#Vida Sin Límite //PAUSADA//

Capítulo 5: "Lo siento, me deje llevar"

HOLA AQUI YO, OTRA VEZ, LES DEJO ESTE CAPITULO ESPERO Y LES GUSTE.

-Patsy.

gracias Eider

En una moto. Ahí estaba yo, pensando en otras cosas, súper distraída.

La moto paro, me sentía muy mareada, Louis bajo dejándome a mi arriba de la moto.

-         ¿vas a bajar? – pregunto.

-         Ah… si – dije bajando, me hubiese caído si no fuera por el –gracias.

-         Te llevare dentro, así no te caes al suelo y estas en mis brazos –dijo. Dios este chico está loco.

Llegamos a mi puerta, la abrí y él se quedó ahí parado, y yo que pensaba que se iría.

-         Gracias por el aventón –dije.

-         ¿no me invitaras a pasar? –pregunto.

Aghh.

-         No y adiós –dije cerrando la puerta, pero no pude, ya que él puso un pie entre el marco y la puerta.

-         ¿Qué quieres? –pregunte.

Un maldito dolor de cabeza me hizo soltar la puerta, y tomar mi cabeza entre mis manos, me recargue en la pared, iba resbalándome hacia el suelo. El sonido de la puerta al cerrarse me dio un gran alivio, al saber que el chico se había ido, pero al notar un cuerpo arrodillado frente a mí, alce la cabeza aun con mis manos en ella, me encontré con esos ojos azules.

-         ¿estás bien?- dijo parándose y tendiéndome una mano, la tome y me pare, bueno el me paro.

-         Si – mentí respondiendo a su pregunta -¿ya te vas? –pregunte algo desesperada quería estar sola.

-         Tan rápido me estas echando – afirmo poniendo cara de bebe.

-         Si… bueno no, es solo que quiero estar sola, por favor – dije, un dolor muy fuerte en el estómago me hizo gritar – AH – me puse las manos en el estómago.

-         ¿no que estabas bien?, ven te llevare a tu cama- dijo. Me tomo de la cintura y fue directo a mi cuarto ya que no quedaba nada lejos de la puerta, me puso suavemente sobre esta y quito su mano de mi cintura.

-         Gra…gracias –dije ya que su rostro estaba muy cerca del mío – amm –dije algo incomoda- sigues sobre mí.

-         Oh lo siento –dijo, el me miraba con deseo, yo no tengo mucha experiencia con hombres, y obviamente nunca he tenido a alguien tan cerca de mí.

-         Está bien –dije, pero seguía cerca de mí, bajo su mirada a mis labios, se veía un gran deseo en sus ojos, se fue acercando poco a poco, su nariz roso con la mía, me sentía… ¿viva?, nunca había besado a nadie, quería detenerlo, pero también quería que me besara, algo me atraía de él, no me gustaba, claro está, ni me gustara, no planeo enamorarme ya que me queda poco tiempo de…

Sus labios en los míos interrumpieron mis pensamientos, se sentía algo loco, su lengua entro en mi boca algo desesperada buscando la mía, puse mis manos en su cuello, el empezó a acariciar mi pierna, un escalofrió recorrió mi cuerpo haciéndome gemir, si nunca había besado a nadie, nadie me había tocado.

Mis manos pasaron por su pecho sobre la tela de su camisa a botone. Llegué al primer botón de su camisa, se apartó con una sonrisa y se quitó la chaqueta negra que traía sobre la camisa a botones, le desabotone la camisa botón por botón pero sin quitársela, me beso, mis manos recorrieron su torso desnudo, sus labios seguían sobre los míos sentí su sonrisa sobre mis labios. “dios ¿Qué estoy haciendo?” bueno yo no quiero morir virgen, tengo que disfrutar todo lo que la vida me estaba dando, por ejemplo Louis. Desabotono los primeros botones de mi blusa, dejando un escote provocativo, miro mis pechos y sonrió, dios este hombre no deja de sonreír. Quite la camisa de su cuerpo y el quito la mía, dio un beso en la línea divisora de mis pechos. Me estremecí… me gusto, ¡ME GUSTO!, miro mi cuerpo todavía con ropa pero solo sin la blusa.

-         Natali…

Lo bese y sonrió entre mis labios, se sentía algo loco, paso su mano por mi vientre y rápidamente me aparte.

-         Yo… esto… esto –tartamudeaba.

-         Yo lo siento –dijo Louis nervioso –enserio lo siento me deje llevar.

-         Yo también lo siento –dije.

Busque mi blusa, no la encontraba, él se puso su camisa, la estaba abotonando mientras yo buscaba mi blusa.

-         Aquí esta –dijo dándome la blusa, lo mire algo apenada – en serio lo siento me deje llevar – asentí, tome la blusa y me la puse, abotone mis pantalones, ¿en qué momento los desabotono?

-         Yo… lo siento pero…

-         Yo –interrumpió – fui yo, lo siento, me tengo que ir –dijo

-         Si… yo… -mierda me siento muy mareada.

-         ¿estás bien? –pregunto. Si, lo estoy, le quería responder pero no podía.

-         Tengo que descansar –dije abriendo la puerta de mi habitación para que saliera, pasamos por la pequeña sala y abrí la puerta de salida, lo mire y el me miro, se acercó a mí, dios esos labios me llamaban, hay dios que cosas digo, sin más me beso mientras pensaba y pum se apartó.

-         Lo siento fui yo, me tengo que ir – dijo cerrando la puerta tras él y dejándome confundida.

-         Adiós – dije después de un minuto.