CAPÍTULO 40.

213 24 30
                                    

Narra Daniel.

Me daba miedo mi poder. Era valioso, temido e importante, pero a mi me asustaba. Tenía miedo de cerrar los ojos y verme solo en un futuro, ver morir a alguien o ver a alguien sufrir. Yo aún no tengo un alma y tengo pocas esperanzas ya de encontrarla, ya que si pasas los 40 o 50 años y no la has encontrado es que no hay ninguna persona destinada a estar con tal vampiro...

De pequeño creía que como tenía un gemelo no me haría falta nadie más, alomejor alguna novia por ahí pero apenas importante...pero cuando Jesús conoció a Andrea no se separa de ella y creo que yo también debería tener a alguien...

Tenía intriga... En mi visión vi como una especie de guerra en la que estábamos Jesús y yo, pero, ¿cómo terminaría eso? ¿por qué pasó eso..?
Quería saberlo pero no me atrevía...
Lo siento Jesús pero lo tendrás que descubrir tú...

Narra Andrea

+ ¿Eres idiota, niña? Te he dicho que me traigas mi móvil hace como 20 minutos.

- Yo no soy tu sirvienta Victoria.

+ Pero lo haces porque aquí mandamos nosotros -me dice Alan de mala manera-.

No sé por qué estaba con él. No recordoba nada, según Arturo por mi golpe en la cabeza pero...algo pasaba, no encontraba sentido a nada, yo odiaba a Victoria y Alan no me amaba...pero yo estaba con él porque creo que yo lo quiero...pero no sé, algo por dentro me dice que yo amo a otra persona...

+ Basta de estupideces, Andrea ven conmigo -me dice Arturo y asiento-.

Vamos a su despacho.

+ Verás, Andrea. He estado leyendo. La manera de pasar tu poder a otra persona es tan fácil como, ¡decir unas palabras en latín! Aún no sé qué palabras pero te prometo que lo averiguaré, ¿si?

- Verás, Arturo -trago saliva- yo no creo que quiera daros mi poder... Si es mío es por algo...y a mí me gusta...

Miro al suelo.

+ No se trata ya de que quieras o no quieras, debes darmelo, cometieron el error de dartelo a ti y no a nosotros, tú no te lo mereces, nosotros sí.

- Pero me gusta...sin mi poder..no sería nada...

+ Escuchame, bonita -me agarra fuerte del brazo, haciéndome daño- tú harás lo que se te diga porque estás aquí para servir, ¿¡vale!?

Sollozo.

- ¡No quiero estar aquí! ¡Quiero ir a la Tierra! ¡Quiero ir a la Tierra!

+ ¡Joder! -hace que me teletransporte a la tierra-.

Lloro.

Ando por el extraño bosque en el que siempre estaba. Era inmenso.

Me siento en el suelo frustrada y congelo con mis manos piedrecitas, ramas y hojas secas.

Oigo un sonido. Me levanto y ando hacia allí.

Veo a un pequeño ciervo, estaba herido. Tenía una mordedura en el cuello y se estaba sangrando.

Me acerco con cuidado de no asustarlo pero él me mira y no me tiene miedo. Que raro...este tipo de animales suelen huir de formas humanas.

- Vale, chico... Tranquilo -presiono mi mano sobre su herida y le acaricio la cabeza-.

Veo como una luz entre mis dedos presionando su herida, a los minutos aparto la mano y no había nada, sólo rastros de sangre que limpié con agua que salió de mis manos.

- ¿Has visto? No es para tanto.

+ Eso ha sido increíble...

El ciervo se va corriendo al ver a la chica de detrás de mí.

- Oh, bueno...gracias. Es como mi "trabajo" -hago las comillas con los dedos-.

+ Soy Ainara.

- Yo Andrea.

+ Eres vampiresa, pero hueles a lobo.

- Soy híbrida.

Me mira fijamente y al rato sonríe inmensamente.

+ ¡Eres la elegida! ¿¡Sabes lo que mi padre me habló de ti!? ¡No pensaba que eras real! -me abraza fuerte y al poco se separa- Lo siento estoy alterada, pero es que estoy súper feliz. Oh, cielo, ¡dime que podemos ser amigas!

Sonrio, esta chica me cae bien.

+ Oh no, pero espera, ¿vives sola? No, no, esto no puede ser. ¿No tienes alma o mate?

- Em, yo vivo en el infierno...con mi novio Alan y su familia...

+ Pero Alan...es un demonio...

- Bueno, supuestamente llevamos 5 años.

+ ¿Supuestamente?

- Me desperté y me dijeron que había perdido la memoria por culpa de un tal vampiro Jesús.

+ ¿Jesús?

- Sí pero no recuerdo nada...sólo sé lo que me han dicho...

+ Pero tu eres como un ángel, no puedes estar con un ser tan malvado como un demonio.

Suspiro.

+ Te recuerdo que los vampiros al morir van también al infierno. Sois mis súbditos también -dice la voz de Arturo a mis espaldas-.

Lo miro.

+ Usted es.... -Ainara mira aterrada a Arturo como si no se pensara que es el mismísimo diablo-.

+ Lo soy - dice él- Andrea vámonos.

Suspiro y asiento y cojo su mano. Miro triste a Ainara antes de que Arturo nos lleve otra vez al infierno.






¡Hola!
Ha estado bien el capítulo y necesito muchos comentarios y votos para seguir
¡Un beso!

ENTRE DOS ALMAS [ GEMELIERS ]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora