Que Sehun no haya vuelto esta semana ya no me toma por sorpresa.
Baekhyun ha venido. Me ha dicho que hay una especie de evento por parte de la iglesia, lo cuál podría ser la razón por la que Sehun no está aquí.
A estas alturas, Baek se ha convertido en mi confidente, la única persona en la que puedo confiar y con quién puedo realmente desahogarme, incluso, siendo menor que yo, me abraza y me consuela, me besa y me acaricia y luego me lleva hasta el éxtasis para luego dejarme caer con su partida.
Estar solo tanto tiempo ya debería hacerse una costumbre para mí pero anhelar tanto el calor de una persona me hace las cosas difíciles.
Encontrar un trabajo resultó ser un alivio para mi. En la panadería de la familia Kim hacía falta alguien que ayudara por la mañana después de que el hijo menor de los señores comenzará a dedicar sus mañanas a sus estudios dandome un lugar donde pasar el tiempo lejos de la soledad de la casita en la que vivo. Mi salvación.
Jongdae, el hijo mayor de la familia, me ha mostrado lo que tengo que hacer y me a dado traviesas sonrisas al darse cuenta de que este trabajo es algo con lo que estoy familiarizado.
Es un hombre guapo aunque no muy alto, talvez de mi estatura, pero de alguna manera, que pase su tiempo revoloteando al rededor con esa hermosa sonrisa, me hace sentir lleno de calidez y anheló.
Sus manos me han sostenido para ayudarme a amasar la masa correctamente.
Son grandes, cubren mis manos fácilmente, son fuertes, con su presión sobre las mías anula mi fuerza y la forma en que me mira, con ese espléndido brillo en sus ojos me hipnotiza.Aún si yo no quiero caer en otro juego pasional, me siento arrastrado contra mi voluntad, mi cuerpo se mueve por sí solo, sabiendo ya lo que quiere.
Mi mente sigue diciendo que no pero mi cuerpo arde por la necesidad de ser tocado.
Aún si es una mal interpretación de mis sentidos, es demasiado tarde para dar marcha atrás una vez que mis labios capturan los suyos y cuando la respuesta es tardía, mis piernas tiemblan de un lado a otro para salir corriendo en cualquier momento.
Pero me corresponde, me devora y me succiona el alma de una manera desconocida pero no pasa nada más.
Se que puede ver la decepción en mis ojos cuando me sonríe nuevamente y acaricia mi mejilla con el torso de su mano.
Pero sus palabras me dejan en shock y me traen de vuelta a la realidad, una realidad peligrosa y sin futuro porque quiere más, mucho más de lo que puedo y quiero dar.
—No así Minseok, te quiero bien. Como debe de ser.No solo no tengo respuesta, el miedo que me invade no de compara con nada de lo que antes he vivido.
Apenas nos conocemos y eso no sería un problema si me diera solo lo que quiero. El problema es que se atreva a pronunciar esas palabras en voz alta, que alguien pueda oírlo.
Las personas como yo son una aberración para el mundo, los chismes del pueblo pueden llegar muy lejos sin embargo no son los chismes a lo que le temo. Las acciones que tomen cuando se den cuenta de que eso chismes son verídicos y no simples chismes es lo que me da miedo, lo que harán para contrarrestar está enfermedad, para erradicar el pecado, eso es de temer.
Y sigo arrastrado más y más gente conmigo...