Drabbles. {Larry}

12. Amor.

Dicen que el humano es un ser que se deja guiar por dos principales emociones; el miedo y el amor.

"Tengo miedo" susurró, se acercó más al otro lado de la cama y recostó la cabeza sobre el pecho del contrario "¿Y si nos equivocamos, Harry?"

"No digas eso" sonrió, manteniendo los ojos cerrados "Seremos los mejores padres del mundo"

Quizás llevaban más de seis noches sin poder dormir, pero es que las circunstancias no seguían siendo las mismas luego de que la pequeña Danae inundara sus vidas con su dulce y sincera presencia.

"Te toca a ti" murmuró somnoliento, giró su cuerpo y le dio la espalda.

"No, yo lo hice la última vez" imitó los movimientos del castaño, dándole la espalda.

"Y una mierda, Harry" susurró, casi dormido.

"¡Louis! La bebé no puede escucharte decir esas palabras"

"¿Oops?" Louis no sabía si aquellos llantos eran parte de sus sueños o provenían de la hermosa cuna al lado de su gran cama matrimonial "Por favor... duérmela"

Harry suspiró con pesadez y se sentó con lentitud, frotó su rostro y abrió los ojos intentando distinguir los espacios dentro de su dormitorio.

Se estiró un poco y caminó hacia la cuna, tomando a la bebé entre sus brazos "Mira que hermosa eres"

"¿Quién yo?" Louis sonrió en su dirección.

Harry intentó contener una pequeña sonrisa, pero se le hizo imposible. Empezó a arrullar a la bebé y se acercó a la cama "No, tú cállate y bésame"

(...)

"Oh, mierda" miró por tercera vez hacia la puerta, esperando a que mágicamente Harry aparezca con una enorme sonrisa.

Tenía a Danae entre sus brazos y, para ser honestos, la bebé no estaba oliendo a rosas y jazmines.

Estiró sus manos, apreciando el rostro de su hija.

"No quiero morir, bebé" fingió sollozar "Ni siquiera sé dónde está la pañalera"

Danae sonrió ante su frustración.

"Escúchame" entrecerró los ojos "No te pases de lista, jovencita"

Ella carcajeó ante la repentina molestia de su padre.

"Te estás riéndome de mí, ¿eh?"

La bebé cambió su expresión al escuchar la puerta abriéndose.

Y empezó a llorar.

"Ya llegué" el rizado dejó las compras sobre el piso y elevó su rostro "Louis, ¿qué le hiciste?"

Caminó con rapidez hacia su bebé y la cargó "No llores, bebé hermosa. Te cambiaré el pañal" besó repetidas veces las mejillas de la castaña, haciéndola reír.

Louis alzó las cejas, sonriendo "¿Para mí no hay besos?" susurró en un puchero.

Harry lo miró con seriedad "No"

Danae carcajeó por segunda vez.

(...)

Harry y Louis descansaban en el sofá, mirando la televisión mientras que Danae gateaba en la alfombra, jugando.

"Louis" susurró, empezando a alterarse "¿Estás viendo eso?" movió el hombro del castaño, señalando a la bebé.

"Mierda, la cámara" corrió con rapidez hacia su habitación. Cuando regresó, la bebé estaba de pie, intentando dar grandes pasos hacia ellos.