Irrealidad (Louis Tomlinson)

7. ¿Quiénes son ustedes?

|7. ¿Quiénes son ustedes? |

Louis

― Tienen un minuto para decirnos quien demonios son ustedes y qué quieren ― dije poniéndome a la defensiva

― Estamos de su lado ― respondió Liam

― 56 segundos... ― dice Harry

― Si quisiéramos matarlos ya lo habríamos hecho ― dijo Jackson girando los ojos

― Vámonos de aquí ― le dije a Harry

Nos dimos media vuelta dispuestos a seguir con nuestro camino y regresar a casa. No me importa quiénes son estos chicos, pueden regresar por donde salieron. Apresuré el paso, mientras más rápido salgamos de aquí, mejor, no me apetece tener otro desagradable encuentro con banshees o aswangs.

― Esperen ― llamó James ―. Necesitamos su ayuda.

― No lo creo ― dije ―. Hicieron que una banshee se redujera en cenizas, además aseguran que podrían matarnos si lo quisieran, así que me parece que se pueden defender muy bien.

― Disculpa a Jackson, es un idiota ― habló Liam ―. No quería decir eso.

― No me interesa ― respondí

― En verdad necesitamos su ayuda ― insistió Liam ―. Nos persiguen demonios, y ellos son peores que las banshees.

Examiné su rostro intentando descifrar en su expresión si decía la verdad o no. Su expresión era seria y podría arriesgarme a decir que estaban siendo honestos. Dudo un momento, cuánto me gustaría tener telepatía para poder leer los pensamientos de los demás. ¿Debería confiar en ellos? Mi sentido común dice que son peligrosos, no cualquiera puede aniquiliar a alguien de la forma en la que el pelirrojo lo hizo con la banshee. ¿Quiénes son? ¿Qué son? ¿Brujos? No, no pueden serlo, esa clase de poderes no son de brujos. ¿Hechiceros? Es posible, los hechiceros siempre han sido mucho más poderosos que los brujos normales, pero éstos están casi extintos a causa de los demonios.

De cualquier forma, ese es problema de ellos, no voy a estar arriesgando mi trasero por alguien que apenas conozco. Además, hay algo en ellos que no me da buena espina, así que puedo hacerme a un lado, ignorarlos y seguir con mi complicada vida, lo último que necesito son más problemas.

― Ya tengo una larga lista de demonios que quieren mi cabeza en un pico ― respondí dando media vuelta ―. Así que no.

― Bueno, podríamos ayudarnos ― sonríe Liam

― No lo creo ― murmuré

Sé muy bien que no debo confiar en todos, lo he aprendido de la mala forma. Se ve que son tipos con los que hay que irse con cuidado, y no me pienso arriesgar con ellos, ya tengo suficiente con ese demonio de ojos rojos que casi acaba conmigo, prefiero ocuparme de regresar demonios al infierno que quieren asesinarme a ser un alma caritativa y ayudar a esos chicos.

Dimos un par de pasos alejándonos de ellos, Harry se detuvo y miró al rededor analizando nuestro entorno, siempre que hace eso no es buena señal. Por favor que no esa la banshee, mis oídos ya sufrieron mucho hoy.

― ¿Qué pasa? ― pregunté

― Olor del inframundo ― respondió Harry

― ¿Ellos? ― señalé a los cuatro chicos que estaban a menos de tres metros de nosotros

― No, ellos ― exclamó Harry tumbándome al suelo para evadir una bola de fuego.

Demonios, literalmente y de nuevo. ¿Qué acaso no se cansan de atacar a brujos todo el tiempo? Esos idiotas deberían conseguirse una vida, no sé, deberían buscar en Google algún pasatiempo además de cazar brujos inocentes.