Un mismo destino

Naipe de diamantes pt. 4

Fiora subía las escaleras a toda velocidad, estaba demasiado ansiosa por llegar arriba, puede que ahí estuviera Dember, aunque no había nada escrito en piedra, aún así sentía la necesidad de saber que pasaba, y así...

-¡Ah! —Fiora jadeaba mientras corría por el tercer piso—. ¡Vamos, solo tengo que subir al siguiente pi-! —De repente un gran gruñido se escuchó detrás de Fiora y la hizo detenerse en seco, una sombre gigante había bloqueado las escaleras que iban al segundo piso—. ¿...? —Fiora estaba un poco confusa de que no bloqueara las escaleras que iban al cuarto piso, pero siguió corriendo hacia el cuarto piso...

Apenas llegó al cierto piso Fiora puedo divisar a lo lejos una sombra, justo en el fondo del gran pasillo, la sombra no le prestaba atención a Fiora y solo se quedaba soltando leves gruñidos, parecía estar comiendo algo...

-¿E-Eh? —Fiora no entendía bien la situación, recorrió con la vista el lugar, pero aparte de la sombra no había nada más, nadie pidiendo ayuda... "¿Q-Qué demonios fue eso? ¿Qué es todo esto? ¿¡Qué demonios pasa en este lugar!?" Se preguntaba Fiora frenéticamente, todas sus preguntas llegaban cómo un río, ella estaba realmente confundida.
-Parece que has encontrado lo que buscabas, Fiora —Dijo Ewan subiendo por las escaleras, tal parece que seguía a Fiora—. Y bueno, ¿Estás contenta? Ya lo encontraste...

-¿D-De qué hablas? Dember no está en ninguna parte...
-Señaló con el dedo a la sombra—. Está ahí, lo vi todo desde los ojos de la sombra, por alguna razón saltó directo a las fauces de ésta y terminó siendo su cena, realmente fue una pena, pensé que duraría más, pero ya que...

-¿¡E-Eh!? N-No puede ser, Dember no... ¿O sí? Talvez lo que escuché antes fue... ¡No! —Gritó Fiora —. ¡¡No caeré en eso, Ewan!!
-Pero siempre digo la verdad, no sé de que hablas... ¿Caer? Estás aquí por voluntad propia, ¡Si ambos llegaron aquí fue porque no querían dejar ir! —Le gritó Ewan a Fiora para responderle.

-¿Dejar ir? —Dijo Fiora aún enojada.
-Sí, no puedo soportar como personas cómo ustedes no pueden aguantar el sentimiento de perder a sus mitades, yo nunca tuve una y por eso hago esto, por mi maestro... Si no fuera por él seguiría teniendo una tranquila y aburrida vida, pero en vez de eso tengo que lidiar con ustedes, Almas partidas (Broken Souls) —Dijo enfatizando las últimas palabras.

-¿Eh? ¿Broken Souls? —Dijo confundida Fiora.
-Ustedes, dos personas que tienen solo la media alma y están destinadas a vivir juntas para complementar sus almas —Dijo respondiendo de mala gana—. Siempre haciendo cualquier cosa incluso morir, para que su otra mitad esté a salvo... He visto muchos a lo largo del tiempo, hubo mucha variedad, y creo que ustedes pueden ser dignos de ser recordados... —Miró fijamente a Fiora.

-¿D-Destinados, variedad, de qué hablas? —Dijo cambiando su expresión de enojo por una de confusión y temor.
-Solo los observo para ver si son suficientemente fuertes para poder superar lo que el futuro tiene para ustedes, nosotros lo vemos cómo algo necesario y un método para evitar que una futura pareja sufra mucho, al menos esas son las enseñanzas de mi maestro... El me ha enseñado cómo lidiar con Broken Souls, pero dependiendo de los diferentes casos puede que cambie algunas cosas para que la prueba sea al menos superable, y es ajustada para que puedan probarse de la mejor forma posible.

-No comprendo todo esto, entonces... ¿Eres bueno o malo?
-Jeje, ninguno de los dos, yo soy gris.

-¿Gris? —Dijo con más preguntas que respuestas.
-Sí, no importa si lo que hago es bueno o malo para ti, siempre intento hacer lo que creo que correcto para mí... —Dijo con una mirada extraña en sus ojos.

-¿E-Eh?
-No importa la situación, siempre y cuando sea lo correcto, es lo que conlleva ser Grayhearted...

-¿...? —Fiora ya no sabía que decir al respecto.
-No me importa si necesito matar para hacer lo correcto... Y hablando de matanza...