Capítulo 9

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Corrimos hacia la biblioteca y escuchamos la puerta de la oficina del rey al cerrarse, antes de llegar para cruzar las escaleras alguien me tocó el hombro.

- ¡Ana! Creo que se te olvidó algo- fue la voz de Marcus la que sonó, sentí un sudor frío que recorrió mi cuello, Oli se detuvo también al escuchar su voz, tomé fuerza, no sé de donde, y voltee a verlo, mas no pude verlo a los ojos.

- Mande - contesté
- se te ha caído esto - tomó mi mano y puso una pulsera roja en ella
- ooh que tonta no me había fijado, muchas gracias - dije fingiendo un poco mi voz para que no pudiera reconocerla - ¿puedo hablar con usted? - dijo fingiendo una sonrisa
- ¡no! Tenemos mucho que hacer ahora, no tenemos tiempo, después hablarás con ella - interrumpió Oli
- tiene que ser ahora - dijo sin quitarme la mirada de encima y tomando mas fuerte mi mano, la cual no había soltado *nos descubrió* pensé, en ese momento me jaló hacia la oficina de nuevo, caminé para no ser tan obvia, y Oli nos siguió - aquí estaré esperando - dijo Oli al mismo tiempo que Marcus cerraba la puerta.

Cuando quedamos solos en la habitación él por fin habló - mi amor te extrañe mucho - dijo y la mirada le cambió, tenía una mirada dulce, una que no había visto ni cuando nos conocimos, se veía enamorado pero aún no era la mirada de la que me había enganchado, en ese momento se abalanzó sobre mí, pero pude evadirlo y él quedó estampado sobre la pared, me límite a sonreír para disimular un poco - ¿qué tienes mi vida, estas enojada Ana? - Ahora lo comprendía, Ana y él estaban juntos.
- No, no estoy enojada, es que estamos muy ocupadas con tu hermana y si no salimos ahora, puede sospechar- inventé rápidamente - esta bien, pero no me darás ni un piquito- dijo parando la boca como pato y cerrando los ojos - aaam no, después te buscaré ¿está bien? - dije volviendo hacia la puerta - está bien - dijo él con una mueca de tristeza, abrió la puerta y regresó su mirada fría de siempre, Oli estaba pegada a la puerta mordiéndose las uñas nerviosa - ooh que alivio, por fin - dijo Oli tomándome de la mano, al alejarnos voltee un poco y vi a Marcus entrar de nuevo a la oficina, corrimos hacia las escaleras y empezamos a subir hacia donde estaba el hermano de Oli, deseaba que estuviera aún vivo, por lo que pude ver estaba muy mal.

Por fin llegamos a la habitación, teníamos que ser muy rápidas para bajar el cuerpo hasta mi escondite, saqué la llave de mi bolsillo, mi mano no dejaba de temblar, como pude metí la llave a la cerradura y abrí la puerta, el pobre hombre estaba tirado en el piso aún, las ratas lo rodeaban y tenían muchas mordeduras en su cuerpo, nos acercamos rápidamente, cuando Oli lo volteo y la luz dio directamente a su rostro, quedé impactada, no lo podía creer, iba a desmayarme en ese momento, lo que estaba viendo era simplemente impresionante.

Le Palais.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora