Capítulo 20: Cizaña

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-Soy más culpable que Ezarel, de eso no hay duda - se dijo así mismo mientras caminaba por los pasillos.

Tenía la fugaz esperanza de encontrarlo a pesar de saber que Nevra lo ignoraria.

Pero lamentablemente no fue así, Nevra jamás apareció por los pasillos.

-Que tonto soy, olvidé que esta en otro pueblo en una misión - se dijo así mismo.

En otro lugar

-Creo que voy a perdonarlo - dijo Nevra para si mismo, tenía una misión importante en ese momento pero aún así no pudo evitar pensar en su problema.

Sentía que ya no podía estar enojado con Leiftan mucho más tiempo, es verdad, no fue algo que se pueda perdonar tan fácilmente, pero los platos ya estaban rotos y le dolía tener que actuar de manera cruel con él.

-¿Estás pensando en Leiftan? - Apareció Alajéa sacando al vampiro de sus pensamientos.

-¿Importa?, ¿no deberías estar recolectando las plantas que encargó Ezarel? - Preguntó Nevra.

-Tengo tiempo de sobra, después de todo tú eres mi acompañante - dijo la sirena con emoción.

-Porque "alguien" me estuvo acosando hasta en el baño hasta que acepté - contestó con molestia.

-tampoco lo digas así porque suena feo, eres libre de irte cuando quieras - dijo la sirena con molestia.

-Éso me agradaría ¡si tan sólo me soltaras la mano! - Nevra con enojo se trató de liberar del agarré de la sirena, pero ella en respuesta sólo se aferró a su brazo.

-No serías capaz de abandonar a una indefensa chica en el bosque ¿o sí? - El tono de voz de la sirena sonaba tan empalagoso y meloso.

-Tus trucos de sirena no tienen efecto sobre mí, yo ya tengo a alguien en mi corazón - respondió con indiferencia.

-¿Estás pensando en Leiftan? Él es lindo pero, después de lo que te hizo... Si yo fuera tu lo mandaría de paseo - acto seguido se abrazo a Nevra.

-podrías tener el cuerpo de una diosa y mucho encanto, pero mi respuesta será siempre la misma - apartó con delicadeza a la sirena.

-Tú mereces a alguien que no sea capaz de hacerte cosas horribles - dijo la sirena con desesperación.

-¿Cómo quien por ejemplo? - Preguntó Nevra.

-Yo por ejemplo, yo sería capaz de amarte y hacerte feliz - confesó la sirena con un sonrojo en sus mejillas.

-Tú nunca aprendes ¿verdad? - Nevra sonrió de manera traviesa.

-Yo te amo, de verdad - ella volvió a aferrarse al vampiro.

Nevra la tomó por los hombros y la hizo mirarlo a la cara, su rostro mantenía su sonrisa.

-podrán pasar miles de años, podré conocer a miles de personas, pero yo siempre escogere a la misma y dejame decirte que esa persona, no eres tú - aún mantenimiento su sonrisa, volvió a apartar a la sirena.

-Nevra... - Ella lo miró con tristeza.

-Continúa con tu misión si quieres tomar el té con Karenn - ignoró completamente el rostro de decepción de la sirena.

¿Estaba haciendo lo correcto en perdonarlo ya? O ¿Debería esperar un poco más?, ya no estaba seguro de que hacer.
Lo que sí sabía, es que Leiftan probablemente estuvo sufriendo por su indiferencia en estos días.

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Hasta aquí el capítulo de hoy 😰

Lamento que sea corto, hoy tengo un horrible caso de bloqueo de escritor 😔

(Eldarya) Inesperado [Nevra x Leiftan] Donde viven las historias. Descúbrelo ahora