Volví a mi habitación en la tarde, había sido una mañana larga, aunque no estaba en los planes seducir a Francisco, era necesario para que aceptará.
Me prometió que nunca diría lo que sucedió este día y esperaba que lo cumpliera o podría traerme problemas con mi esposo.
Aunque si esto se llegara a saber no estaba preocupada, la verdad mi reino me seguía a mi, yo era la legítima heredera del reino Lycan así que si Lincon me traicionaba los licantropos no se pondrian jamás en mi contra.
Tome un largo baño que me relajo y me quito su olor, me sentía sucia tanto por dentro como por fuera.
Me estaba vistiendo cuando la puerta de mi habitación se abrió de golpe, di un brinco por la impresión.
Me volví confundida al ver a Alexander en la puerta mirándome con la mirada nublada y los ojos inyectados de ira.
-Alexander... Me has asustado- digo cubriendo mi cuerpo con una bata- pasa algo?
-Por que tardaste tanto? - me pregunta con el ceño fruncido
-No fue fácil convencerlo...
-Ah sí? Y que tuviste que hacer para convencerlo? - me pregunta molesto
Me doy cuenta de para que dirección van sus acusaciones, y lo miro molesta.
-Esta fue tu idea desde un principio! - lo acuso - sabías el riesgo que era venir aquí! Pudo haberse negado, a ti te hubiera matado y a mi me pudo haber entregado a Enrique! Pero hice lo necesario para conseguir su alianza
No soy consciente de las lágrimas que ruedan por mis mejillas hasta que dejo de hablar, es verdad me siento muy humillada por lo que tuve que hacer
-Te le entregaste? - pregunta en un hilo de voz, como si le costará que las palabras salieran de sus labios
Su mirada es distante, herida y llena de dolor, doy un suspiro y bajo la mirada, no me atrevo a contestar esa pregunta.
-Tienes razón... Esto va en contra de mis principios de quien realmente soy... - comienzo a llorar y caigo de rodillas- pero era la única forma... Tengo que matarlo! Tengo que hacerlo pagar por lo que me hizo! Por destruir a mi familia... Por matar a mi hermano!
Me cubro el rostro con mis manos y un dolor agudo oprime mi pecho con fuerza, un dolor que no ha desaparecido desde aquel día cuando hizo que me encerraran.
Alexander se arrodilla frente a mi y me abraza con fuerza, yo lloro sobre su pecho, desolada.
-Se cuanto deseas terminar con él pero... No creo que esté sea el camino correcto- me quita las manos de la cara y me mira profundamente con sus ojos azules- nunca imagine que el rey te pediría algo como esto... Fui un idiota, yo te orille a esto
-No... - suspiro- yo fui la que se entregó, yo si sabia como era y de que era capaz... Yo lo acepte...
Él baja la mirada con tristeza y me seca las lágrimas con sus pulgares, después acaricia mi cabello con ternura.
-Siempre estaré a tu lado Ana... Te dije que te ayudaría a conseguir Inglaterra y es eso lo que haré así me cueste la vida-sonríe dulcemente
-Te lo agradezco de verdad, siempre has sido tan bueno conmigo... Después de mi hermano eres la persona más leal que he conocido
-Es un gran honor para mi... Lamento haberme puesto así, es solo que... Los celos me cegaron al imaginarte entre sus brazos...
Lo miro confundida luego suelto una risita incontrolable, me levanto del suelo con su ayuda y me siento en la cama.
-Que?
-Es solo... No puedo creer que sientas celos- digo mirándolo - he estado casada con Lincon desde que reviví y nunca te habías portado de esa forma
-Si, lo sé es una estupidez - dice apartando la mirada
Lo miro sin comprender, después de todo este tiempo no me había dado cuenta de todo lo que ocurría a mi alrededor, solo he estado enfocada en entrenar y en planear mi venganza sin preocuparme por los demás.
-Que sientes por mi Alexander?
