Capítulo 14

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Me siento muy emocionada, como si estuviera en mi primera excursión del preescolar.

Y no soy la única, Theo no paró de hablar en todo el camino. Está muy animado. 

De vez en cuando decía tantas incoherencias que Damián y yo durábamos minutos riendo. Hablaba tan rápido que una ametralladora no le llegaba ni a los talones de los pies, disparaba unas quinientas palabras por segundo. 

Ahora estamos en el bosque, en un área que no sabía que existía. Hace más o menos dos horas dejamos la Range Rover de Damián en el lago y empezamos a caminar bosque adentro. No sabía que este lugar fuese tan grande.

Aparto una rama y sigo caminando escuchando a Theo.

—Entonces, pintaron al perro como un tigre y pusieron un cartel que decía: "Vendo tigre y si ladra es porque es bilingüe" —Theo se empieza a carcajear por su propio chiste. Lo miro como si le faltara un tornillo.

—Fue muy malo —Dice Damián riendo.

—Y si fue muy malo ¿Porqué coño te ríes? —Pregunta Theo.

—Por que fue muy malo —Damián se ríe más fuerte y yo niego con la cabeza divertida.

—Bueno, bueno —Dice Theo. —A ver... ¿Qué diferencia hay entre "Lástima" y "Lastima"?

—Aparte de que una va con acento y otra sin él, lástima quiere dec...—Theo me interrumpe.

—No te enrolles mucho, la diferencia es el tamaño —Frunzo el ceño al no entender lo que dice.

¿El tamaño? 

Abro los ojos como platos al entenderlo.

—¡Pervertido!—Grito.

Damián y Theo se ríen tan fuerte que algunos parajos salen volando de los árboles espantados. Me llevo las manos a la boca y río como poseída, ¿ya qué?... con estos dos no se puede.

—¿De dónde has sacado eso? —Pregunto limpiandome un par de lágrimas que se me salieron por la risa.

—Una chica del reino —Susurra con cara de embobado.

—Una chica que te gusta —Afirmo. Y muy pervertida también.

Tenso una mano y aparto un par de ramas que me estorban las cuales regresan a su sitio al continuar con nuestro camino. Miro a Theo y está todo colorado. Joder, se sonrojó. Suelto una risita disimulada pero Damián no disimula tanto, suelta una carcajada ganándose un puñetazo de parte de Theo. Damián no se inmuta y sigue riéndose de él.

—Es su bebé —Dice Damián y ríe más fuerte. Theo le funce el ceño y lo ignora.

—No sé de que te ríes, si tu novia es más enana que ella —Murmura Theo y su ceño se suaviza al recordar algo.

Ahora la que frunce el ceño soy yo. ¿Dijo novia? Aprieto las manos en puños. ¿Tiene una novia en The Hill's? Ah, no. Yo lo mato.

Damián parece leerme el pensamiento. Abre los ojos como platos y levanta las manos como diciéndome indirectamente que mantenga la calma.

—No tengo ninguna novia en The Hill's —Aclara rápidamente y me relajo considerablemente. Ah, menos mal. Sino lo hubiera enterrado vivo sin mover un solo dedo, o tal vez sí. —Habla de tí —Carraspea. 

¿De mi? Me sonrojo al procesar lo que Theo dijo y ahora el que estalla a carcajadas es él, lo fulmino con la mirada y ríe más fuerte.

—¡No soy enana! —Me quejo apartando otra rama de nuestro camino. Ignoro el hecho que de me ha llamado la novia de Damián, aunque la idea no me desagrada.

The Hill'sDonde viven las historias. Descúbrelo ahora