Aún Duele (BTS)(V Y Tú)(Taehyung)(2da Temporada Dance With Me)

Capítulo 11.

— Eso esperó...

— ¿Me odia? — Solté un suspiró con mis ojos a punto de derramar lágrimas.

— No. Él jamás te odiaría — Acarició mi espalda.

— ¿Entonces qué?

— No lo sé.

— Me odia — Afirmé. Y estaba tan seguro de ello —. El definitivamente me odia.

Pero en qué momento cambió todo. Esas sonrisas que eran solo para mí ya no están o sus abrazados inesperados, incluso cada vez que decía que me quería... Todo eso a dónde se fue.
Se fue con la edad. Ya no éramos unos niños, sino unos adolescentes en busca de nuestros sueños, pero ahora mismo, mis sueños estaban con él. Mis sueños eran junto a él.

— ¡Hija! — Los gritos de Jimin y el conjunto de trote que venía bajando la escalera me distrajo todo sentimiento y pensamiento relacionado con V.

— ¡En la cocina! — Respondió Hobi, mientras acariciaba mi espalda.

Y en instantes conseguí muchos brazos a mi al rededor.

— Perdón — Me sujete fuertemente a mi padre —. Lo siento tanto papá, no sé qué pasaba en mi mente.

Es que ya no aguanto tanto dolor en mi corazón. Esa es la verdad.

— Nada de perdón niña tonta — Estaba llorando en mi hombro —. Eres lo más hermoso que me ha dado la vida y lo único que tengo.

Lo sabía y me había quedado. Ahora ya perdí una persona en mi vida y espero nunca perderte a ti papá.

— Lo sé papá. Por eso te pido perdón, por lo tonta que fui al dudar de aquello. Y también a mis tíos — Reí al ver sus rostros llenos de lágrimas, obviamente no me podría olvidar de ellos.

Ellos luchaban por mi felicidad.

— ¿De qué te ríes? — Preguntaron todos al escuchar mi risa.

Ahora solo queda reír.

— Es raro verlos así.

Debo seguir con los que están junto a mí.

— _________ — hablo Kook.

— Tío... — Lo miré avergonzada al tan solo pensar en todo lo que hecho por él.

Realmente fui una niña mimada.

— Perdón por todo — Me sorprendió y me abrazo con fuerza.

Era yo la que debía pedir perdón. Yo fui la causante de todo.

— ¿Realmente están llorando mis tíos favoritos?

Ya no quería más lágrimas. Ya todo había quedado atrás y ahora debía luchar por la felicidad de ellos. Solo había que borrar está atmósfera y como si la vida me escuchará, todos nos quedamos mirando sin saber que hacer u decir, creándose una ola de carcajadas, librando toda tensión que ya no era bienvenida en nuestro hogar.

— ¡_______! — Habló Suga. Que alguien me salve.

— Tío — Arrastre la palabra.

— ¡Idiota! — Y me abrazó —. Recibe esto como un nuevo comienzo — Se alejó de mí y me paso una foto.

No había palabras para eso. Éramos V y yo, en la fiesta de mí cumpleaños. La foto que él había tomado.

— Gracias — Le agradecí sin ánimos.

— Dale tiempo. Ha estado esperando por bastante tiempo por tí y que haya aparecido alguien nuevo. Sólo está confundido — Río —. Pero cuando se dé cuenta — Volvía a reír con ganas —. Pobre de él la que se llevará — Se puso serio —. Te amo _______. Eres realmente importante en mi vida y la de todos. No vuelvas hacer eso nunca más por favor.

Lo noté en sus ojos, los había asustado a todos. Me había comportado como una verdadera niña consentida. Si hubiera solo consultado a mí padre de todo ésto, el me lo hubiera dicho.

— Lo siento tío — Lo miré avergonzada y apenada.

— Todo va a estar bien, ninguno dejara que alguien te haga daño — Me sonrió —. Pobre de V, pero sabés, tú eres mucho mejor que esa insecta —Volvia a reír.

Y mi duda florecía ... ¿Cómo es que él sabe todo eso?

— ¿Qué? — Lo miré dudosa.

— Yo sé todo — Me dio unos golpecitos en mi cabeza y salió al salón principal.

— Pero... ¡Es un maldito insecto! — Grité en la respuesta correcta de mi tío.

Oh por Dios, como fui tan tonta en todo este tiempo. Esto era lo mejor que podía tener como familia.

Lo mejor fue que la tarde transcurrió con mucha tranquilidad y lleno de vida en el hogar. Y ahora debía arreglar un solo asunto.

Al día siguiente fuí a la escuela, decida de recuperar todo lo que era mío y junto con mis tres chicos; Hobi y Jin, Ahora no me podría olvidar del idiota de mi compañero que estaba esperando en la entrada con toda la desesperación del mundo y avergonzado al ver que venía con Jin. Lee Jung Suk.

— ¿Por qué no se casan y ya? — Les reclamé a los tortolitos que solo se daban miradas.

Los dejé solos y tomé el brazo de Hobi, siguiendo el camino junto con él. Mi meta era llegar a su salón.
Era mi día. Estaba él solo.

— ¡V! — Llame la atención de todos los que habían llegado temprano a la escuela.

— ¿______? — Me miró extrañado, pero lo veía en sus ojos de que se alegraba de que le hablará.

Pero los nervios me estaban consumiendo. Me sentí una inútil y totalmente avergonzada al llegar de esta manera. Rápidamente me di una ojeada en el reflejo del vidrio del salón de clases, estaba horrible. Di media vuelta hacia Hobi.

— ¡Vi la Era del hielo 3! — Le hable casualmente a mi amigo quién me miró extrañado — Me voy. Te quiero —. Lo abrace y salí del salón hacia el mío.

Llegué a mi salón como si hubiera visto un fantasma y no salí de ahí hasta el término de la jornada escolar.
Avergonzada salí a la salida principal, cruzando mis dedos en no encontrarme con V y rogando en que estuvieran mi Hobi, puesto que Lee no llegó al salón, supondremos que Jin tampoco.

Y ahí estaba en la entrada, con la maldita insecta... ¿Por qué no desaparecía de una vez y ya?
Nadie la quiere aquí. Excepto V.

¿Por qué tenía que ser todo tan difícil?
Al final al cabo, V y yo somos amigos y no debería haber ningún problema en arreglar las cosas ahora, pero ahora es distinto...
Pero, ¿Por qué es distinto ahora?
¿Por qué soy así? ¿Qué me sucede?
Es solo V, nadie en especial, es decir, si es especial, pero Mi especial, pero no en ese sentido, pero es mío, porque esa estúpida no se da cuenta de eso y se aleja de una vez de él. Nadie la quiere a ella por fea y idiota, bueno, si lo pienso, si es regía, pero el físico no lo es todo... O podría ser qué es una bruja.
¡Me estoy volviendo loca!
Joder V, me matarás de un infarto a este ritmo. Mi corazón realmente se encuentra muy agitado y asustado de ella.

— Por favor V, date cuenta que estoy aquí — Susurré, mientras lo veía sonreír.