No Era Lo Que Esperaba (TERMINADA)

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     Después de ese asunto con Fury y con SHIELD, Tony sólo vio una última vez a la rubia. Ella simplemente se presentó con apuro y le dijo que mantuviera a salvo a Bucky y posteriormente se retiro sin más a paso apresurado.

     Desde entonces Tony no podía dejar de pensar en qué situación podría estar metida el Capitán, pues en aquel momento su rostro había estado tan serio y sus ojos con un brillo apagado y triste que le consternó mas de lo que quería admitir.

     Tony estuvo bastante tiempo metido en su taller, intentando seguir los movimientos de Stephanie. Descubrió varias cosas interesantes respecto al problema en el que estaba, pero no hizo movimiento alguno, pues la rubia en ningún momento pidió su ayuda. Las fiestas se volvieron más recurrentes  al igual que la cantidad que ingería de alcohol. Tony estaba molesto, aunque no sabía exactamente la razón; solo era consciente de esa maldita molestia carcomiéndole y quemándole el pecho constantemente.

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Una semana después.

     Ya había pasado una semana desde que Tony acompañaba a Barnes en sus terapias con el B.A.R.F. Él junto a la psicóloga del soldado monitoreaban las memorias y los signos vitales del Soldado del Invierno. El primer día Tony tuvo que usar su armadura, pues al primer vistazo a la mente del soldado éste enloqueció brutalmente. Fue cuestión de segundos para que Tony lo inmovilizara, Bucky estaba inestable y su capacidad para defenderse fue nula.

     Al siguiente día ocurrió exactamente lo mismo; Bucky sólo soportó un par de minutos antes de perder el control sobre sí mismo.

     Y ahora, rogaban para que el castaño pudiera controlarse y atraer de a poco sus recuerdos. Tony observó con atención la ventana frente a él que le permitía una excelente visión de todo el salón y el cambio que sufría debido a las memorias del Sargento.

     El lugar era frío, había nieve por todos lados y había gigantescas montañas rocosas a su alrededor. Tony logró reconocer la escena, pues Howard le había hablado algunas veces de ese episodio que fue decisivo en la vida de Steph para derrotar a los Nazis. Luego de ese breve vistazo, la escena cambió y pudo observar a un joven Barnes, hincado en una de sus rodillas frente a una pequeña rubia que contraía su rostro, haciendo todo los posible por no llorar.

     Una débil sonrisa se marcó en el rostro de Tony. Steph había mostrado carácter desde que era una mocosa, de eso no cabía duda. Ahora entendía de dónde venía aquella terquedad y firmeza, la muy desgraciada lo tenía desde siempre, algo que admiraba en secreto pero que jamás diría a terceros.

     Los latidos de Barnes comenzaron a perder su constancia, volviéndose violentos, a lo que Tony ordenó inmediatamente a JARVIS que apagara todo.

     Barnes tenía la mirada perdida, sudor corría por los laterales de su rostro. Los ojos plomos del soldado parecían los de un muerto, faltos de cualquier emoción como si se hubiera perdido en el tiempo; la mirada de un viejo atrapada en el cuerpo de un hombre joven. 

     —Sargento Barnes.—Llamó el genio.—Sargento.

     —No puedo.—Pronunció el de cabello largo con voz apagada y débil.—Debo hacerlo sólo... Esto que me haces... es tan...

     —Intentar traer todas tus memorias es cansado pero es un proceso por el que debes pasar. No volverás a ser el mismo de antes, pero esto permitirá que saques tus demonios. 

     Barnes finalmente miró a Tony a la cara.

    —¿Qué quieres decir? 

    —Lo bueno y lo malo que has pasado te dará una nueva identidad. Eventualmente volverás a ser alguien, pero no quien fuiste en el pasado. Sólo no pierdas tu esencia.—Todo eso, Tony lo dijo con una expresión seria. se mordió la mejilla interna y desvió su mirada unos segundos, antes de darse la vuelta y salir del lugar, dejando sólo al soldado.