Cap.8

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Desperté y me senté en la cama, estaba transpirando y mi corazón no dejaba de palpitar con fuerza.

Solo fue un sueño, nada de lo que pasó fue real.

Sea como sea, por algo soñaste eso, un poco raro pero... es una señal de que tienes que descubrir lo que ellos traman y sobretodo lo que esconden tus padres.

El sueño más raro que he tenido, pero por algo lo soñé.

Empezaré por mi familia y después por esos idiotas.

(...)

Esta ultima semana he estado algo tensa, siento la presencia de alguien cada vez que salgo. No fuí a la fiesta por miedo ¿Miedo a que, o a quien? No lo sé, pero tengo miedo.

Al entrar a mi casa solo pude notar a Marc sentado en el sofa.

Caminé de paso hacía mi habitación sin voltearlo a ver, recorrí todo el pasillo pasando por la habitación de mis padres y me detuve.

La puerta se encontraba abierta y no había nadie.

Cuando entré me encontré  todo en orden, comencé a buscar.
Nisiquiera sabía que estaba buscando pero algo me decía que aquí habría algo.

Revisé por cada rincón y solo encontraba fotos, aún así las tome.
Abrí el armario y entre todos los zapatos que guardaba mamá ahí, encontre una caja cuadrada café, me sentía como cuando de niña tomaba un dulce sin permiso de mis padres y me lo llevaba a escondidas; como a una niña que estan a punto de descubrir, la tomé tambien dejando todo en orden y saliendo de ahí caminé hacía mi habitación.

Mi corazón se aceleraba cada vez más en cada movimiento que realizaba.

Dejé la caja en mi cama y puse las fotos arriba de ella.

Hasta que tocaron la puerta y escondí todo bajo mi cama.

—¡Megan!—Peter me abrazó, yo golpeé su nuca—¡Auch!, ¿y eso porque?

—¡Tengo días sin saber de ti!.—chillé

—Está bien, lo siento estaba ocupado—suspiró—Y por favor no chilles—se burló.

Sonreí.

—¿Puedo confiar en ti?—le pregunté nerviosa.

Él se sentó en mi cama y la palmeó para que imitara su acción, asintió con su cabeza.

—Creo que algo anda mal—susurré.

—¿Porqué lo dices?—frunció su entrecejo.

—Mis padres me ocultan algo—
afirmé—Y no solo ellos, hay algo que está pasando y lo siento, no se como pero lo siento, estos ultimos días mi antebrazo se irritó y de un día a otro me comenzó a palpitar— le mostré mi antebrazo.

—Megan... debo irme—se rascó la nuca.

—Está bien— suspiré—Espero que tu no estes implicado en esto, y me estés evitando—lo abracé fuerte.

—No seas tan desconfiada, te conozco desde niños—depositó un beso en mi cabeza—Traeré información acerca de eso... y después hablamos.

Cuando Peter se fue, saqué la caja de su escondite y la abrí lentamente.

La caja estaba llena de objetos, de los cuales no tenía conocimiento de su origen, mi antebrazo palpitó con frenesí y parecía que en cualquier momento iba a salir algo.

Rebusqué y me topé con algo puntiagudo, al sacarlo me encontré con una figura tallada en madera, su forma era la misma que el sello que encontré aquel día en la enfermera, una estrella de cinco puntas.

Estos ultimos días había investigado acerca de aquella imagen, era la Estrella de Salomón. La cual representa el orden en el equilibrio de la tierra.
Sus cinco puntas representan, cinco elementos.

La tierra, el Aire, el fuego, el agua y el espíritu.
Utilizada en los Rituales de Magia.

Mi antebrazo no dejaba de palpitar, al punto que comenzó a arder.
En mi piel se formó aquella figura hecha de sangre, me ardía.
Elevé la estrella y casí por instinto la coloqué encima de mi herida, encajaban a la perfección.
Sentí el escozor dentro de mi piel, en su exterior se asomaban pequeñas llamas.

Las lagrimas resbalaban por mis mejillas.

La ventana de mi habitación se abrió de repente.

—Oh, Mierda—escuché un murmullo.

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Espero que les guste este cap. Siento que no tiene mucha relación el capitulo pasado con este.

Si algo anda mal, haganmelo saber.

Voten y Comenten.

Esta historia se encuentra en el lugar #995 en Fantasía. ♡♡♡

Pacto Con Un Demonio [PAUSADA]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora