La dura realidad

Cap 06: Amarguras

Después del día anterior.

Ivan sentía que se moría le dolía demasiado estar así, "¿Por qué él hizo tal acto? ¿Por qué hizo esa maldad?" Ivan no quería comer, no quería salir, revisar mensajes, no iba a la escuela, su padres mostraban preocupación pero como Ivan pero éste no salía de su habitación, todo él día lloraba y cuando no lloraba estaba dormido.

Pasaron unos días e Ivan seguía así y sin ir a clases, sin afrontar lo que pasaba.
Danna fué a visitar a Ivan porque unos maestros le habían pedido de favor que fuera ha hablar con él, ya que Danna vivía cerca.

Danna tocó la puerta y pasó después de esto, entró al cuarto y vió algunos rollos usados en el suelo, las cobijas desatendidas ropa y cosas tiradas, se acercó a la cama y se sentó en la orilla, después de unos minutos comentó —Hola... Soy Danna no sé si me recuerdes, soy de tú salón, los maestros me preguntaron si ya no volverías. ¿Qué tienes? ¿Por qué estás así?

—Si te dijera seguro me metería en problemas y te metería a ti también, creo que lo mejor es no decir nada.

—Tal vez creas que no doy tu amiga y tienes razón a penas nos conocemos y por mi culpa estuviste en problemas el otro día pero... Puedes confiar en mi, nunca sabes con que personas puedes contar... Puede que te comprenda.

—No lo sé. Bueno está bien.
Omar me gusta y yo le dije entonces...

Ivan comenzó a contarle lo sucedido a Danna detalle tras detalle, después de unos minutos Danna sabía que era lo que en realidad tenía Ivan.

Danna después de haber escuchado todo comentó —Mi consejo es; nunca dejes que una persona se crea más que tú, que te maltrate y te diga cosas sin sentido, no le tomes importancia y porque le habías contado a alguien quizá nunca me tuviste confianza o algo, pero te puedo entender, créeme, es mejor alguien que te entiende.

Al día siguiente Ivan se preparó y se fué al colegio al llegar a este se llevó una sorpresa.

Omar ve a Ivan pasar —¡Ivan! ¿Dónde estuviste? Te extrañamos.

Ivan caminó dejándolo de lado completamente ignorado mientras caminaba hacia el aula.

Los días transcurrían y las ganas de Ivan de estar junto a él aumentaban...

Ivan pensó un día en receso (estoy enamorado) pero luego dijo —no, no quiero sentir esto, no de él, es mi perdición, es mi pesadilla, es mis ganas de vivir... no sé que hacer

—Díselo en su cara... él no debe sentirse ni más, ni menos que tú, vales más que eso —dijo Danna.

—¿Cuánto tiempo llevas escuchando esto?

—Lo suficiente para enterarme que amas a ese chico el cual te ha tratado mal... si no me equivoco.

—No, no te equivocas... tienes razón... pero... no puedo decirle... ¿o si?

—Yo creo que el amor no tiene edad, genero o raza todos somos iguales... y tú no puedes decidir de quien enamórate... porque el amor es ciego... y la gente se enamora de las personas más equivocadas, más raras, más inoportunas, por que el amor no se ve o se elige... el amor sólo se siente

—Después de lo que dijiste me siento mucho mejor, aunque tengo miedo, miedo a lo que las personas piensen de mi. Dos chicos saliendo es raro, por lo menos para las personas.

—Por supuesto que no y de cualquier manera si así lo fuera, deja de preocuparte por lo que las demás personas piensen y preocupate por lo que te hace feliz. Créeme que a las personas jamás las tienes contentas y siempre van a hablar. No seas infeliz por culpa de la sociedad.
Si eres delgado te critican, si eres gordo te critican, si eres negro te critican, si eres alto te critican, si eres bajo te critican, si eres gay te critican, si no tienes hijo y eres hombre eres impotente y si eres mujer eres una tonta, las personas no vinimos a darle gusto a las demás personas y mucho menos a procrear, si no ha ser felices experimentar y disfrutar de esas experiencias.

—Wow Danna tienes un gran pensamiento, me impresionas. Espero que también encuentres el amor.

—Si, de hecho, me gusta una persona, pero esta está enamorada de otra. Que triste.

—Lo sé Danna.