[EDITANDO] MI ESCLAVA SEXUAL [+18] 1ra. Temporada

Capítulo 16

De un momento a otro reaccionó y se apresuró a salir, intentó seguir su instinto y caminó por varios pasillos pero no había rastro de ella. Se preguntaba si se había logrado escapar por fin. Tomando varios mechones de su cabello exhaló con frustración.

No iba a perder a su juguete por una pelea que le parecía absurda. Ella debía entender cuál era su lugar, si él tenía momentos a solas con Hyuna eso no debería importarle, ambas tenían el mismo papel, a diferencia de Hyuna, por alguna razón se estaba volviendo pasajero y poco placentero.

Incluso después de haber tenido sexo con ella aun no sentía saciedad de placer, más temprano cuando _________ se había entregado había sido tal y como él lo había supuesto, uno de los mejores polvos que se había dado el lujo de tener.

No recordaba cuando fue la ultima vez que había disfrutado tanto estar follando con alguien. No después de Krysten. Ese era otro tema que prefería no tocar por ahora.

Buscó desesperadamente a su esclava y parecía volverse loco de tanto dar vueltas, al estar todas las paredes pintadas del mismo color lo hacía verse como si sólo estuviera caminando en círculos.

—¡Maldita sea!. —gritó cuando no podía encontrarla.

Muy bien podía haber pedido ayuda de sus seguidores, pero ya no confiaba en ellos, no desde que Jin y Yongguk lo habían desobedecido y la habían herido, o al menos lo intentaron.

Subió las escaleras situadas dentro de los mismos pasillos que lo llevaban a la siguiente planta, dio sólo dos giros para cuando la encontró recargada contra la pared. Suspiró aliviado y la observó desde la distancia. Tenía sus dos manos cubriendo su rostro, su pecho vibraba ante las lágrimas y los sollozos que intentaba callar.

Caminando hacia ella se detuvo justo enfrente, se quedó allí de pie esperando que ella se diera cuenta de su presencia y lo mirara, pero al no ver reacción de su parte se inclinó más cerca y apoyó sus manos a sus costados acorralándola en silencio.

—¿Cómo llegaste aquí?. —preguntó mientras parecía intentar mirar más allá del dorso de sus manos.

Poco a poco ella bajó sus manos y su mirada estaba roja, claramente no había dejado de llorar desde que se había escapado.

—Te pregunté _________. ¿Cómo llegaste hasta aquí?. —su voz tratando de no ser tan brusca e irritante como siempre parecía sonar.

—Sólo corrí. —talló sus ojos tratando de detener el llanto y se encogió en su mismo lugar rogando porque él dejará de gritarle por unos momentos, se sentía sola y vacía.

Antes podía aferrarse ante la idea de que Jungkook la salvaría y que su amor era lo único que mantenía lleno su corazón, pero ahora todo se sentía como mentira, no había nada de lo que podía apoyarse. No había nada más en que creer.

—¿Y por qué estás llorando? ¿Por qué te detuviste precisamente aquí?.

Realmente estaba teniendo una leve batalla contra su ira, no quería pensar que tal vez estaba buscando a Suga o incluso a alguien más.

—Me perdí. —dijo con suavidad después de unos segundos.

—Ya veo. —contestó aliviado, ella solía dar respuestas que lo hacían querer cerrarle la boca a la fuerza.— Vamos a la habitación.

—¡No!. —dijo cuando su mano se envolvía en su muñeca para guiarla.— No voy a regresar contigo. Prefiero buscar a Suga.

Y ahí estaba la razón por la que antes estaba frustrado.

—¡Suga Suga Suga SUGA!. —repitió como si aquello le hiciera grabarse la idea de que ella siempre iba a preferir a su hermano sobre él.

—Siempre me gritas. —añadió en su defensa.— Siempre te portas como un patán.