(Eldarya) Inesperado [Nevra x Leiftan]

Capítulo 31: Noticias

Las semanas pasaron tan rápido que para algunos sólo habían transcurrido unos pocos días, pero para Nevra habían pasado años y años desde la ausencia de Leiftan.
A pesar de estar siempre sonriente, coqueto (aunque no tanto como antes de que llegará Leiftan) y servicial, sólo Karenn podía ver a través de su máscara y notar que por dentro sufría a pesar de que todas las buenas noticias de Miiko.

Sólo podía tranquilizarse un poco cuando Leiftan mandaba una carta para él, casi siempre contando que se encuentra bien y lo mucho que lo extrañaba, hasta ahora nada fuera de lo común.

Las cartas junto con los avances venían puntualmente una vez por semana, Miiko podía respirar tranquila sabiendo que Leiftan estaba a salvo.

Pero un día, las cosas se pusieron muy… tensas, misteriosamente los informes dejaron de llegar junto con las cartas para Nevra, toda la guardia brillante estaba preocupada, pero quienes estaban aún más preocupandos eran Miiko y Nevra, siendo este último él más preocupado de los dos y en su desempeño se le notaba.
Según palabras de Karenn, desde hace algunos días Nevra no había logrado dormir bien, este hecho fue confirmado por sus mejores amigos, pues no es ningún secreto que Nevra cuidaba su aspecto físico pero, a causa de las noches sin dormir se le podían notar ojeras producto de la evidente falta de sueño.

Según palabras de Erika, Nevra siempre va alrededor del mediodía a la playa y se queda allí un largo rato, si es que no tiene misiones por hacer llega a quedarse allí hasta la puesta de sol.

Y también según Ezarel, la sed de sangre del vampiro disminuyó de forma muy preocupante, únicamente bebía más que un sorbo de sangre, según las chicas de la guardia absenta que siempre le ofrecían de su sangre voluntariamente.

Eweleïn dijo, que si seguía así pronto su cuerpo le pasaría factura.

Y por último la cereza del helado, Chrome había desaparecido, no estaba por ninguna parte del refugio y mucho menos en el bosque, es casi como si la Tierra se lo hubiera tragado, una noche simplemente se fue y sin decir nada y nadie vio ni oyó nada.

Pero la desaparición de Chrome no preocupaba tanto, era bien sabido que siempre desaparecían, aunque no de esa forma, pero siempre terminaba por volver cuando tenía que hablar con Erika o simplemente ver a Karenn.

De esta forma pasaron los dos meses establecidos, la esperanza de tener buenas noticias llegó, Nevra había recuperado un poco de brillo en sus ojos y tal y como lo prometió, la sorpresa de que tenía preparada estaba en la palma de su mano.

-Espero que le guste…- sonrió al ver el pequeño objeto en su mano.

Estuvo buscando por varios días el anillo perfecto, no quería una simple baratija, quería algo realmente espectacular que hiciera juego con sus hermosos ojos verdes, quería algo que le recordará a esa mirada color esmeralda que tanto le fascinaba.

Ansioso fue a la playa, en el lugar dónde prometió esperarlo.
No iba a mentir, se sentía un poco débil, y era normal ya que apenas hace dos semanas se había recuperado de una fuerte anemia, hasta hace poco le habría dado igual morirse de anemia pero, gracias a los regaños de Ezarel y Valkyon se pudo recuperar y entrar en razón.

Miiko también estaba con él, tenía la esperanza de que el retraso de los informes fue quizás porque el familiar que los traía regreso a su huevo, o algo así, todo tenía una explicación lógica.

-¿Estás nervioso? - Preguntó la Kitsune.

-No voy a mentir- respondió él vampiro.

-Lo entiendo, proponer matrimonio no es una de las cosas más fáciles, pero admiro tu valor - la mujer le dio suaves palmaditas en la espalda.

Pero cuando el barco llegó, salieron algunos de los que iban con Leiftan menos el él, esto desconcertó a ambos.

Unos de los hombres que pisó tierra se veía herido y con marcas de recientes peleas, su cara reflejaba una preocupante seriedad.
Se acercó a la Kitsune bajando la mirada.

-Lo siento…- fue lo único que dijo aquel hombre.

-¿Qué ocurrió? - Preguntó la Kitsune preocupada.

-ocurrió un problema, algo nos atacó, no sabemos con exactitud que era pero nos tomó de sorpresa, a pesar de haber luchado no tuvimos oportunidad alguna con esa cosa, como verá… perdimos a varios hombres y también familiares, es mi deber informarle que Leiftan - el hombre se detuvo para reunir el valor para decirlo - él… desapareció, lo único que encontramos de él fue un charco de sangre - terminó de hablar el hombre.

Tanto Nevra como Miiko quedaron en estado de shock, la Kitsune cayó al suelo de rodillas llorando y lamentándose la perdida.

Nevra, simplemente bajó la mirada…

Aquel hermoso anillo que sostenía en una de sus manos, ese que ahora nunca será entregado, cayó a la arena.

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Hasta aquí el capítulo de hoy 😰

Hasta yo me puse sad escribiendo u.u

¿Una galleta? 🍪 :'c