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11. Yo Te Amo

Llegamos a la casa. Subimos a la habitación, ya que era un poco tarde. Me quité los tacones y los puse en su lugar. Tomé mi celular y vi que Gold me había mandado un mensaje.

-Te extraño, tonta. ¿Por qué te fuiste? -ella escribió

-Surgió algo con Harry y ya no pude volver para despedirme. 

-¿Qué? ¿Harry, se molestó? ¿Por qué? Voy a darle unas bofetadas cuando lo vea. No puedo creer que te haya alejado, lloraré todos los días hasta que vuelvas.

Hace demasiado no hablaba con Gold. Yo igual la extrañaba.

Dejé el celular, tomé mi pijama y me metí al baño para cambiarme y desmaquillarme y todo eso.

Supongo que a muchas les da no sé, pena o algo que las vean súper arregladas y luego sin maquillaje, pero la realidad es que si un chico te ama cuando estás en chongo y pants, te merece ver en vestido y tacones. Así de simple. 

No estoy 100% segura que Harry me ame en todo el sentido de la palabra, pero creo que me aprecia y simplemente, vivo con él, no voy a estar en maquillaje las 24 horas del día, 7 días a la semana. 

En resumen, me desmaquillé, me cepillé el cabello, me lavé la cara y por alguna extraña razón pude subir el cierre del vestido pero no podía bajarlo, salí y vi que Harry solo traía unos shorts, estaba sentado en la cama revisando su celular.

-¿Me ayudas con el vestido? -pregunté

-¿A qué? ¿A bajarlo? -dijo pícaro

-Sí, no puedo con el cierre. -reí

Caminé hacia él, Harry se paró y yo me puse de espaldas, haciendo mi cabello de lado. Harry bajó el cierre lentamente.

Cuando terminó de bajarlo, hizo mi vestido hacia el frente y yo lo tomé apoyándolo en mis hombros.

-Listo -dijo

-Gracias

Iba a dar un paso hacia el baño pero Harry me detuvo tomando mi mano y pegando mi cuerpo al suyo. Nuestros brazos rodeaban mi cuerpo.

Suavemente besó mi cuello, eso hizo que los vellos de mi nuca se erizaran. Sus besos fueron bajando a mis hombros estremeciéndome. Conozco a Harry, se lo que intenta.

Harry fue bajando mi vestido lentamente y yo se lo permití. Cuando éste cayó al suelo lo lancé con mi pie.

Me giré hacia Harry, sus manos rodeando mi cintura y las mías en su nuca. Lo miré, admiraba cada perfecta facción de su rostro.

Besé sus labios, él se sentó en la cama y yo en horcajadas a él, sus manos recorriendo mi silueta.

Harry se iba recostando y yo me inclinaba a su ritmo. Mis manos pegadas al colchón sosteniendo mi peso.

-Marissa -dijo en mis labios

Mi nombre me alarmó. Me separé. Sabía que si no lo hacía hora, después sería muy tarde. Francamente no estaba lista, solo llevábamos un mes, por favor.

-¿Ocurre algo? -preguntó

-No puedo hacerlo, Harry.

-¿Hacer qué?

-Tú sabes que

-Ah, ya. ¿Por qué no?

-No lo sé, no me siento lista aún

-Pero si te sentías lista esa noche en el club

-Es diferente, yo sabía que no iba a pasar nada

-¿Qué hay de tus otros novios? Con ellos sí

-Harry, no insistas, hay una razón

-¿Cuál es?

-No quiero que lo nuestro sea como lo que tenía con ellos

-¿A qué te refieres?

-Con ellos, me dejaba llevar por el momento y luego todo se volvía raro porque yo no les importaba, los dejaba de ver, se conseguían a otra, cosas así y además ellos no significaban tanto para mí como lo haces tú. No quiero que sea igual.

-Amor, no lo será, te lo prometo.

-¿De verdad?

-Sí, Marissa. Nunca te haría algo así, a diferencia de ellos, yo te amo.

Sonreí ante sus palabras. 

“Te amo”

Lo había dicho. Dios, lo había dicho. 

Nunca creí que esto sería posible. Harry amando a alguien que no fuera él mismo. Okay no, pero nunca creí que me lo fuera a decir a mí. Sé que lo decía en verdad, sonaba verdad. 

-¿Qué? -pregunté con una sonrisa

-Sí, te amo. Lo dije y se lo puedo decir al mundo. Yo, Harry Styles, te amo, Marissa Hudson. ¡Yo TE AMO! ¡TE AMO! -gritó

-Shh, los vecinos nos van a regañar -reí

-¿Y qué? Lo peor que puede pasar es que nos peguen con sus bastones porque la mayoría son viejillos  millonarios. -rió- Lo digo en serio, Marissa, te amo con todo mi ser. 

Reí y abracé a Harry con todas mis fuerzas. 

Mis otros novios también me lo habían dicho, pero nunca como Harry, de verdad puedes distinguir una mentira ya que escuchas lo mismo pero en realidad. Harry lo decía en serio. 

-Bueno, iré a ponerme mi pijama -dije

Bajé de la cama pero Harry tomó mi brazo y no me dejó ir.

-No lo harás -dijo

-¿Por qué no? No dormiré en ropa interior, me dará frio. ¿Sabes? 

-No porque yo te abrazaré.

Volví con Harry, ambos entramos a la cama, su cabeza en las almohadas y la mia en su pecho. Sus brazos rodeándome y recorriendo los míos. Dormimos en cuestión de segundos.