Enigma ||Narry||Zouis||AU||DOM SUM||

Capítulo 25: Pesadillas

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Liam volvió con un vaso de agua.  Niall ya estaba orientado pero aún estaba nervioso.

-Ya ha pasado -dijo cuando Liam le dio el agua.

-Nunca pasa.  -Liam le pasó el brazo por los hombros.  Niall rompió a llorar.

-Volví a soñar con cómo me sacaban de casa.  El llanto de mi madre... y cuando llegue al centro. 

-Ahora estás seguro...

-Me estaban pegando...

-Eso fue el pasado, Niall.

Niall cerró los ojos.  Era pasado pero estaba demasiado clavado en su mente. 

En el sueño había vuelto a revivir todo.  Estaba jugando en el salón de casa con los dinosaurios de plástico cuando aquellos señores habían entrado. Habían esposado a su padre.  Su madre trató de huir, peleó pero le arrancaron al niño de los brazos.

Y luego esos primeros dos días en el centro.

No entendía ni una palabra de lo que decían.  En su casa se hablaba irlandés todo el rato.  Jamás había escuchado una palabra en inglés.  Como no respondía a las preguntas le catalogaron como conflictivo, aunque él entonces no entendía nada.  Tenía diez años.  Le metieron en un cuarto de aislamiento y le hablaban y gritaban en palabras que no sabía lo que significaban.

Según había podido averiguar después, había sido considerado un rebelde y esa era su forma de hacerle terapia de choque.  Como si fuese tan fácil, aún hablando inglés, olvidar los brazos de su madre.

No había comido en dos días, solo le daban agua y le habían pegado con la excusa de "castigo disciplinario" para que hablase. 

Al final del segundo día tuvo un colapso nervioso.  Le sedaron y le llevaron a la primera de sus muchas visitas a la enfermería.  Una de las limpiadoras tenía ascendencia irlandesa y les explicó que el chico no entendía nada.

Entonces le sacaron del aislamiento pero aquel no había sido ni mucho menos el final de su sufrimiento.

Eso sólo empezaba.

Volvió al presente.  Liam le abrazaba con su característico modo paternal. 

-Cuando empiezas a tener terrores nocturnos duran varias noches...

-Mierda, lo sé... ¿duermes conmigo?

Liam asintió y se metió en su cama, abrazándole mientras Niall aún temblaba. 

Su cabeza voló hacia ese Styles y la relación que el y Niall estaban estableciendo.  Styles tenía que darse cuenta de que su amante era más que un rostro bonito recubierto de descaro. Estaba roto y necesitaba alguien que supiera mantener juntas sus piezas.

Louis no podía dormir.

Zayn estaba en su cama y él se había levantado porque estar demasiado cerca de su cuerpo desnudo era jodido.

Apagó otro cigarrillo e iban... joder, el cenicero estaba lleno.  Se suponía que iba a dejarlo o reducirlo.  Puta mierda.  Encendió otro.

No podía dejar de pensar en Zayn.  En sus gemidos, en sus palabras.  En el modo en que le había pedido que le follase.  Pero no podía, en esas condiciones hubiera sido como abusar...

-¿Lo has oído?  No se puede -le dijo a su polla, dura y erecta entre sus piernas. 

La polla se quedó así.  Estupendo.  No podía ni controlar a un sum ni a su propio pene.

-Está bien -le dijo a la erección – vamos a ir al baño, me voy a dar una ducha y vamos a tener una charla tú y yo...

Estupendo, le estaba hablando a su polla.

Zayn le estaba volviendo definitivamente loco.

Entró en el baño de invitados.  Sólo le faltaba que el crío se levantase aún con todo el pedo y entrase mientras se hacía una paja.  Ese sería el fin absoluto de su credibilidad como dom, de su orgullo y también de su honor.

Abrió la ducha y se metió bajo el agua.  El agua estaba cálida.  Como debía de estar el estrecho blando pasaje del culo de Zayn...

Joder.

Se acarició la polla con rapidez y eficacia. No se detuvo en nada elaborado, se hizo una paja como si tuviese quince años otra vez.  Exactamente igual excepto porque en aquella época la cocaína hacía que no se corriera fácil y su frustración aumentase.

Bendita desintoxicación y bendita nueva vida, porque su polla estalló en una corrida impresionante en su mano, llenándole los dedos de su semen espeso y blanco. 

Se lavó y se vistió.

Abrió la puerta.  Zayn estaba durmiendo los efectos del tequila.  Perfecto, eso no había ocurrido, pensó vistiéndose.

Si nadie lo sabía, no había pasado.