-Me salvaste la vida- dice con la mirada fija en el suelo- agradecimiento, lealtad, respeto, admiración....
-Solo eso? - pregunto mirándolo fijamente
-Amor... - se atreve a mirarme con sus ojos azules- he estado enamorado de ti desde que te conozco Ana...
-Alexander yo...
-No, no tienes que decirlo, lo sé... Tu solo amaste a alguien una sola vez en tu vida... Nunca miraste a nadie más de esa forma... Y los demás lo has hecho por sacrificio o solo por cariño
Bajo la mirada con tristeza y los ojos se me vuelven a llenar de lágrimas, él se acerca a mi y se sienta a mi lado.
-Debes de descansar - dice acariciando mi mejilla- mañana será un día importante
-Esta bien... - me meto en las cobijas pero antes de que se vaya tomo su mano- no te vayas, no quiero despertar sola cuando las pesadillas lleguen
Él asiente en silencio y se acuesta a mi lado, me acurruco a su lado y él me arropa.Estoy frente a Francisco, estamos en la orilla del mar, en la playa, hay luna llena y mis ojos brillan de color gris.
-Bien... Todo esta en posición - dice Alexander ojeando un libro antiguo- es hora... Conviertela
Francisco sonríe de lado confiado y divertido de poder beber mi sangre, es lo que ha deseado desde hace mucho.
Veo como sus colmillos crecen y sus ojos se tornan rojos, toma mi rostro y tira de mi cabello hacia atrás para dejar libre el cuello.
Cierro los ojos con fuerza, después siento en dolor en mi cuello cuando sus afilados colmillos me perforan la piel, después comienza a succionar la sangre.
Después de un tiempo me siento débil, muy débil, la falta de sangre en mi cuerpo me marea, después un miedo me invade, que le costaría dejarme desagrada, después matar a Alexander y quedarse con mi ejército haciéndolos esclavos... Pero no, él me lo prometió hicimos un pacto de sangre.
Y lo recordé, vi sus hermosos ojos verdes mirándome con ese amor y deseo que me hizo suspirar algun día... Él también me prometió que me amaría por siempre, que nuestro amor sería eterno y me había traicionado...
Vuelvo a abrir los ojos cuando deja de succionar mi sangre, me tiene que sostener para no caerme, me acuesta sobre la arena y lo miro esperando.
Lo miro, lo esta pensando... como pude ser tan ilusa? Va a traicionarme, por que todos me traicionan?
<<Enrique... Por que? >> pienso con tristeza y una lágrima rueda por mi mejilla
Pero después Francisco se agacha muerde su muñeca y deja caer la sangre en mis labios, estoy sedienta, tengo tanta sed, tomo su mano y saboreo la deliciosa sangre, hace tanto que no sabia tan bien.
Cuando he recuperado toda mi energía, me vuelvo a acostar sobre la arena, y miro a Alexander que le entrega la daga de plata al rey. Él toma la daga y la coloca sobre mi corazón.
-Espero que funcione preciosa- dice Francisco preocupado
-Tranquila- sonríe Alexander - todo saldrá bien
-Estas lista? - pregunta el rey
-Hazlo - digo decidida
Miro la luna llena en lo alto, después suelto un grito cuando la daga atraviesa mi corazón.
Es un dolor insoportable que me hace llorar, me arde todo el cuerpo y siento como las fuerzas desaparecen de mi cuerpo.
Estoy muriendo, la vista se hace borrosa mientras la oscuridad me envuelve... Ya había sentido esto antes... Cuando morí... Y como aquella vez, lo último que veo son sus hermosos ojos verdes...
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VENGANZA Y AMOR REAL II (Ana Bolena Y Enrique VIII)
Historical FictionAna Bolena la nueva reina de los licantropos en Escocia ha cambiado, la sed de venganza la ciega y no deja de esperar con ansias el día en que vea caer Inglaterra. A su lado, su hermana María Bolena comienza a sentir algo por el esposo de su hermana...