Él es mi pecado

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Las cuerdas apretaban mis muñecas, mi boca era cerrada por una tira de látex, mi cuerpo se balanceaba y mis piernas abiertas por una barra de hierro. Temblaba y podía sentir cada parte de mi cuerpo expuesta. Podía verlo frente a mi, mirándome fijamente con ese ojo amarillo, pensando quién sabe qué. Su sonrisa ampliada hacia sus pómulos, su cuerpo enorme y lleno de tatuajes extraños, en su mano derecha sostenía un látigo de cuero listo para azotar  mi cuerpo. 

-¿Estás listo, pinito?- Dijo con su voz burlona y penetrante mientras yo asentía en respuesta a su pregunta- Me haz estado provocando estos últimos días y sabes que eso no me gusta...- Sentí nauseas, no sé porqué- Sabes que no me gusta en lo absoluto... -

Levantó su mano blandiendo el látigo y finalmente dejarlo ir contra mi trasero.

-¡HUMPF!- Un quejido fuerte salió de mi boca al sentir ese dolor en mi parte trasera. Rápidamente pude sentir como mi sangre se aglutinaba en ese lugar, le sentí palpitar y en eso sentí el siguiente latigazo-

A diestra y siniestra, Bill Cipher golpeaba mi piel sonriente mientras yo soltaba lágrimas de dolor y gemidos por la boca, a veces el dolor se movía a mis piernas que también recibían el impacto de vez en cuando.

-¿No te gusta esto?- Preguntaba mientras yo movía mi cabeza de derecha a izquierda negando- ¿No? ¿En serio?- Asentí- Eres un pino muy mentiroso, Dipper... Tu pene está que quiere explotar- Una de sus frías manos se acercó a mi miembro y le sostuvo-

-¡Uhmm!- Al sentir como recibía un poco de atención en esa zona, dejé salir un jadeo al mismo tiempo que mis ojos se ponían en blanco. Quería correrme, pero entonces comencé a sentir como algo invadió mi uretra.-

-No te correrás hasta que yo lo ordene... ¿escuchaste?- Bill insertó un delgado palo plateado en mi miembro y apretó mi base para impedir el flujo de mi semen. - Nos divertiremos tanto tú y yo...-

Las lágrimas fluían y los golpes continuaban, Bill me puso en cuatro y de ese modo, pudo golpear no solo mi trasero y piernas sino también mi espalda como si fuese una mula. El tubo que sostenía mis tobillos me obligaba a solo mostrarme vulnerable y este agrio bozal, a babear y gemir en lugar de hablar. 

Entre el dolor podía sentir como Bill me pegaba a su erección, su enorme y gruesa erección. Entre tanto sufrimiento había placer, solo no estaba seguro si el mío o el de él. Podía escuchar sus carcajadas al verme llorar y morder la cinta en mi boca, se cansaba del látigo y comenzó a usar su mano para golpearme y apretarme el trasero. 

-¿Quieres que te haga mío, pinito?- Preguntó al mismo tiempo que escuché como su cierre se abrió- ¿Quieres que te la meta hasta hacerte sangrar?- Se acercó a mi oído donde solo pude escucharle y sentirle como paseaba su pene por mi entrada- ¿Quieres que te coja?- Entre lágrimas le miré de reojo a lo que él sonrió y me penetró-

¡Uhmnff! ¡Ahm! ¡Hah!- Al sentir como era invadido, y ese rápido vaivén, mi vista se nubló y mis sentidos se apagaron. El invasor en mi uretra, el metal entre mis piernas, el látex en mi boca, ya no importaron cuando comenzó a moverse contra mi próstata. Rápido y fuerte contra mí, Bill Cipher me estaba tomando por millonésima vez, pero sentía como si nunca me hubiesen invadido de este modo. -

-Sé que te encanta ah que te lo haga así...- Me hablaba pero yo no escuché. No, solo podía observarle antes de que me cambiará de posición. Me liberó de la barra entre mis piernas y las cuerdas en mis manos. Me cargó y nos acomodamos contra la ventana de su habitación, mi jaula- Ah asi ah sabrán que tu cuerpo es mío-

-Uhmm ah argh ahh- De mi boca solo salían quejidos mientras mis piernas, por reflejo, se cruzaron a sus costados. Mis manos en sus hombros y mi cabeza hacia atrás recibiendo cada centímetro de él dentro de mi. Poco a poco, crecía y crecía, adentrándose y despedazando mi interior. -

Entonces liberó mis palabras quitándome la tira de mi boca para entonces hacer lo más predecible; besar mis labios. Como lo hizo cuando llegué aquí por primera vez, pero ahora ambos agitados, era un beso torpe y -como algunos dirían- asqueroso. Nuestros fluidos se mezclaron y nuestros cuerpos conectados no hacían más que transpirar. Entonces pequeños espasmos nos controlaron, el final llegaba cuando Bill comenzó a moverse aún más agresivo contra mí. Básicamente, me estaba obligando a saltar sobre su miembro.

-T-te voy ah ahh a llenar- Me dijo con voz ronca y entonces sentí como su esencia subía de su miembro a mi interior al mismo tiempo que liberó el mío para dejarme correrme.-

-¡AHHHHHHH! ¡BILL!- Grité al sentir libre mi semen manchando no solo mi cuerpo sino el de él.-

...

Wuuujuuuuu finalmente pude actualizar después de años. Me estuvo consumiendo la escuela -todavía- pero no se preocupen, les traigo sensualidad 

Te Odio, Mi Amor (R+18) BillDipDonde viven las historias. Descúbrelo ahora