BTS VERSIÓN COLOMBIANO

31

Ya todos se encontraban dentro de la camioneta privada que los llevaría a Cartagena.

Todos estaban listos, ya pudieron haber empezado su ruta, él único problema es que Yugyeom todavía no llegaba.

—Señorita Camila, tenemos que irnos, llevamos media hora de retraso.— dijo el chofer.

—Lo sé, sólo... Espere unos minutos, por favor.— pidió la chica y el chofer asintió.

Camila se acercó a Jungkook, el cual estaba intentando llamar por décima vez a Yugyeom.

—Por favor, contesta.— suplicó en voz baja.

—Galletita, ya tenemos que irnos ¿aún no responde?— jungkook negó.

Sintió sus ojos arder por las lágrimas que tenía retenidas.

Camila lo abrazó y el menor lloró en silencio. Cuando se separaron, ambos se dirigieron a la camioneta.

—¡ESPEREN!— gritó alguien a lo lejos.

Jungkook volteó y se encontró a un hermoso principe que lo llevaría a su castillo y vivirían felices por siempre.

ok no.

Se encontró con un Yugyeom corriendo a toda velocidad, con su mochila y todo sudado.

—¡Yugyeom! Casi te dejamos— replicó Camila.

—Lo siento, tuve que buscar algo.— se disculpó mientras tomaba el aire que perdió.

—Suban, rápido, tenemos que irnos.— dijo Camila y todos entraron.

Yugyeom se sentó al lado de una ventana, Jungkook iba al lado de él. El mayor lo abrazó atrayendolo.

—¿Qué estaba buscando Hyung? — preguntó Jungkook apegandose a su cuello.

—Algo importante, en Cartagena te lo mostraré.— dijo y besó su frente.

Por otra parte, las pasivas suspiraron enamorados al ver como Jungkook y Yugyeom se daban amor, aunque no sean pareja.

—¿Y tú que tanto miras a la rata con su noviecito?— oh no, celoso Yoongi aparece.

—Estoy mirando como se dan amor, tu ya no me mimas.— hizo un puchero.

—Claro que si te mimo.—

—¿Cuando fue la última vez que me los distes?—

—...— Yoongi no supo que decir.

Jimin bajó la mirada triste.

Oh no, eso si que no, Yoongi no aceptaba que su bebé estuviera triste.

—Lo siento Jimin, sé que no soy el mejor novio del mundo, sé que mereces más que un flojo y gruñón novio, pero creeme que hago todo lo que puedo para que veas que te amo, hasta comparto mi suero contigo.— dijo mientras abrazaba a su pareja.

Jimin se sintió feliz, eso es lo que quería, cariños por parte de Yoongi.

—No digas eso mi amor, tú eres el mejor novio de mi mundo, siempre estás pendiente de mí, siempre me defiendes, y haces muchas cosas para complacerme, sólo que no quiero que pienses que prefiero lo material antes que lo cariñoso.— dijo Jimin dando besitos en el cuello de su pareja para que se calmara.

Jimin sintió unos sollozos.

—¿Estás llorando?—

—Si Jimin, lo estoy. Temo que un día te canses de mí y encuentres la felicidad en otro, no lo soportaría.— lágrimas rebeldes caían por sus ojos.

—No digas eso— secó las lágrimas — nunca me cansaré de ti, yo no quiero un novio normal, quiero a mi Yoongi.—

Agarró la mejilla del mayor y acercó sus rostros, para poder darse un dulce beso.

—Te amo, no lo olvides.— dijo Jimin.

—Jamás.— respondió Yoongi.

[...]

Por fin habían llegado a Cartagena.

—¡Por fin! Siento que mi trasero quedó cuadrado despues de tanto tiempo sentado— dijo Hoseok mientras se estiraba.

—Sólo fueron tres horas— dijo Tae.

—sili fiirin tris hiris, se sintió eterno, me duele la espalda. Namie~ vamos a descansar.— dijo Jin.

—Claro que si princesa, iré con Camila a la recepción para reclamar las habitaciones, mientras, sientense.— dijo y se fue con su amiga.

Todos odebecieron y se sentaron.

—¡Ya quiero ir a la playa! ¿Irás conmigo Hobi?— preguntó Tae.

—Claro que si bebé— respondió.

"Ya quiero verte en traje de baño" pensó Hoseok.

—¡Ya tenemos las llaves de las habitaciones! Todos con su pareja, ¡Vamos Laura! Nuestra habitación tiene jacuzzi!— dijo Camila llevandose a su novia.

Namjoon le dió las llaves a cada pareja y todos se fueron.

—¡Ya quiero ver como será nuestra habitación, Yoongi! Ojalá sea bonita.— Jimin saltaba de emoción.

Yoongi rió y entraron al ascensor. Su habitación se encontraba en el piso 13.

Yoongi oprimió el botón y las puertas se cerraron empezando a subir.

—Me gusta la idea de que tendremos vacaciones juntos.— dijo mientras abrazaba a Yoongi por el cuello.

—A mi tambien — besó sus labios. Un beso pasional.

Se besaban, mejor dicho, se comía como si no hubiera un mañana. Menos mal el ascensor no había parado.

Yoongi bajó su mano hacia el gran y lindo trasero de su novio, masajeandolo. Jimin jadeaba entre el beso por tal sensación.

Se escuchó el sonido que indica que habían llegado a su piso y se separaron. Salieron buscando su habitación con prisa.

Habitación 208

Leyó Yoongi y enseguida abrió. Se encontraron con sus maletas pero poco les importó, ya que cuando cerraron la puerta se volvieron a besar.

Caminaron besandose hasta la cama y Yoongi lo puso con cuidado sobre esta.

—Yoongi...— se separó del beso.

—¿Qué sucede?— preguntó confundido.

—Hazme el amor.— pidió jadeante, y algo en Yoongi latió.

Y no precisamente su corazón.