18. Eso Que Quieres

122 1 0
                                    

Pasaron unos meses y Harry y yo no habíamos peleado para nada. Habíamos dejado a Holly atrás. Todo volvía a ser como antes.

Esta noche, uno de los amigos de Zayn nos había invitado a un club e iríamos. 

Me puse un vestido hermoso, unos tacones, me maquillé, arreglé mi cabello y bajé las escaleras, Harry ya me esperaba en la sala. Se veía exageradamente bien.

-Te ves hermosa -dijo al verme- Aunque siempre pero hoy demasiado

-Gracias -sonreí

Harry caminó hacia mí y puso sus manos en mi cintura.

-Espero que todos sepan que eres mi novia.

-Creo que lo sabrán, voy a estar contigo.

Harry presionó sus labios contra los míos. Tomó mi nuca para profundizar el beso. Nos separamos por falta de oxígeno y salimos.

Subimos al coche y nos dirigimos a casa de Zayn, Harry tocó el timbre y él abrió, lo saludamos y luego salió Perrie, ella también se veía increíble. 

En el estacionamiento habían chicos recargados en sus autos, algunos besando a sus novias, otros fumando, había de todo.

Entramos por la puerta trasera y el amigo de Zayn nos saludó y nos dejó pasar. El ambiente del club era increíble. La música era buena, los tragos también, todos se divertían bailando y bebiendo.

Nos dirigieron a una mesa en una zona especial, era el segundo piso. No había mucha gente ahí, eran alrededor de 10 mesas. Harry y Zayn se quedaron ahí y Perrie y yo bajamos a bailar.

Pasaron unos minutos y Harry y Zayn se acercaron, Perrie y Zayn fueron a otra parte de la pista.

-Hola -dije

-...Hola -tardó en responder

-¿Sucede algo?

-Ese chico te está mirando como si fueras su presa o algo

Volteé y sí, me estaba viendo de una manera que me incomodaba.

-Vayamos a otro lado, Harry.

-Pero primero... -dijo caminando

-No causes problemas -lo seguí

-¿Puedes dejar de ver a mi novia? -dijo Harry molesto

-Ella es tu novia, no te creo, un imbécil como tú no merece a una chica como ella. Dios, está tan buena -respondió el chico

Harry trató de golpearlo pero yo lo detuve. Nos dirigimos a otro lado antes de que yo también lo golpeara en la cara.

-Déjame golpearlo aunque sea una vez

-Yo también quiero pero no lo vale

Harry me dio un beso y luego seguimos bailando, fuimos por unas bebidas, Harry iba a conducir de vuelta a casa así que pidió algo suave. Yo le dije que pidiera algo por mí y caminé a la mesa.

-¿Te cansaste tan rápido? -preguntó Perrie mientras subíamos las escaleras

-Los tacones me están matando.

-A mi igual.

Dimos unos pasos y llegamos a la mesa. Perrie dejó su bebida y la de Zayn en la mesa y se sentó.

-¿Qué es eso? -pregunté apuntando a la bebida de Perrie que tenía un color muy raro.

-Pruébalo, si te gusta pides uno.

Perrie me acercó su vaso y le di un trago y me encantó

-Está delicioso -dije devolviéndole el vaso

-Lo sé. Lo único malo es que se sube súper rápido

-La última vez que vinimos lo pidió y se reía hasta del semáforo que cambiaba de rojo a verde.

Harry llegó con nuestras bebidas. La mia estaba deliciosa, no tanto como la de Perrie pero aún deliciosa.

Pasaron unas horas y seguíamos bebiendo, la noche se pasó súper rápido y Harry me indicó que nos iríamos. En unas horas iba a ser imposible salir de ese lugar. Nos despedimos de Zayn y Perrie y nos dirigimos al carro de Harry.

No sé que era lo que había tomado pero me sentía llena de energía y alegría. Miré a Harry. Tenía tantas ganas de besarlo, de jugar con su cabello.

Llegamos a la casa y Harry se estacionó. Entramos, subimos a la habitación y Harry estaba muy cansado. Pero yo sé cómo resolver eso.

Me quité el vestido. Quedé en ropa interior y lo colgué en un gancho dentro del armario.

Harry me miraba extrañado. Entré a la cama y me coloqué junto a él.

-¿No vas a ponerte la pijama? -preguntó

-Si lo hago, no puedo hacer esto -dije y me puse a horcajadas en él.

Me incliné y besé a Harry. Sus manos fueron a mi cintura. Mis besos fueron bajando a su cuello y a su pecho.

-Te amo, Harry. Te mereces eso que quieres

-¿De qué hablas?

-Tú sabes de que hablo -dije sobre su piel

-No vuelvas a beber lo que Perrie -rió

-¿Por qué no? Tú quieres estar conmigo. Hoy te lo estoy ofreciendo y lo estás negando. ¿Qué le pasó a Harry Styles?

-Marissa, prefiero que estés sobria cuando todo esto pase. Quiero que lo recuerdes.

-Lo voy a recordar, Harry.

-No, no lo vas a hacer. Cuando despiertes y veas que tu ropa está en el suelo lo primero que vas a hacer va a ser despertarme con un gran golpe.

-Está bien, si tú no quieres pues no lo quieres y ya.

Me quité de él pero me puse a su lado de espaldas indicándole que me abrazara, eso hizo y nos dormimos en cuestión de minutos.

HostageDonde viven las historias. Descúbrelo ahora