35. "Teatro"

6.8K 469 63
                                    

 Harry's POV

El olor del café recién hecho me hizo salir de mi sueño, haciendo que me revolviera en la cama y abrazara la almohada. Me sentía extrañamente satisfecho, completamente feliz y no tenía ni idea de por qué.

Aspiré el aroma de la almohada y... Espera. Esa no era mi cama. Los sucesos de la noche anterior acudieron a mí como un torrente y abrí los ojos de golpe. ¡Joder, me había tirado a Shannon! ¡Lo había conseguido! Rememoré esos momentos con una sonrisa. Había sido increíble, vaya tigresa... Hostia, no había palabras, ¡no me importaba repetir!

Con una sonrisa bailando en los labios, miré la habitación a mi alrededor, ya que la noche anterior no me había detenido demasiado a mirar la decoración. Estaba ocupado con otras cosas.

Shannon no estaba, pero la cama todavía olía a ella y su silueta se empezaba a desdibujar de las sábanas. Era una habitación sencilla de paredes color crema, con una guitarra a un lado, un armario bastante grande y una cama con dos mesitas. La cama era de matrimonio y con sábanas blancas con tonos pasteles. Me levanté y me puse la ropa de la noche anterior, esparcida todavía en el suelo, para salir en busca de Shannon.

Anduve por un pasillo que me dejó ver un estudio de grabación y un baño. Entré un segundo para lavarme la cara y acabar de arreglarme. El Harry del espejo me devolvió una sonrisa deslumbrante con unas ligeras sombras bajo los ojos. Me sentía brillar.

Llegué a la cocina y me asomé. Bingo. Shannon me daba la espalda, con el pelo húmedo cayendo por su espalda y llevando nada más que una enorme camiseta que le llegaba a las pantorrillas.

Súper sexy. No me importaría verla así a diario.

Estaba apoyada en el mármol, jugueteando con la cuchara de su taza de café y tarareando una melodía.

Me acerqué a ella por su punto ciego y sin hacer ruido y la cogí por la cintura, para luego darle un mordisco en el cuello.

-Buenos días, cielo... – Murmuré mientras noté como se tensaba de golpe entre mis brazos.

-Harry. – Dijo como saludo, fríamente.

Se giró lentamente hacia mí, sin emoción alguna en su rostro.

-Creo que esto ya no es necesario... Puedes ahorrarte todo el teatro. – La miré desconcertado, sin saber de qué hablaba. – En tu apuesta o lo que fuera eso solo entraba el acostarte conmigo, ¿no?

Me quedé congelado, mientras ella me miraba con total indiferencia. ¿Cómo sabía ella sobre eso?

-Te escuché cuando estabas entre bambalinas, hablando por teléfono con vete tú a saber quién. – Dijo poniendo los ojos en blanco. – El caso es que ya lo has conseguido y estás convenientemente vestido. Así que ya sabes dónde está la puerta y anoche dejaste tu coche aparcado fuera.

-Shannon, espe-- – Me intenté justificar.

-No, Harry. – Me interrumpió. – Desde un principio te has metido en mi vida, me has insistido, has ido detrás de mí nada más que para follarme. – dijo con crudeza. Sus ojos llameaban. – Lo has conseguido, así que ya no tengo por qué seguir aguantándote ni te quiero cerca de mí. Quiero que salgas por esa puerta y que desaparezcas de mi vida. No quiero que hables con Maisy, ni con Olive ni con nadie que esté relacionado conmigo. Querías acostarte conmigo, objetivo cumplido. Felicidades, campeón. Ahora, vete.

Me la quedé mirando sin saber muy bien qué hacer. Miré su postura rígida, su expresión cabreada y esa pequeña arruga que se le formaba en la frente al fruncir el ceño.

No me iba a escuchar.

Shannon era la persona más cabezota que había conocido. Si ella estaba empeñada en algo, no iba a poder hacerle cambiar de opinión. Quizá si le daba tiempo...

