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13. Reemplazo

Había despertado hace 30 minutos, veía silenciosamente a un punto fijo en la pared.

-Marissa, se que estás despierta, por favor háblame, ya han pasado 2 días y te necesito. -suplicó Harry.

Que estuviéramos en la misma cama no significaba que merecía mi trato, solo que yo no quería dormir en el sofá de nuevo, el sofá no es agradable ni bueno, deja un horrible dolor de espalda.

Pero si Harry se hubiera comportado como un hombre de verdad, él hubiera dormido en el sofá.

Me había mentido, mentido como si yo fuera alguna clase de idiota.

-¿Harry, te ocurrió algo en la espalda? -pregunté hace 2 días.

-No, nada. ¿Por qué preguntas? -dijo y se sentó con la espalda en la cabecera de la cama. 

-Tienes algunas heridas. ¿Quieres que te ayude? -dije tratando de acercarme

-No -dijo y se paró- Estoy bien, fueron de ayer, cuando fui a correr en la tarde con Zayn. ¿No te conté? Estábamos corriendo y tropecé y me lastimé con unas rocas, por eso mi espalda tiene estas marcas 

-En la mañana no las tenías.

-Entonces no fue ayer, fue hoy. A las 6 que salí con Zayn a correr.

-Harry, no soy estúpida. A las 6 estábamos con Zayn en el departamento de Holly ¿Así arreglaron las cosas ella y tú?

-¿De que me estás hablando? Solo fuimos a su habitación a hablar sobre nuestros problemas.

-Harry...

-Es verdad. Tal vez nos besamos un poco pero nada más

-¿Así que si la besaste?

-Pero solo eso, creo.

-¿Creo? Prefiero que admitas que lo hiciste con ella a tener que seguir escuchando tus mentiras.

-¿Por que piensas que son mentiras?

-Porque tienes unas uñas extremadamente marcadas en la espalda y te aseguro que ni Perrie ni Zayn ni yo las hicimos. 

-Si ya sabes la verdad, ¿Por qué quieres que yo la diga?

-Porque espero que seas un poquito hombre y digas la verdad y aceptes tus errores, eso es lo que un buen novio haría.

-¿Así que no soy un buen novio? ¿Que te parece si dejo de ser tu novio? Porque puedes no creerme en el asunto de Holly, pero créeme cuando digo que tu eres una basura como novia. -gritó

-Perfecto. ¿Qué más? -dije retadora

-No te necesito, joder, no necesito toda esta mierda. 

-¡Continúa!

-Ahora soy libre de hacer lo que yo quiera sin aprobación de nadie. ¡Ni de Zayn, ni de Perrie ni de ninguna zorra barata como tú! -gritó

Mi mano golpeó su mejilla fuertemente. Lo que dijo dolió, dolió más que cualquier otra cosa que pudo haber dicho. Unas lágrimas cayeron pero las limpié rápidamente. 

Moraleja: nunca llames "Zorra" a la chica que alguna vez llamaste "Princesa"

-¿Siempre pensaste eso de mí? -pregunté con un hilo de voz

-No, lo siento tanto, Marissa. No quería decir eso.

Harry se acercó a mí para abrazarme pero lo evité.

-No me toques. -reclamé

-Marissa, yo...

-Siempre fui su reemplazo y siempre lo seré.

El llanto me invadió al decir la última oración. Tomé mi almohada y dos cobijas y me fui de una habitación a otra buscando un sillón para dormir. Porque yo no dormiría cerca de ese patán.

Acomodé mis cosas en el sillón y traté de dormir, aunque sabía que sería imposible. Como media hora después, Harry entró y yo me giré para que no me hablara. No lo hizo, solo me puso más cobijas porque sabía que me congelaría.

Terminé de recordar. Me paré y me dirigí a la cocina, no me importó le que dijo, él lo notó y me siguió. 

-Marissa... por favor, háblame.

-¿Por qué habría de?

-Porque ya han pasado 2 días.

-¿Y crees 2 días son suficientes? ¿Crees que después de 2 días vamos a actuar como si nada hubiera pasado?

-En verdad lo siento.

-Yo también lo siento. Lo siento por creer que podía confiar en ti.

-Desde ahora en adelante nada de secretos. Si estás aquí es porque cuando te vi, supe que eras la indicada. Te traje porque no soportaba la idea de que otra persona te tuviera. Por favor, piénsalo.

-No lo sé, Harry. Me lastimaste y lo sabes.

-Perdón. Estaba frustrado, no quería decirte la verdad porque sabía que te enojarías. Yo se que lo único que querías era escucharla y por eso nos enojamos. Te dije cosas muy horribles y te prometo que eso no es lo que pienso de ti, nunca lo pensé y nunca lo pensaré, lo dije para hacerte sentir mal. En serio lo siento. Por favor perdóname.

Harry se puso de rodillas suplicando como un niño pequeño. No podía rechazarlo cuando se comportaba así.

-Ya qué. -dije

Harry me abrazó. Yo no estaba segura de que estuviera haciendo lo correcto, pero no me importó.

-¿Podemos hacer como si esto no hubiera pasado? -preguntó

-No lo sé, Harry. 

-Al menos cuando te grité que no quería ser tu novio y que eres una mierda y quien sabe cuántas cosas más. ¿Sí? Por favor. 

-Está bien

Harry se inclinó un poco y me dio un tierno beso en los labios.

-En serio lo siento. Por favor perdóname.

-Está bien.