CAPITULO 10 1/5

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Severus Snape tenía la sospecha de quien había enviado a los tres chicos de Slytherin a la enfermería. Aun así le parecía terrorífico y fascinante a partes iguales el pensar que su niño de 11 años era tan cruel como para poder hacer algo así. Tal vez aún hay esperanza para Harry y el Señor Oscuro. Tenía que hablar con Lucius y ver si por fin podrían sacar al pulgoso de la cárcel, sería un buen regalo de navidad para Harry, algo dormido por mucho tiempo se removio dentro de Severus. La esperanza, esta vez lo lograrian.

(***)

Harry despertó de buen humor, el haber torturado a esos chicos había sido una buena forma de eliminar el estrés que tenía. Hizo su rutina y se dirigió a la sala común, al llegar todos los cursos lo estaban esperando, al verlo llegar hicieron una venia y corearon "Buenos días mi rey, estamos a su servicio".

Harry sonrió e hizo una seña para que su corte se acerque.

(***)

Al dirigirse hacia el Gran Comedor todos los alumnos los miraban sorprendidos sin entender lo que pasaba, y al entrar los profesores lanzaron diversas exclamaciones.

Y es que hace 50 años que no veían a un Rey en Slytherin por la forma en la que era esta casa y sus disputas por el poder.

La mayoría de profesores estaban contentos pues 'conocían' a Harry y sabían que sería buena influencia. Aun que había uno que estaba que se lo llevaba el diablo.

Severus estaba extasiado y maravillado, Harry superaba sus expectativas una y otra vez, hacia cosas de las que no creía posibles para un niño de su edad. Claro que su exterior era tan imperturbable como siempre.

Tom estaba fascinado, el famoso niño que vivió no era para nada como lo esperaba, lo había estado evadiendo sutilmente estos meses hasta descubrir que era lo que quería y su descubrimiento lo había dejado extasiado y para que mentir, si tuviera cuerpo excitado a más no poder. A veces pensaba si enserio solo tenía 11 años y solo al recordar su edad se contenía.

Dumbledore estaba sonriente como si eso fuera de lo más normal, pero por dentro, quería estrangular a ese maldito mocoso que destruía sus planes.

-Juro que me las vas a pagar Potter, serás mi pieza lo quieras o no-pensó Dumbledore.

Lo que todos veían era a Harry Potter al frente, a su derecha un paso atrás se encontraba Draco Malfoy y detrás de este había 6 pasos de distancia entre el resto de cursos, la izquierda de Harry estaba vacía y atrás seguía un dúo compuesto por: Theodore Nott y Blaise Zabini, un paso atrás estaba Pansy Parkinson en el medio dejando dos espacios a su costado y a unos 4 pasos, el resto de cursos. Los cursos estaban ubicados en cuartetos empezando por séptimo y finalizando con primero.

Harry avanzó a la mitad de la mesa de Slytherin con los ojos de todo el comedor siguiéndolos.

Un alumno de cada curso empezando por tercero, se acercó a la corte y movieron suavemente las bancas hacia atrás. Se colocaron detrás y una vez que el Rey y la corte se sentaron, cada curso se sentó, a la izquierda de Harry de cuarto a primero, y a la derecha de quinto a séptimo. La corte se sentó de tal forma que Harry se encontraba de espaldas a la pared y un espacio vacío al frente para poder ver al resto del Gran Comedor.

Los representantes hicieron una reverencia al Rey y su corte y fueron a sus cursos a sentarse en la mitad de estos.

El Gran Comedor se hallaba en completo silencio, Harry y su corte los ignoraron y se dispusieron a desayunar. Al ver a su Rey el resto de Slytherin lo imitó.

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