mientras nos reímos los dos a la vez.


Siempre ángeles © ✔️Donde viven las historias. Descúbrelo ahora