Subimos por la escarpada montaña. Nos tocó un camino resbaladizo, lleno de hojas secas y con arboles finos y quebradizos. Yo llevaba la mochila con las provisiones. Estábamos todos callados, pero se podían escuchar las hojas que crujían bajo nuestros pies y el tintineo de las latas que llevaba la mochila
-Oh, vamos.- exclamó Zoe. Había metido completamente la bota en un charco de barro oscuro bastante profundo. Intentó sacudirlo asqueada hacia un lado.
No era un camino agradable que digamos.
-¿Habéis oído eso?- Zoe paró en seco.
-Parece un río.- dijo Aiden.
Nos acercamos a donde provenía el sonido. Llegamos a un claro con apenas árboles, el murmullo del río y el canto de los pájaros calmaba el ambiente.
-Voy a intentar ver algo desde este árbol. Vosotros dos podéis descansar un rato.- dijo Zoe mientras saltaba para alcanzar una de las ramas del árbol y empezaba a subir por él ágilmente. Era un árbol alto y lleno de ramas debía medir como un edificio de cuatro plantas, más o menos.
Me senté en una piedra grande y redonda cercana al río. Me quité la mochila y me estiré. Era un alivio quitarse esa pesada mochila. Aiden miraba las aguas cristalinas extasiado. Respiré el aire puro y fresco, eso no abunda en un clan como infinity así que disfrute del momento de calma.
-¡CHICOS!
Era Zoe, su voz sonaba lejana debida a la altura en la que estaba. Ambos miramos hacia arriba para intentar divisarla. Sacudía la mano desde una parte bastante alejada del suelo, esbozaba una sonrisa.
-¿HAY ALGO CERCA?- grité en respuesta.
-NO MUCHO.- miró de un lado a otro. -TODAVÍA ESTAMOS LEJOS DE LA CIMA. HAY UNA CASCADA POR AQUÍ CERCA Y EL PUNTO DE ENCUENTRO SE PUEDE DIVISAR DESDE AQUÍ.
-BIEN.- no había sido muy productivo pero ayuda un poco.
-VOY A BAJAR.
Bajó ágilmente por las ramas y aterrizó grácilmente en el suelo. Se sacudió la ropa y se quitó una rama seca que tenia enredada en el pelo.
-La cascada esta mas arriba.- dijo señalando con el dedo. -También hay una zona de explanada después de la cascada. Creo que llegaremos allí un poco antes del anochecer. Es un sitio perfecto para hacer una hoguera y descansar por la noche.
-Genial.- dije.
Aiden asintió.
Zoe miró a su alrededor, esperando a que alguien más hablase.
-Si te cansas con la mochila podría llevarla yo el resto del camino.-
-¿Qué? Ah, no. Tranquila, puedo con ella.-
Sonrió.
-Lo que tu digas.- empezó a caminar. -Por cierto, creo que deberíamos ir por el otro lado del río, es más seguro.
Cruzamos el río saltando unas rocas que atravesaban este. Al ser un río estrecho no costó demasiado esfuerzo. Al llegar a la otra orilla continuamos el camino hacia la cascada.
Llevábamos un buen rato caminando cuando de repente escuchamos unos arbustos moviéndose, no era un sonido demasiado fuerte, así que no lo dimos demasiada importancia. Aiden estaba distraído con los alrededores, así que decidí que era un buen momento.
-Zoe.
-¿Si?
-Eh...- me quedé en blanco. Zoe esperaba que dijera algo. Un momento, ¿Y Aiden? ¿Se ha quedado atrás?