Pero de todas maneras… ¿Por qué quería que me escuchase? En algo tenía razón: había cumplido lo que quería hacer. Había pasado una noche inolvidable con Shannon. Vale, sí, es cierto, no había hecho que se enamorase de mí, pero en el momento en que se enteró de la verdad se había hecho trizas esa posibilidad.

Cogí mi móvil, mi cartera y mis llaves de la sala de estar bajo su atenta mirada. Abrí la puerta y me giré unos segundos, abriendo la boca para decir algo, pero sabía que ella ya no quería saber nada de mí. Así que me callé y salí a la calle.

La mañana era cálida, una mañana de verano, y no pude evitar sonreír tontamente.

Me había acostado con Shannon Hayes, la estrella del pop que todo el mundo conocía.

Me metí en mi coche, regodeándome en mi triunfo y arranqué, aunque con el rabillo del ojo me pareció ver a Shannon asomarse a una de las ventas con una expresión como llorando. Sacudí la cabeza para apartar esos pensamientos y conduje hasta mi casa.

De alguna manera, la sensación de victoria no duró demasiado. Fue repuesta por un extraño sabor amargo, un sentimiento ácido en la boca de mi estómago. Shannon me había echado de su vida a patadas. Ni siquiera había flaqueado al quitarme de en medio.

Se suponía que había ganado, que había conseguido lo que quería. Debía estar feliz, pero por alguna razón, me sentía mal. Estaba todavía en shock pero al mismo tiempo, notaba como quería volver y hablar con ella. No había regodeo ni sensación de superioridad.

Así que una solo pregunta aparecía en mi mente, martilleando mi cerebro.

¿Volvería a ver a Shannon?

¿FIN?

__________________________________________________________________________

Wow, se ha acabado Bite Me. Después de tanto tiempo... Me parece increíble, ahora me va a faltar algo. Creo que esta nota de autor es la más difícil, porque quiero decir mucho y no ser pesada. Como dijo Jack el Destripador, vayamos por partes.

1. Todavía queda el epílogo. Una especie de capítulo que no quedaba bien en ninguna parte y es como un puente entre ambas partes. O no, pero lo escribí y me mola.

2. Me tenéis que decir si queréis que siga en este libro como segunda parte dentro de Bite Me, o en un libro-secuela. Si es el segundo caso, ya tengo título y portada. El problema que tengo es que no sé los caps que tendrá la segunda, tengo un batiburrillo de ideas a poner en orden, así que igual tengo que hacer una trilogía porque es demasiado largo...

3. Quiero dedicarle este capítulo a @Arualle_ porque me pilló. Fue la primera (y única) que puso en los comentarios justo lo que iba a pasar. *Sigh* Y yo que creía que nadie se lo esperaría... Así que... Este capítulo para ti.

4. Daros las gracias. Muchas, muchas, muchísimas gracias a todas. Por haber estado ahí, por haber leído, por haber votado y, sobre todo, por esos comentarios. No sabéis la sonrisa que me habéis sacado leyendoos, sois geniales. ¡Espero veros a todas por la segunda parte! (Podéis recomendar este fanfic a la gente, no me quejaré, PROMETIDO)

5. Tengo proyectos. Tengo miles de cientos de decenas de ideas (no tantas, vale) y voy a intentar empezar fanfics nuevos, como no tengo claro cuál haré, os aconsejo que me sigáis, porque seguramente colgaré los prólogos y elegiré según vea qué os parece (Aparte uno de ellos lo clasificaré como R, así que no os aparecerá si no me seguís, o algo así)

6. No me enrollo más. ¿Qué os ha parecido? ¿Qué opináis? ¿Puedo pediros a todos esos lectores fantasma, que solo votáis o ni eso, que me comentéis en este que es el último capítulo? Estoy muy nerviosa por saber qué pensáis...

Pues creo que eso es todo (si no os lo diré en el epílogo). Chicas, muchas gracias una vez más.

Votad, difundid y comentad, comentad mucho porque quiero saber vuestra reacción.

Nos leemos! .x

Bite MeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora