Caroline. |Stephen J.|

26 | Pecado

Sirvo un par de bebidas a unos señores y dejo la barra en manos de Ambar, me encamino hasta la mesa donde Stephen está sentado junto a Mad y Dan. Lo veo sonreír y lanzarme una rápida mirada, sin poder evitar sonrío también. Diablos, estoy cayendo en la tentación de tirarme a sus brazos, mi cuerpo se eriza al recordar lo suave y caliente que es su piel, la dureza de sus músculos, sus manos... Santo Cielos, su agarre es demasiado firme e intenso, así como sus ojos son intensos. 

Pero más allá de su gran físico, es un gran hombre, es dulce, cariñoso, atento, divertido -aunque no parezca por su cara de serio y malo.-, demasiado educado y responsable, siempre me respeto, respeto mis gustos mis ideas, por más que no compartíamos unas cuantas, jamás discutíamos. Su carcajada llega a mis tímpanos y me derrito, como la primera vez que lo escuche reír, su risa es demasiado tierna.  

Sacudo mi cabeza y salgo de mi babeo por Stephen James, llego hasta su mesa y me siento al lado de Madinson. 

-- Te vi babear por tu tatuado -me susurra Mad y yo entorno mis ojos.- 

-- Oye -me llama Dan.- Será que Steph puede quedarse en tu casa esta semana? -pregunta y yo miro al tatuado frunciendo el ceño.- Iba a quedarse en casa pero la obra no está pronta aún 

-- ¿Qué obra? -pregunto confusa. Dan nunca me dijo que estaba reformando su casa.-

-- Decidimos expandir nuestro dormitorio -dice Dan y mira a Madinson.- Haré más chica la habitación de invitados y por eso él no puede quedarse, a menos que quieras que durma con los obreros y un montón de polvo y ladrillos...

-- Puedo quedarme en un hotel -comenta Stephen, seguramente vio mi cara de poker.- 

-- No, no hay problema en que te quedaras en casa -me encojo de hombros.- Además me vendría bien que te quedaras con Clara el sábado por la mañana ya que Rose no estará... -Rose era mi vecina que cuidaba a Clara por la noche, ya que yo estaba en el bar.-

-- Gracias Caro -Dan choca los puños conmigo y yo sonrío mirando a Stephen, el se muerde el labio inferior escondiendo una sonrisa. Diablos, espero no pecar con semejante dios en mi casa.- 

***

-- Tu duermes aqui -señalo mi habitación.- Yo dormiré con Clara -tomo unas prendas de ropas.- Espero no te moleste que entre medio temprano aqui para buscar ropa. 

-- Puedes dormir conmigo -dice y yo lo miro.- Digo, ya nos conocemos, podemos poner almohadas en el medio de la cama... 

-- Gracias -comento, y abro la puerta.- Pero vaya que caigas en la tentación -el ríe.- Buenas noches. 

-- Tu amigo tiene muchos tatuajes -comenta Clara cuando me acuesto a su lado.- Me gusta, se ve malo -yo río.- Si algun día un niño me molesta pediré que Steph me lleve al colegio, así me tendrán miedo -yo carcajeo y beso su cabeza.- 

-- Mañana podrás decirle eso -ella me mira.- El se quedará aquí de mañana, así tu duermes un rato más... después si quieres vas a la cafetería. 

-- Genial! -me abraza.- Eres la mejor hermana de la faz de la tierra, Lily.