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Yoongi

Odiaba a Jeon Jungkook, no había otra palabra que describiera el enojo que sentía hacía él.

Tomé uno de los jarrones que había en la sala de estar y lo arrojé hacia la pared con fuerza. A los segundos reaccione y recordé que ese era uno de los jarrones favoritos de mi madre.

Me agaché y recogí los pedazos cortandome sin querer unas cuantas veces con los restos.

-¿Que a sido ese rui... ¡Yoongi tu mano!- gritaron a mis espaldas.

No dije nada. Jungkook se agachó a mi lado y me miró con preocupación.

-Te has cortado.

Lo ignoré. ¿A caso él no podía dejarme un maldito segundo en paz?

Jungkook tomó mi mano con suma delicadeza entre las suyas y la examinó detenidamente.

Al sentir el contacto de su mano con la mía lo miré a la cara atentamente. Su ser reflejaba la viva preocupación personificada.

Ladee la cabeza confundido. ¿Como era que alguien que apenas me conocía se preocupaba tanto por mí?

¿Él estaba siendo sincero conmigo o estaba fingiendo muy bien? Esperaba fuera la primera porque realmente ya estaba cansado de las personas que fingian ser mis amigos solo por mi "fama".

Sentí una presión fuerte en el pecho y lo segundo que supe fue que me encontraba llorando.

Lloré. Lloré y lloré sin poder controlarme.

Jungkook me puso de pie y una vez así me tendió un abrazo.

Me abrazó con fuerza. Sin ninguna intención de soltarme y lo agradecí silenciosamente porque si lo hacía sentía que me iba quebrar al igual que el jarrón de hace unos segundos.

Volví a sollozar con fuerza y maldición... Quería parar pero no podía ¿La razón? No la sabía, solo sabía que quería llorar y desahogarme por un momento.

¿Hace cuanto no abrazaba así a alguien? Ni siquiera lo recordaba pero se sentía tan jodidamente bien.

-Yoongi...-escuché que susurró Jungkook a los minutos. Luego sentí que pasaba una de sus manos por mi cabello, cerré los ojos ante ese acto.

-Quiero ayudarte-continuó- pero necesito que me dejes hacerlo. Me levantó la cara con una de sus manos y buscó mi mirada pero yo estaba muy avergonzado como para devolversela. -Iré de a poco.. Lo prometo y juntos traeremos a tu viejo yo.

-¿Lo prometes?- susurré levantando un poco la mirada.

-Lo juro- respondió sonriendome- Pero tú vas ayudarme ¿Vale?

Asentí.

-No asientas, dímelo y te creeré.

-Voy a volver.- respondí aún un poco avergonzado.

***

-¡Ah! ¡Duele! ¡Coño!

-Ni siquiera he destapado el bote alcohol Yoongi.