- ̗̀ A L A S D E N O C H E ̖́-

°•. I - Jason Todd .•°

Título / La canción

Estaba lloviendo como si se fuera a caer el cielo. Aunque en la mansión el clima era cálido, mi boca sacaba humo de frío.

El ambiente era malo. Callado.
Tal como aquella noche.

Decidí bajar por otra taza de chocolate ya que Alfred, al igual que Bruce, estaba ausente.

Llevaba calcetines de felpa y sentía que podía deslizarme por el piso de madera fácilmente.

Llegué a la cocina y calenté la bebida en el microondas.
A unos 20 segundos a que acabará de calentarla la luz se fue. Así que corrí por mi celular de regreso a mi habitación.

Me senté en el sillón esperando a que la luz volviera. Así que por el momento prendí mis datos para mensajes o redes sociales para distraerme.

"Mira. YouTube me recomendó está canción, no puede ser..."

El mensaje de Barbara venía con el link a la canción del que hablaba.

No estaba segura de que tipo de recomendación era, pero esperaba que no fuera uno de esos para espantar.

La canción comenzó enseguida. Pronto la reconocí: How to save a life de The Fray.

Pensé que podía ser resistente y escucharla hasta el final.

... I lost a friend somewhere alone un the bitternest. And I would have stayed up with you all night, had I known how to save a life...

Me acurruque y recordé el día en que Bruce llegó a la mansión con el cuerpo de Jason.
Fue algo que no creía. Algo que no quiero recordar.

Sentía como cuando pierdes algo muy valioso sabiendo que pudiste haberlo evitado.

Lo sentí peor porque cuando pasó, unas horas antes nos habíamos peleado.

Sentí el aire faltar y las lágrimas caer por ese simple recuerdo.
Pero siempre se quedó la sensación de que necesitaba que me perdonará.

Ese noche dormí en su habitación esperando verlo llegar por la ventana como usualmente hacía, pero el día llegó y se convirtió en semanas.
Y la ventana no se volvió a abrir.

Sé que los demás la pasaron igual o peor que yo. Pero Jason era la persona con la que tenía más apego.
Era mi amigo.
Era todo para mí.
Y ese día se fue todo.

La canción dejó de sonar y la luz volvió.
Un sonido se escuchó en el piso de arriba.
Mis instintos me hicieron correr a la habitación de Jason.

No había nadie.
¿Qué esperaba?
¿Qué el volviera así como lo hizo la electricidad hace rato?

Me sentía estúpida.
Ya a los 2 años de que se fue y sigo esperando a que vuelva.
Todo sigue igual. Y mi mente me juega mal porque imagino que se esconde de mi.

El sonido del microondas acabando me regresó, cerré la puerta de la habitación y volví abajo.

Regresé por la taza de chocolate a la cocina y me quedé pensando en lo que me había ocurrido hace rato.
Necesitaba olvidar a Jason de una buena vez.

Pero era tan difícil.
Es difícil seguir cuando se te ha ido una persona a la que no pudiste decirle todo lo que pensabas de ella; todo lo que la apreciabas.
Todo lo que la querías.

Tenía ese recentimiento y no podía contarle a nadie.

Miré el celular y me aparecieron canciones recomendadas con títulos igual de deprimentes.
Subí a mi habitación y me acosté en la cama esperando a que parara la lluvia, la cual hacia que me sintiera más depresiva.

Cerré los ojos y pedí que todo fuera un sueño.

Que la persona que amaba siguiera en el cuarto contiguo.

Pero el mundo sigue girando.
Y yo sigo aquí.
Sola.