Último Capítulo.
2 Semanas Después.
El día de tomar la mayor decisión de la vida había llegado, yo aún no sabía lo que quería. Sin embargo, quisiera la decisión que estaba tomando o no, igual iba a hacer lo que me dictaba mi corazón y si eso era lanzar todo por la borda iba a hacerlo, el problema era que aún no sabía lo que iba a lanzar, si la amistad que había construido en pocos días, junto al chico que aún no se dignaba a declararse mi novio y el amor de mis hermanas, o la increíble oportunidad de tener una beca. Todo aquello era confuso, y vaya que lo era.
Los pasillos se volvían más estrechos a medida que avanzaba por ellos, hoy era el día, el día en que decidiría si le decía si si o si no al futuro y por ende al inicio de cosas nuevas de las que no me quería perder. Quizás ese era mi mayor problema, pensaba demasiado y no me permitía sentir lo que estaba pasando en el momento, eso tenía que ser cambiado, era lo más justo. Pero a decir verdad no estaba tan segura. Mi madre me dijo que los amigos pueden ser cambiados, pero eso era decisión de uno, si uno quería quedarse lo más justo es que lo hiciera, no debía forzar nada. Lo mismo me dijo respecto a los novios, "Son solo chicos tontos que en cualquier momento pueden cambiar de opinión, pero cuando encuentres el indicado ahí sabrás que significas más que un cambio para el". Yo era la persona que había hecho el cambio en Cameron, y él no me cambiaría, de eso estaba segura. Pero de lo que aún me recuerdo fue lo que dijo respecto a mis hermanas, "Dales una pequeña y muy certera oportunidad, la bondad siempre debe predominar dentro de tu corazón. Sé buena y bondadosa, tal y como yo lo fuí con su madre". Puedo decir que cuando me dijo aquello creí por un momento que estaba algo loca, ¿Ser buena con el enemigo? ¿Acaso es una broma? ¡Pero vaya que de verdad me arrepiento! ¡Me arrepiento de solo haber creído esas cosas! Mi madre no estaba loca, solo tuvo el más enorme corazón de este mundo. Tuve mucha suerte de haberlo sabido apreciar. No sé que sería de mi de no haberla oído en el momento en que aún decía todo aquello. Pero sé que tengo la suerte de que ella me ayude a tomar la decisión más importante de mi vida aún sin su presencia.
—¿Vamos?.—Pregunta Cameron extendiendome una de sus mano, la tomo entrelazando mis dedos con los suyos.
Para mí una de las cosas más difíciles fue tomar una decisión acerca de que iba a pasar entre Cameron y yo en el momento en que decidiera aceptar la beca. No es que fuera la decisión que tengo ahora, las cosas han cambiado demasiado desde ese momento, en el que tomé esa decisión. Pero lo que sé es que quiero pasar lo que esto vaya a durar junto a él. Porque él es mi todo, y de verdad lo necesito en mi vida al igual que a mis amigos, ellos son esas personas que motivan, ellos son parte importante de esta historia que ahora comenzaré. De verdad no sé en donde estaría si lo de la nueva Cenicienta no hubiera pasado, donde estaría si Jade no me hubiera ayudado, si Val, Larah y Jorge no hubieran aparecido. Llegó el momento de soltar cosas, y aunque eso me duela sé que estarán mejor en el momento en que tome mi decisión. Y estoy segura de que lo que dejaré no me hará falta.
—¿Sabes? Si hubiera sido por mí te hubiera pedido que fueras mi novia hace tiempo.—Comenta él como si nada. Siento como lentamente me ruborizo. No pudo haberlo dicho, no tan descaradamente.—Pero sé que tienes que tomar una decisión, y por más que me duela no quiero tener que interferir en ella.
—Es muy difícil velar por tus sueños a la vez que por tus amigos.—Digo cansada.—Y la verdad es que ya no sé qué hacer. Creí haber tomado la decisión correcta y ahora siento que estoy pendiendo de un hilo. Tengo miedo a caerme si tomo la decisión incorrecta.
—No la vas a tomar.—Dice guardando una de mis manos entre las suyas.—Tienes que hacer lo que más te agrade, y no quiero sonar como un completo egoísta, pero si eso es dejarnos entonces tienes que irte.
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Cinderella. «Cameron Boyce»
FanfictionTú siempre serás mi Cenicienta, la Cenicienta que yo siempre he esperado. Esa princesa que alivia mi cuento, esa princesa que me alivia con su tacto. Para mi nunca fue necesario que usaras corona, ni mucho menos que usaras vestido, con tus jeans rot...