¡con mi abuela por el mundo!

02- Avión.

CATHERINE.

Estaba durmiendo felizmente hasta que escuché la alarma de mi móvil sonar.Tarareé la canción de Cry Baby e hice un esfuerzo para levantarme y apagarla.Miré el móvil y me di cuenta de que ya eran casi las 10 de la mañana y yo había quedado con Valerie a las 9.

Salí corriendo a despertar a mis padres y revisé el móvil pensando en por qué la alarma no había sonado a su hora.Poco tiempo después me di cuenta de que estaba tan emocionada con el viaje de hoy que puse la hora en la calculadora, en vez de en la alarma, ¡Mierda!

Desayuné como pude y me vestí rápido.Para las 11 menos cuarto ya estábamos tocando al timbre de la casa de mi prima.La abuela y Valerie me echaron la bronca, pero al fin y al cabo no era mi culpa estar tan emocionada con el viaje.
Me despedí de mis tíos, luego de mis padres y nos dirigimos al coche.
Yo no había traído mucha ropa, en cambio Valerie llevaba 2 maletas enormes.

Mi abuela encendió la radio y sonó una canción del año a la pera, automáticamente me tapé los oídos y mi prima gritó.

-¡ABUELA QUITA ESO!-

-¿Qué pasa?-dijo la abuela meneándose al ritmo de la música -Esto se bailaba en mis tiempos mozos-

Yo me reí y comprendí que nos quedaba un largo trayecto.
1 hora y media después (si, Valerie vive en una casa de campo que está en el culo del mundo) llegamos al aeropuerto.Cargadas con las maletas y las mochilas pasamos al edificio, que era enorme.
Enseñamos los billetes a una chica que había en el mostrador y nos dijo que esperáramos en la puerta B, que al vuelo le quedaba poco para salir.

La abuela se quedó sentada mientras Val y yo facturábamos el equipaje.Compramos dulces y agua en una máquina expendedora y volvimos a la sala.
Se empezó a formar cola para subir al avión así que nos fuimos turnando un rato cada una.Unos 40 minutos después pudimos subir al avión.

-¡Me pido ventana!- grité mientras salía corriendo hacia nuestra fila de asientos.

-Yo me pido en el medio-dijo la abuela.

Valerie se acomodó en el asiento que quedaba y yo empecé a echar fotos a la ventana para mis redes sociales.

Los asientos eran bastante estrechos y nos esperaba un largo trayecto hasta nuestro primer destino; San Francisco.Lo bueno es que habían unas pantallas parecidas a una tablet pegadas al asiento en las que podías jugar a juegos, ver películas y escuchar música.
Valerie se dedicó a leer una guía de viaje sobre qué visitar en California y yo estuve escuchando música.La abuela se quedó dormida enseguida.

Pasó el tiempo y me di cuenta de que me había dormido.Mi prima me tocó el brazo intentando despertarme y me dijo que no había parado de roncar y que la gente nos miraba raro.
Solo quedaban 3 horas, 3 horas para nuestra gran aventura.

* * *

-¡Beibi yo la quiero como tú! ¡Jamón hecho, Nutella hecha y actitud!–escuché a una voz la cual me despertó de un salto.

-¡Abuela cállate!- Escuché gritar a Valerie

Me giré para ver qué ocurría y me encontré con la imagen de mi abuela cantando.Llevaba unos auriculares puestos y en la pantalla se podía ver la letra de una canción .
Me di cuenta como la gente comenzaba a quejarse y a gritarnos que nos callásemos.

Un señor con una barba muy poblada y canosa, con una camisa de flores se acercó a nosotras y se dirigió hacia mi abuela.

-Perdone podría..-mi abuela no lo escuchaba ya que seguía cantando- ¡señora!

Mi abuela dejo de cantar.Giró la cabeza y abrió los ojos mirando hacia donde se encontraba aquel señor. Tenia los ojos tan abiertos que parecía que se le iban a salir.La tensión se notaba tanto que se podía cortar con un cuchillo.

- Lo siento no...-mi abuela lo cortó.

-QUIEN SE CREE USTED PARA DECIRME QUE ¡¡¡¡ME CALLEEE!!!!-
Y sin más preámbulos mi abuela se tiró encima del señor aplastandolo con sus caderas anchas.

Valerie y yo nos miramos, nadie se atrevía a ayudar a aquel señor ya que no querían recibir el mismo final que él.

Las azafatas intentaron quitar a mi abuela de encima del señor pero era imposible; uno de los de seguridad mientras intentaba levantar a mi abuela le dio un manotazo a una señora. La señora cogió su bolso y le fue a dar con el al guarda. El bolso fue directo a la cara de su marido.

-¡PELEA!- Grité de pie encima de mi asiento.

En un abrir y cerrar de ojos todos se estaban pegando sin razón alguna.

En las filas del principio un joven le daba puñetazos a su compañero mientras los dos reían, por el medio una mujer de mediana edad le daba tortazos en el trasero a su hijo y a mi lado Valerie estaba tirándole de los pelos a una azafata de vuelo.

-¡Siii ! Wohooo - Gritaba mi prima mientras esta vez le retorcía el brazo a uno de los guardas.

Lo que más me sorprendió de todo fue que mi abuela seguía sentada sobre el señor mientras comía una bolsa de cacahuetes, la cual había robado antes de entrar.

Esto no era un caos, esta era mi abuela comiendo cacahuetes.

~M &M