El viaje de tu vida ~ Jack Harries ~

iré contigo al infinito

-Narra Sofía-

Esa tarde la pasamos juntos y esta vez charlamos, charlamos sobre tantas cosas ... serias y vanales. Cuáles eran nuestros colores favoritos, como empleaba cada uno y cuándo un objetivo u otro,  con qué modelo de cámara nos iniciamos cada uno en el mundo de la fotografía, qué olor amábamos más, qué esperábamos de la vida... La verdad es que nunca jamás había disfrutado tanto de una conversación en mi vida y además sienta GENIAL descubrir por fin a tu alma gemela.

Nuestra conversación se prolongó tanto en aquel parque que le invité a casa. Pasamos todo lo que quedaba de noche tumbados en la cama, mirándonos mutuamente, acariciándonos las manos y hablando sin parar pero sin correr. Hasta que caímos rendidos en un sueño profundo, sereno y feliz, agarrados aún de las manos.

-Recuerdos...

-Me gusta como hueles Sofi. Juraría que eres mi "Armortentia", la poción más poderosa que existe-

-Entonces, ¿a qué olería tu "Armortentia" Jack?- susurré

Jack respiró del perfume de mi pelo y dijo -a mis olores favoritos y tu cumples cada uno de ellos: el toque fresco del azahar acompañado de la naranja y el inicio de la primavera. ¿Has pensado alguna vez cuales son tus olores favoritos Sofi?-

-Sin duda, Alemania me gusta porque huelo todas las mañanas la brisa fresca de las montañas, me trae el olor a tierra húmeda, árboles y madera. Aunque he de decir que a veces hecho de menos el mar. Allá en España vivía en un ambiente tan tan distinto de aquí...-

-Me gustaría que me enseñaras un día tus raíces-

-Podríamos ir un día, ¿vendrías conmigo?- pregunté esperanzada

-Iría contigo al infinito Sofi- Entonces mi corazón se volvió a estrujar tatuando esas palabras pronunciadas en él con tinta indeleble.

-fin del recuerdo-

Recordarlo aun me produce escalofríos. La mañana que precede a la primera vez de algo con una persona especial es íntima y feliz. Ambos nos despertamos mirándonos a los ojos y sonriéndonos. Nos susurramos los buenos días y nos fuimos a la cafetería de debajo de casa a desayunar. 

Acordamos que el viaje del que Jack me había hablado podría comenzar en un par de días, los suficientes para empacar los necesario y cerrar los último detalles como el transporte y el hospedaje. Iríamos a dos ciudades por continente para fotografiar el medio ambiente, la vida a vida de las personas que allí vivían y sus situaciones personales y profesionales. Ambos estábamos de acuerdo que queríamos no solo enfocar este viaje en los paisajes, sino reivindicar en cierta forma también las necesidades humanas y aportar nuestro granito de arena en las luchas sociales existentes. Por ellos nuestra ruta comenzaría en Asia, para continuar en Oceanía, La Antártida, América, África y acabaríamos en Europa, concretamente en Alemania, pasando antes por España. El viaje duraría unos 5-6 meses, meses en los que estaré perdida con Jack, descubriendo el mundo, descubriéndolo a él, a mí y a los dos juntos.

Hace dos días de esta conversación, nos separamos para poder empacar tranquilos y quedamos en vernos a día de hoy, a las 11h de la mañana. Son las 09:10 y estoy metiendo los últimos vestidos en la maleta que usaré durante esta aventura. No creo que tenga que decir que estoy realmente nerviosa, pero estoy convencida que son nervios buenos, esos que se agarran en el estómago y vuelan al rededor como si se tratasen de... mariposas.

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Y vosotras ¿estáis preparadas? Haced las maletas que nos vamos!