Escucho muy en el fondo de mi mente al sacerdote ir realizando la misa, mis amigas pasan al estrado y leen los pasajes que deben, el padre continua con la ceremonia y no puedo evitar pensar en lo genial que sería si el que estuviese a mi lado fuese él, ante toda esta gente que quiero y que me quiere, ese siempre fue mi sueño, pero ahora que todo es tan diferente me siento mal.
Después del evangelio, el padre comienza a hablar del matrimonio, de la convivencia, del amor y de los problemas que siempre hay, en mi mente me preguntó, ¿Él como sabe aquello?, Sé que sacar a flote un matrimonio es cosa de dos, pero pienso que cuando se está con la persona correcta el amor siempre va a soportarlo todo.
Cuando creo que ya no lo soporto más, es cuando el padre pide que digamos nuestros votos, me dice que yo inicie así que tomo aire y comienzo con la farsa.
—Shakir, eres un hombre maravilloso que me saco de debajo de una nube negra que yo me había creado, con tu cariño y paciencia hiciste volver a esa mujer que yo había enterrado hacia tanto a causa de un corazón roto. Al principio te fue dificil, pero aún así no te rendiste y eso es algo que te voy a agradecer siempre. Eres un hombre maravilloso y sé que no soy la mujer que te mereces, pero aún así soy egoísta y te quiero a mi lado por que solo así no me hundo nuevamente, te quiero como jamás pensé que llegaría a hacerlo y por eso te pido. ¿Quieres ser mi esposo? —Cuentiono con una sonrisa falsa antes de tomar el anillo del cojín.
—Por supuesto que sí. —Acepta con una sonrisa y yo coloco el anillo en su dedo sintiéndome la peor persona del mundo.
—Su turno. —Le dice el padre y él asiente sonriendo.
—Catherine, puedo ser tradicional y decirte que estaré contigo en la salud y la enfermedad, en la riqueza y en la pobreza, que te amare hasta que la muerte nos separe, pero eso ya lo sabes, así que seré original y te diré lo que siento. —Sonrie y toma mis manos entra las suyas. —Desde que te conocí, me enamoré de ti, eres de ese tipo de personas que no genera más que amor en los demas y eso fue algo que me deslumbró. Acepto que al principio me confundió que me rechazaras, como ya estás enterada, yo nunca fui rechazado y eso me animo a intentarlo contigo, eras una especie de reto para mí y no me di cuenta de cuán enamorado estaba hasta ese día en que aceptaste salir conmigo, me sentía como un niño al que le acaban de dar la mejor cosa de su vida y cuando me di cuenta de eso, sentí miedo al darme cuenta de que tú no sentías lo mismo, me dió tanto miedo el que no me pudieses amar que me dolía. —Sus palabras me hacen sentir cada vez peor, y es que aunque no lo ame, me siento mal por que lo quiero. —Recuerdo el primer te amo que te dije, y en ese momento fue por que así lo sentí. Todo lo demás es historia, pero resumiré a ayer, cuando te fui a ver, Dios, te veías radiante, feliz, y por fin sentí que te tenía completamente para mi, que habías dejado tu pasado ahí justamente y que por fin sentías lo que yo, eso es lo que me hace estar hoy aquí frente a ti, pidiéndote que seas esa mujer que ví ayer y que veo hoy para siempre a mi lado, ¿Aceptas ser mi esposa? —Pide tomando el anillo que le tiende su sobrino y colocándolo a centímetros de mi dedo.
Analizó lo que diré y justo en el momento en que estoy por responder, las puertas se abren de golpe creando un gran estruendo y veo a una mujer entrar por ellas, Shakir suelta mis manos y mira con los ojos abiertos a la mujer, mientras el terror se apodera de sus facciones.
Yo no entiendo qué pinta la rubia voluptuosa en este momento y solo miro a la madre de Shakir mirar con el mismo horror que su hijo a la mujer, ella se retira los lentes oscuros de la cara y es cuando unos ojos esmeralda me analizan de arriba a abajo.
La madre de Shakir sale de la fila y se dirige rápidamente hacia ella tratando de evitar algo, pero sigo sin entender, le pide que se vaya, pero esta no obedece, se suelta de su agarre y comienza a caminar en nuestra dirección, se queda a unos tres metros de nosotros y entonces sonríe con cinismo y burla.
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¿Aun hay boda?
KurzgeschichtenDicen que el amor se vive con distinta intensidad cada vez. Dicen que el primer amor es el más intenso. Dicen que tienes a alguien destinado. Dicen que siempre hayaras una forma de llegar a él. Pero mi verdad, esa es que para mí el amor no se vive...