(Eldarya) Inesperado [Nevra x Leiftan]

Capítulo 38: Culpable

Finalmente el perro negro restante y el familiar fueron eliminados por Valkyon, Jamón se llevó a Naytili a la jaula después de que Eweleïn confirmara que su vida no estaba en peligro, ahora era cuestión de esperar a que despertara para hacerle un interrogatorio, en cuanto al cuerpo de Ash, se descubrió que se trataba del hermano de Valkyon lo cual fue un golpe muy duro tanto para él como para Miiko.
De Chrome no se pudo comprobar su participación en el motín, así que se le dejó libre de sospechas no sin antes darle un buen castigo por desaparecer, ahora debía limpiar el laboratorio de alquimia y la sala del cristal durante un mes bajo la vigilancia de Ezarel.

En cuanto a Leiftan, su futuro era muy incierto. Ni siquiera Nevra lo podría salvar esta vez.

-Estoy bastante sorprendida y decepcionada de tí, atentaste contra la vida de miles de inocentes y te aliaste con alguien sumamente peligroso - dijo Miiko de manera severa.

-Lo lamento mucho… - Leiftan mantenía constantemente su mirada baja, no se atrevía a mirar a Miiko a los ojos por la vergüenza que sentía debido a sus actos.

-Con una simple disculpa no arreglaras nada - dijo la mujer con desagrado.

-ustedes me hicieron daño también, lo que yo hice no fue nada a comparación con lo que ustedes me hicieron pasar, por su culpa tuve que estar la mayor parte de mi vida solo - dijo Leiftan con seriedad.

-Lo que te ocurrió no fue culpa mía o de Nevra o Valkyon o Ezarel, pero debes entender que nuestros antepasados debían hacerlo para sobrevivir - Miiko no era buena con este tipo de cosas, quiso decir algo más amable pero simplemente no le salían las palabras.

-¿Pero a que precio? - Preguntó Leiftan, Miiko se quedó callada - esta bien, no me contestes, sólo dame un castigo y yo lo aceptaré - dijo Leiftan con molestia.

-¡Jamón, llévalo a la jaula! - Ordenó la mujer.

Jamón obediente cargó a Leiftan como si de un costal de patatas se tratara, y mientras tanto él rubio no pataleo ni luchó por bajarse, se quedó tranquilo hasta llegar a la prisión dónde Jamón sin un poco de cuidado lo arrojó a la primera jaula que encontró.

-¡Oye, tranquilo, mis alas no son fuertes? - Se quejó luego de haber caído de espaldas al suelo de metal frío.

Pero Jamón lo ignoró, sólo le dedicó una mirada asesina y se fue de allí.
Una vez que se quedó solo, comenzó a reflexionar sobre lo ocurrido allá en la sala del cristal, no se arrepentía de nada pues pensaba que lo que hizo fue muy justo. Pero aún así muy en el fondo estaba asustado por el castigo que tendría que afrontar.

-Estoy seguro que no será compasiva - dijo Leiftan sentado y recargado en los fríos barrotes de metal.

-¿Leiftan? - Una voz familiar resonó por la prisión.

-¡Estoy por aquí! - Contestó Leiftan, reconoció esa voz enseguida.

Y efectivamente, era quien deseaba ver en estos momentos. Nevra se había colado a la prisión sólo para verlo.

-¿Cómo supiste que estaba aquí? - Preguntó Leiftan tan pronto como Nevra se acercó.

-La debilidad de mi hermana aveces puede ser útil - contestó Nevra.

Leiftan asomó su brazo entre los barrotes para tocar la cara de Nevra, él sintió el frío tacto de su piel, su mano estaba un poco fría debido a la humedad del lugar.

-Jamás pensé que me verías de este modo - dijo Leiftan con tristeza - pero esta es mi verdadero forma, mi verdadero yo - según él, ya no tenía caso seguir ocultándose si lo habían descubierto ya.

-¿Qué eres? - Preguntó Nevra con seriedad.

-Un Daemon, demonio o como quieras llamarme, mi raza fue creada para ser sacrificada y darle fertilidad a la Tierra - Explicó Leiftan.

-Conozco la historia, pero jamás había visto uno de verdad - Nevra quedó hipnotizado por la increíble belleza frente suyo.

-Puedes odiarme si quieres, estas en todo tu derecho - dijo con tristeza.

-¿Cómo podría odiarte? Está bien, lo que hiciste es muy grave y lo entiendo, pero ni siquiera eso es suficiente como para odiarte y eso me molesta mucho, creo que no importa lo que hagas mi corazón no puede odiarte, quiero odiarte pero no sé cómo - contestó Nevra.

-Sí mañana me condenan a muerte ¿seguirás amandome? - Preguntó.

Nevra se acercó a la jaula y besó al chico entre los barrotes, ninguno sabía concretamente si sería su último beso, pero aún así quisieron disfrutarlo un poco más.

En otro lugar

-Hay que matarlo - dijeron unos.

-Debemos tomar en cuenta lo que hizo por nosotros en el pasado, hay que darle una segunda oportunidad - dijeron otros.

-Si lo hacemos nos matará en cuanto tenga oportunidad - opinaron otros más.

Era una calurosa discusión de opiniones divididas en la sala del cristal, Miiko permanecía en silencio intentando procesar la gran cantidad de información que recibió hoy.

-¡Que decida Miiko entonces! - Volvieron a opinar unos.

-¡estamos de acuerdo, la última palabra la tiene Miiko! - Dijeron otros.

Y toda la atención se centró en la silenciosa mujer, que hasta el momento sólo escuchaba opiniones válidas, otras sin sentido y otras que sólo eran insultos disfrazados.

-Yo opino que… -Miiko se quedó callada pensando en una respuesta que pudiera satisfacer a todos los presentes.

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Hasta aquí el capítulo de hoy 😰

Nos estamos acercando al final 😱

Por cierto, hoy me levanté y descubrí nieve afuera de mi casa jajajaja.
Tuve que faltar a clases por eso xD

Mi muñeco uwu

El clima me dio la inspiración para el extra uwu, ya estoy trabajando en la portada y la sinopsis ♡