Estoy en el auto de Derek. Es un ferrari...no, mentira, no se qué modelo es. Pero es lindo.
-¿Te divertiste? -Me pregunta Derek.
-Pues sí, más que nada cuando hicimos el pogo. Lo he pasado bien, ¿Y tú?
-Pues sí, me divertí. Aunque sólo vine para acompañar a Helen, ya sabes.
-Yo tampoco iba a venir, pero me viste, así que...vine.
-Sí, lo sé, Helen ya me contó qué pasó.
Seguimos hablando hasta que finalmente llegamos a la casa de Alex.
-Listo, aquí estamos.
-Gracias, Derek. Nos vemos luego -Me despido de el con un beso en la mejilla y me bajo de su auto.
-No fue nada, nos vemos.
Desde donde estoy se ven las luces encendidas de una sola habitación. Espero que sea la de Alex y no la de sus padres. Si están despiertos haré ruido al entrar
Le mando un mensaje a Alex para avisarle que ya estoy abajo. No quiero despertar a nadie.
-Alex, estoy en la puerta de tu casa, ¿me dejas entrar? O si quieres me quedo aquí, JAJAJA
Siento pasos y me doy cuenta de que es Alex. Se abre la puerta bruscamente y ahí está él...atractivo como siempre.
-Hola, Diana, ¿Cómo estás? ¿Dónde están Helen y Dafne?- Me pregunta.
Trato de imaginar que Alex es mi amigo de toda la vida, porque si me pongo a recordar que es el chico que me gusta, no me saldrán las palabras de la boca.
-Hola Alex -lo saludo con un beso en la mejilla-, oh, lo que pasa es que Dafne bebió demasiado y Helen se quedó con ella, pero vine a hacerte un poco de compañía, y...ya sabes -Le respondo tratando de no hacer demasiado ruido.
-Qué linda -me responde con una sonrisa-, oye, ¿Por qué hablas tan despacio?
-No quiero despertar a tus padres.
-Pero Diana, yo vivo solo...
Qué carajos
-Ah, ¿sí? Oh...y...¿Por qué? Bueno, si prefieres no decírmelo, lo entenderé.
Sé casi todo de Alex porque me lo cuentan, o me doy cuenta yo sola. Pero como casi nunca hablamos, él no sabe casi nada de mí. Sé que es raro que me guste un chico que ni me conoce, pero como siempre digo, lo que siente uno, siempre lo entiende uno.
-No, no te incomodes, simplemente vivo solo porque quiero. Mis padres dicen que mientras esté bajo su techo, debía cumplir sus reglas. Y yo no quiero eso. Entonces hicimos un trato. Ellos pagaron la mitad del valor de la casa, y yo, trabajando, y con mis ahorros de toda la vida, trato de pagar el resto. Ven, vamos a mi cuarto así seguimos hablando-. Me dice, dirigiéndome por las escaleras.
Estoy en el cuarto de Alex. Es todo muy masculino -es algo obvio-, siento su perfume por toda la casa, hay posters pegados en sus paredes de bandas como Los Rolling, AC/DC, Red Hot Chili Peppers, etc. Tiene su reproductor de música y un velador encendido, me encanta el ambiente. También tiene su hermosa guitarra en la cama, junto con un cuaderno, el cual supongo debe ser en donde escribe todas sus canciones. Tiene un escritorio y en él está su laptop, un televisor pequeño, y muchos papeles. Se parece mucho a mi habitación.
-Pasa y siéntete cómoda, ¿Quieres algo de beber?
-Emm, ¿Tienes cerveza? En la fiesta sólo bebí agua. Cuando me dió sed y quise ir a buscar una cerveza, ya no había.
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Una Del Moral
Novela JuvenilDiana Del Moral es una muchacha de 20 años que debe mudarse a España a causa de problemas familiares. Tiene la obligación de empezar una nueva vida. Por un lado se olvida de sus antiguos amigos, y por el otro conoce a gente nueva. Diana es una guerr...