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Final

Yoongi

Entramos al Starbucks y Victoria nos saludó, aunque más efusivamente a Jungkook que a mí. Pedimos dos cafés y nos sentamos en una mesa alejada de la gente. Cuando Victoria dijo nuestros nombres toda persona dentro de la cafetería nos miró. "Lo siento" se disculpó muy apenada.

Después de hacerme miles de fotos con todos pude coger mi café.

— Un té de cortesía para ti y un postre de chocolate para Jungkook — Dijo Victoria.

— Gracias — Sonreí falsamente y cuando me iba a ir a mi mesa, la miré y la llamé — No te quiero volver a ver intentando ligar con mi chico, ¿te queda claro?

— ¿Su chico? — Dijo ella con una sonrisa burlona pensando que estaba bromeando o algo. Pero nada de ésto iba en broma.

— Lo que oyes—Sonreí orgulloso.

— Dijo que eran amigos— Alzó una ceja y se cruzó de brazos.

— Las cosas cambian Victoria, no te quiero cerca de lo que es mío — Sonreí falso — ¿De acuerdo?

— De acuerdo señor Min, como usted diga... — Me miró con odio — Hay más chicos en el mundo — Suspiró y me miró — No intentaré nada con él.

—Gracias — Vaya, pensaba que se lo tomaría peor, para una vez que me pongo serio... He quedado como el malo de la película...— Yo..lo siento, realmente no soy malo la verdad soy como un puto peluche... Me ablando por cualquier cosa...

— No se preocupe, yo haría lo mismo teniéndolo a él de novio — Sonreímos como despedida y volví a la mesa.

— ¿De qué hablaban tanto? — Preguntó Jungkook tomando su postre.

— Me había dado un pastel de otro sabor y le dije que te lo cambiará por el de chocolate — Sonreí picaresco.

— Espero que no hayas sonado tan grosero con ella— Me miró creyendo que de verdad le había dicho eso. Ay mi conejito que inocente era, me encantaba que fuese así.

Reí antes de beber mi café — ¿Cuándo tendremos al pequeño Wednesday entre nosotros?

—Ya se lo he dicho a mis padres, posiblemente se vengan unos días y así me lo traerían.

— ¿Voy a conocer a tus padres?

— Sí — Se puso nervioso.

—Seguro que son muy agradables, podrían quedarse en casa ahora que tú duermes conmigo.

— Prefiero que no, les quiero mucho, pero son pesados.

— Pues... ¿Con mis padres? Se llevarán bien, así se harían amigos— Le ofrecí una alternativa.

— Eso es una buena idea — Sonrió.

—Avisaré a mi madre luego, le encanta tener visita, que nos confirmen cuando vendrán y lo tendremos todo preparado. Tengo una habitación de sobra que no sabía si hacerla un armario, podemos hacerle un cuarto al perro.

— Yoongi, es un perro, con una manta y dos pelotas se apaña — Se rió.

—Mm, bueno, seguiré pensando en la idea del armario.

— Sí, tanta ropa no cabe en el que tenemos actualmente...

— No soy el único que tiene.

—No compares, tus camisas y zapatos son como toda mi ropa en número.

—Exagerado— Nos reímos — Es cierto que tienes poca ropa.

— O tú mucha.

— Un día vamos a ir de compras, necesito pantalones, así compraríamos alguna que otra cosa, podemos ir con tus padres.