Mi historia ya todos la conocen, es el relato de la mujer que fue condenada a que nadie la pueda ver, convertida en un ser monstruoso, con cientos de serpientes en la cabeza y una larga cola en vez de piernas.
Alguna vez fui una doncella muy hermosa y esa belleza fue mi bendición y mi maldición a la vez y cuando creí que ya todo se había acabado y que mi fin era inaplazable llego él a salvarme.
Todo empezó hace mucho tiempo atrás, en una pequeña ciudad de la isla de Creta llamada Gortina, yo tenía 18 años de edad y mi padre aún no decidía con quien contraería matrimonio; demás está decir que en mi época los matrimonios eran por esencia un contrato entre dos familias, sobre todo si estas eran aristocráticas.
Ese año mi padre había invitado a trece pretendientes a mi mano, descendientes de las mejores y más grandes familias de las ciudades aledañas y entre los pretendientes se encontraba el hijo de un próspero mercader de Atenas, quien llego rodeado de hermosos presentes para el dueño de casa, como se acostumbraba en esa época.
Esa noche se sirvió una cena para darles la bienvenida a los jóvenes pretendientes que eran presentados ante mi padre.
Yo por el contrario, junto al resto de mujeres de la casa, incluyendo a mi madre, sus damas de compañía y las esclavas, nos ocupamos de preparar las habitaciones y los baños para nuestros huéspedes, además de los alimentos que ese día se servirían.
Cuando todo estuvo listo y en orden, y terminé de supervisar a las esclavas en la cocina, decidí ir a prepararme, pero mi nana, Amalia que era una hermosa mujer negra de cabellos ondulados muy cortos color chocolate y que fue adquirida por mi madre por cien bueyes, me detuvo.
- nana ya está todo listo, voy a arreglarme para la cena.- dije mientras me quitaba el mandil blanco que servía de protección para no ensuciar la ropa.
- no mi niña.- respondió mi nana.- por órdenes de tu padre hoy no cenarás con ellos, me ha pedido que os diga que esta noche cenarás en vuestra alcoba.
- ¡pero nana!.- reclamé .- yo quería conocer a los pretendientes
- lo siento mi niña, pero son órdenes de tu padre.
- Nana te puedo preguntar algo
- si mi niña dime
- ¿crees que yo les guste a los pretendientes?
- ¡pero claro mi niña!, si tú eres mucho más bella que la mismísima Diosa Atenas
- ¡nana!.- grite asustada.- no vuelvas a decir eso, la Diosa Atenas podría escucharte.
- ¡Ay mi niña!.- refutó la esclava.- tú crees que la Diosa Atenas escucharía a una vieja esclava.
- no lo sé, nana, pero igual, no lo digas, tú sabes que a los Dioses no les gusta que los comparen con nosotros.
- pero Medusa.- yo solo estoy diciendo la verdad.
- ¡nana!.- volví a gritar
- está bien, está bien, no volveré a decir nada.- dijo la esclava levantando las manos como señal de rendición.- pero será mejor que te vayas a dormir mi niña.
- Bien, hasta mañana querida nana.
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Medusa y la cortesana
Teen Fictionesta historia esta basada en el mito de Medusa, en como era ella, porque la convirtieron en un monstruo, de quien se enamoro y el costo que tuvo que pagar por eso. es una historia de amor de lucha y de decisiones difíciles