- ¡¿Adivina quién soy?!- Unas delicadas manos taparon los ojos de Eva y un perfume primaveral invadió su nariz.
- ¡CARINA! -Se giró y apretó con fuerza a su mejor amiga... Era de esos momentos en que la necesitaba, ella era su confidente y su familia. Hundió la cabeza en su cuello y la abrazó más fuerte. -Cari... Cari.
-Ya, ya... Ni que no me vieras hace años. -Su amiga la separó y besó sus mejillas. Fue tan feliz de ver a la curvilínea y amable castaña, con esos ojos verdes penetrantes, que los suyos se llenaron de lágrimas. -Oh, Eva. No llores, hermanita. -Siempre se habían dicho así. Eva le sonrió. -Así está mejor. Venga, vamos a afuera que necesitamos privacidad.
Eva tomó la mano de su mejor amiga y se disponían a salir del comedor cuando Nathan se acercó rápidamente a ella y le abrazó por la cintura. Carina rodó los ojos e hizo una mueca de molestia. En palabras de su mejor amiga, Nathan era un psicótico acosador.
- ¿A dónde vas, linda?
-Iremos a caminar un rato por los jardines. -Dijo rápidamente Carina fulminando con la mirada a Nathan.
-Emm. -Él se rascó la cabeza, incómodo. -Ya casi es hora de servir el almuerzo... Y tú no comiste bien, amor.
-Nathan, solo quiero pasar un rato con mi amiga... No me tardó, llegaremos a tiempo. -Carina le sonrió con satisfacción mientras preparaba uno de sus tantos comentarios mordaces. Eva se apresuró, se soltó de Nathan y sacó a su amiga antes de que empezara una discusión con su prometido. -Nos vemos luego. -Él suspiró y levantó ambas cejas.
-Está bien.
Las chicas salieron con paso enérgico hacía los jardines del hotel. Cuando se alejaron lo suficiente ambas se sonrieron y se volvieron a abrazar.
-Tu prometido es un fastidio.
-Lo sé... No te soporta. -Carina soltó una risita.
-El sentimiento es mutuo... En cambio a David... -Eva sonrió con tristeza. -Él si es encantador, además que hoy estaba guapísimo.
-Lo sé. -Eva pasó saliva.
-Entonces ¿a qué esperas? Aun no entiendo que traes en la cabeza para que estés a punto de casarte con el lunático ese... Eve, mi vida ¡piensa! -Carina se golpeó la cabeza enfáticamente con su dedo índice. -Vas a botar tu vida a la basura. No lo amas, nunca lo amarás, ese tipo es... ¡Insufrible!
-Sabes que tengo que hacerlo, Cari... Mi padre...
-Tu padre te lo ha advertido y te tiene amenazada con Letitia... Ya lo sé. -Carina le interrumpió. - ¿Hasta cuándo le seguirás obedeciendo en todo? Ya eres una mujer adulta. Tienes que hacer tu vida como tú quieras, no como tu padre disponga.
-No puedo ser tan egoísta. -Musitó.
- ¿Y Jack sí? Créeme, estás dejando que te traten como una mercancía. Nena, piénsalo bien. Estás dejando ir a David... No creo que él se aguante más está situación.
-Pero... él me ama. -Dijo ella al borde de las lágrimas. La simple idea de que él la dejara la mataba.
-Sí, pero él también te necesita, y merece cosas mejores que ser el segundo plato.
-Él siempre será el primero, Cari.
-Pero solo en la habitación. Ante los ojos del mundo, no es nadie... ¿Qué harías si él se buscase a otra? No tendría ningún obstáculo... -Los ojos le ardieron y su corazón se oprimió más.
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Atrapando al Padrino (EPDLB I)
RomanceEva está por casarse con el hombre perfecto, querido por todos y admirado por su familia. Todos están emocionados con el casamiento más que la propia novia... porque en su cabeza, su futuro esposo es sólo un hermano, un amigo cercano... No aquel hom...