—Hermano, ¿Me llevas a comprar un libro? —Una pequeña niña de siete años dijo señalando la librería que estaba frente a la pizzería en donde se encontraba con su hermano mayor de doce años de edad.
El mayor la vió con molestia y chasqueo su lengua enojado por el simple hecho que el tendría una cita con la chica que le gustaba pero su madre y padre salieron y a la molestia que tenía como hermana no le gustaba quedarse con una niñera así que el la trajo a su cita.— No Irine, Annie llegara pronto. Deja de molestar —Le hablo grotescamente y volvió a ver su celular. Ella bajo la cabeza triste para luego levantarla con una sonrisa que siempre tenía en su pequeño rostro.
— Hermano —El levanto su vista del móvil y la miro serio.
— ¿Y ahora que pasa? —
— Y si yo voy a la librería y paso todo el tiempo que dure tu cita con Annie allí —El alzo una ceja y pensó lo que su pequeña hermana había dicho.
No era mala idea.
Después de todo los dos salían ganando, ella leía los libros que quisiese y el tendría una cita perfecta.
El acepto eso.
¿No pasaría nada verdad?
— Esta bien. Pero ten cuidado y no hables con extraños —Metió su mano en el bolsillo de su pantalón y saco dinero, para luego dárselo a ella.
— Si hermano, tendré cuidado —Recibió el dinero y se paro de la silla, para luego mirar a su hermano con una sonrisa.
— Te veo luego hermano —Se despidió con su mano y con una sonrisa, para luego darse vuelta y salir de la pizzería.
El observó por la ventana como ella entraba en la librería. Y al instante después de eso una linda rubia de ojos color negro.— Hola Iren —Con una sonrisa saludo al de cabello blanco.
— Hola Annie —Coqueto el respondió.
* * *
— Me la pase muy bien Iren, espero que podas repetirle —Ambos estaban despidiéndose fuera de la Pizzería después de tener según ello la mejor cita de sus vidas.
— Por supuesto Annie. Cuando quieras —Annie se dio medía vuelta y se empezó a alejar de el de cabello blanco.
— Ahora tengo que ir por Irine —Se dijo así mismo para comenzar a caminar hacía la librería.
Cruzó la calle y entró al local buscando con la vista a su hermana menor.
Al no encontrarla se dirigió al mostrador, en donde una mujer de unos cuarenta años atendía.— Buenas tardes, disculpe no a visto a una niña de siete años; tiene cabello rosa palo y ojos verdes. Es mi hermana menor—Pregunto.
— Ohh si, ella es un amor, pero hace media hora ella se fue de aquí —
— Que —
* * *
Las gotas de lluvia mojaban todo el cuerpo del de cabello blanco pero eso era lo que menos le importaba. Ya nada le importaba en ese momento, encontrarla a ella era lo único importante.
— ¡Iren! —Una mujer de cabello blanco y ojos verdes grito al verlo entrar todo mojado a la casa.
— Mamá —Su voz estaba quebrada, el no levantaba la mirada. No podía ver s la cara a sus padres.
— ¿Iren cariño que te paso?. ¿Donde esta Irine? —La peliblanca preguntó por su hija pequeña.
— No se donde esta —Dijo lo suficientemente fuerte para que sus dos padres le escucharan.
— ¿Que estas diciendo Iren? —Su padre hablo serio.
— No se donde esta —Levanto su mirada. Iris y Eren le miraron sorprendido ya que estaba llorando.
— Perdí a mi hermana —— ¿Que?, ¿Que estas diciendo? —
— Perdí a Irine —
— ¡Irine! —Se despertó agitado y su cuerpo estaba cubierto por una capa de sudor.
— Fue un sueño — Susurro por lo bajo, mientras pasaba una mano por su rostro.* * *
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Cien Días Con El Señor Arrogante.
FanfictionCien días bastaron para que ella se ganara su corazón. Cien días fueron suficientes para comenzar algo nuevo. Sakura Haruno con dieciocho años está estudiando criminología forense en su primer año en la universidad Konoha de la ciudad de Tokio. ...