Fictober 2017: Toothcup.

Día 3: Bajo el agua

Cuando Toothless no pudo sacar a su jinete de la cabina que le mantenía atrapado en el fondo del mar se sintió realmente desesperado. 

Había experimentado esa sensación tantas veces antes, cuando el chico se metía en un problema que ponía su vida en riesgo y parecía no haber salida, pero luego llegaba él y le rescataba, como esos jefes vikingos de antaño que describía Hiccup al contarle alguna historia antes de dormir, aquellos que rescataban a su amada anteponiendo su propia seguridad con tal de que ella saliera ilesa. 

Toothless era igual, él haría todo por Hiccup, daría su vida si fuera necesario.

Cuando le vio cayendo al fuego del Muerte Roja todo era borroso, solo recordaba haberse lanzado como poseso para protegerle, nunca se perdonó por completo la pérdida de su pierna, así como Hiccup jamás se había perdonado a si mismo por dañar su aleta, pero de alguna forma era algo que les unía mas. 

Sin embargo ahora no podía hacer nada, el aire abandonaba poco a poco los pulmones de su amado jinete y él no lograba mover esa maldita cosa.

¿Cómo era posible? Le salvó del fuego infernal en el pasado, pero ahora le perdería ahí, bajo el agua calma del océano.