Narras tú.
Habian pasado dos semanas, cada vez faltaba menos para mi fiesta de cumpleaños y aunque estaba emocionada de que llegue el gran día mi mayor emoción era tener a Max ahí, durante las dos semanas habiamos cruzado palabras de más, cada quien comenzaba a saber la vida del otro y en varias ocaciones él habia intentado algo más conmigo, por alguna razón no me molestaba, de hecho me hacia sentir alagada.
TM: ¿Lista para la fiesta de esta noche?
Tú: Sí.
TM: No puedo creerlo, mi niña cumplira 18 años.
Era un gran alivio por fin ser mayor de edad aunque...
Tú: Mi cumpleaños es en tres días aún.
TM: Si pero ya no falta tanto.
Por fin dejaria de ser una niña, lo que más me emocionaba era que ahora, con mayoria de edad, tal vez si tenía una opotunidad con Max.
La puerta sono.
TM: Yo voy.
Jaquelline: Hola __________.
Tú: Hola.
Le di un beso en la mejilla.
Jaquelline: ¿Lista para un cambio de imagen?
Tú: Te dije que no me maquillare.
Jaquelline: Esta bien pero debemos peinarte.
Subimos a mi habitacion y de mi armario saque el hermoso vestido color dorado.
Jaquelline: Es muy lindo.
Tú: Lo se.
Dije mientras me miraba frente al espejo recordando aquel día en donde Max me vio tan interesadamemte y mientras las imagenes se me venían a la mente mordi mi labio inferior sintiendo de nuevo lás manos de él rodear mi cintura.
Jaquelline: ¿Estas bien?
Tú: Sí.
Jaquelline: Eso espero, te noto un tanto perdida.
Tú: No es nada.
Jaquelline: Ben se compro un traje muy lindo para imprecionarte.
Tú: Es un gran amigo.
Camine hasta donde se encontraba Jaquelline, tome el celular e intente llamar a Max pero me daba miedo que mi amiga descubra el interes que tenía por aquel hombre.
Jaquelline: Debemos comenzar a arreglarte o no llegaremos a tiempo.
Entre a la ducha, el agua tibia me relajaba los músculos, al salir me puse mi ropa interior, una lenceria que habia comprado no hace mucho, y una bata para cubrir mi cuerpo mojado.
Jaqulline: Primero comenzaremos con tu peinado.
Jaquelline era una grandiosa estilista, me dejo con un peinado suelto pero otorgandole unas ondas suaves en él, me pinto lo lábios con un rosa palido y me unto brillo sabor sandía encima, me pinto las uñas, las cuales estaban largas otorgando finura a mis manos.
Jaquelline: Ya pareces toda una mujer.
Tú: Gracias.
Dije con una sonrisa en los lábios, así era como deseana verme, mayor, adulta, lo suficiente como para que Max se fijara en mi.
Jaquelline: Te dejare sola para que puedas canviarte, además que debo ir con Ben a organizar algunos asuntos más.
Tú: Ok, nos vemos después.
