;; 🎀 diez 🎀 ;;

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Tenía dos razones para llorar:

1- Odiaba la oscuridad, y estaba en un bosque oscuro.

2- El chico que me gusta, la persona más tierna del universo me había gritado.

- ___, ¿por qué estás llorando? –lo vi acercarse. Sentí mis mejillas mojadas y no me sorprendió.

- N-nada. –dije, pasando mi mano por mi mejilla para limpiar mis lágrimas.

- Si no pasara nada no estarías llorando. –lo miré mal.

- Si no te pasara nada no me hubieras gritado. –suspiré. - ¿Qué pasa, Spring?

Su mueca de preocupación volvió a la anterior, de indiferencia.

- No sucede nada. –negó con la cabeza. – Ven, vamos. –hizo el amague de tomarme la mano pero me aparté. Springtrap suspiró y comenzó a caminar.

Lo seguí, mirando alrededor con miedo y derramando lágrimas. Tenía miedo, mucho miedo. Miré al pelimostaza delante de mí, quise abrazarlo porque me sentía segura en sus brazos, pero simplemente el hecho de que me hubiera gritado no ayudaba. No me gustaba.

El hecho de que la noche haya caído provocaba que comenzara a hacer más frío. Me abracé a mí misma.

- Vas a enfermarte. –me dijo Springtrap y pude ver cómo se quitaba su sudadera y trataba de colocármela.

- No, quédatela. –dije, apartándome. – Estaré bien, no necesito tus cosas. –lo miré mal.

- Deja de ser tan orgullosa y póntela. –me respondió, rodando los ojos.

- ¡Tú dime lo que te sucede! –chillé, sintiendo mis lágrimas volver a brotar de mis ojos. Mis mejillas volvieron a mojarse.

- Bien, te diré si te colocas esto. –señaló su sudadera. Fruncí levemente el ceño pero me coloqué la sudadera. Él suspiró y abrió los ojos, mirándome. – Estaba celoso.

- ¿Eh? –dije, confundida. -¿De quién?...

Pude ver un pequeño sonrojo en sus mejillas al mismo tiempo que desviaba la mirada.

- De Fred. –pasó saliva. – Es que él... él te hace reír y le sonríes y todo es muy bonito y yo... yo estaba a tu lado y ni siquiera me notabas. –hizo un pequeño puchero, supe que era inconscientemente porque él nunca hacía pucheros a menos que yo se lo pidiera.

Sonreí y me puse de puntitas para tomarlo de las mejillas con mis manos siendo cubiertas por las mangas de su sudadera, que me quedaba enorme.

- No te preocupes. –le di un pequeño beso en la nariz. – Sabes que te quiero más. –puse mis brazos alrededor de su cuello, abrazándolo a pesar de mi pequeña estatura.

- Yo también te quiero, enana. –sentí cómo pasaba sus brazos por mi cintura y luego mis pies dejaban de tocar el suelo, me había levantado.

Nos separamos luego de unos segundos, Springtrap –extraordinariamente – no tenía frío a pesar de que yo estuviera muriendo. Tal vez porque tenía otra camiseta debajo de la sudadera y yo tenía una simple blusa.

- Mira, allí están las cabañas. –dije, señalando unas cabañas pequeñas y con luces en su puerta. Pude ver a los profesores corriendo de un lado a otro y supuse que se habían dado cuenta de nuestra ausencia.

- Una cosa más. –me volteé hacia él. – No te enojes. –lo miré raro. Tomó la capucha y la puso sobre mi cabeza, tapando mi rostro hasta la nariz.

- ¡Spring, no puedo ver nada!

Sentí algo sobre mis labios por unos segundos, para luego ver a Springtrap todo sonrojado delante de mí, tomando mi mano y arrastrándome hacia las cabañas.

¿Qué había sido eso?...

Enana {Springtrap y tú}Where stories live. Discover now