El naipe de diamantes pt. 1

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El diamante rojo que estaba incrustado en el piso emanaba una tenue luz roja que iluminaba la habitación, Dember entró a la habitación-. Bueno, terminemos con esto de una vez... -Miró lo pulsera que le había dado Fiora que tenía en la mano derecha-. Después de todo tengo una promesa que mantener -Dicho esto Dember se posicionó en el diamante, éste reaccionó a las pisadas y en cuanto Dember llegó al centro del diamante la luz roja empezó a ganar intensidad, al punto que envolvió toda la habitación en rojo-. ¿¡Q-Qué!? -La luz era tan fuerte que Dember tuvo que cubrirse los ojos con sus brazos.

Una vez la luz bajó de intensidad y Dember pudo abrir los ojos él examinó la habitación, era diferente a la de antes, el bulto de que estaba antes en la cama había desaparecido, en cuanto al clima seguía igual de gris, como se podía apreciar por la ventana de la habitación, revisó la hora en su celular, el reloj se había detenido a las 3:35p.m-. Esto es cuanto menos extraño... Pero más importante, ¿Qué rayos pasa y dónde estoy? Siento que no estoy en el mismo lugar de antes... -Dember salió de la habitación. Ya en el pasillo Dember revisó la puerta de la habitación, G8, la misma habitación de antes... -Hay algo que no me termina de parecer normal aquí, pero ahora no hay tiempo para esto ¡Tengo que irme de aquí! -Dember empezó a correr, mientras pasaba por lo pasillos notó que las habitaciones ya no estaban selladas con los naipes de antes, pero no pudo detenerse a revisarlas detalladamente. Mientras bajaba Dember daba un rápido vistazo a su alrededor, todo parecía normal en el hospital.

Una vez que llegó al primer piso se dispuso entonces a salir del lugar, apenas él puso su mano en la puerta ésta la rechazó y gran naipe se vio reflejado en el vidrio de las puertas.

-¿¡Eh!?
-No pensaste que te lo dejaría tan fácil ¿O sí? -Le dijo Ewan, quien le había observado desde las sombras.

-Dios, ¿Tú de nuevo? -Dijo Dember un poco molesto al escuchar la voz de Ewan.
-Claro que sí, no puedo dejar que te vayas de este lugar, no al menos que descubras la verdad primero.

-¿La verdad? ¿¡De qué rayos hablas!?
-Como dije, tendrás que descubrirlo aquí, aunque no puedes solo, déjenme darles una pequeña motivación -Volvió a sacar naipes del aire, cinco-. Veamos que tan preparados están para poder hacerle frente a la realidad... -Arrojó los naipes hacia la pared en donde quedaron incrustados, solo se podían ver sus diamantes rojos reluciendo en la oscuridad.

-¿Darnos moti-? -Los diamantes que se veían en la oscuridad empezaron a reunirse para hacer un diamante rojo gigante, el diamante empezó a moverse, y de la oscuridad surgió una enorme sombra-. ¡...!
-Con esto veremos que tan listos están, talvez no recuerdes a este amigo, pero gracias a él podrás ver la verdad -Ewan llamó a la criatura y luego apuntó a Dember con su brazo, la criatura entonces gruñó levemente y empezó a acercarse a Dember poco a poco.

-¡E-Eh...! -Dember asustado empezó a correr y a subir las escaleras muy deprisa. Cuando llegó al segundo piso tomó un respiro-. ¿Qué rayos? Ahora que se supone... -La criatura emitió un ruido muy extraño mientras subía rápidamente las escaleras persiguiendo a Dember-. ¡Maldición! -Volvió a correr.

La criatura seguía todos los pasos de Dember, no dejaba que Dember tomara un respiro, al menos hasta que llegaron al último piso, Dember intentó abrir la puerta que llevaba al último piso, pero la puerta estaba cerrada, la criatura esbozó algo parecido a una sonrisa cuando Dember le miró, Dember intentó entrar en cualquier otra habitación, pero las puertas también estaban cerradas, no había donde correr ni donde esconderse, solo quedaba esperar... El cruel destino que le deparaba a Dember... Esa inmensa sombre veía fijamente a Dember, con el gran diamante rojo que tenía en la cabeza, Dember estaba sentado en el piso con la espalda en la pared, cabizbajo, solo esperando mientras oía los gruñidos de esa cosa acercándose cada vez más y más a él, cuando... "Dember..."-. ¿Uh? Esa voz... -"Dember, no sé que te haya ocurrido, no sé porqué nuestros hilos se cruzaron ese día, pero sé que fue para bien... Estaré esperando a que despiertes..."-. ¿Fiora? -"No importa cuanto tenga que esperar, pero no me rendiré, así que tú tampoco lo hagas, ¡Por nuestra promesa! Ji ji, anda que me veo un poco tonta hablándole al aire..."-. ¿...? Tienes razón, sea lo que haya sido, ¡Tienes razón! -Dember se levantó y encaró a la inmensa criatura-. La verdad... Todo lo que ocurre aquí, sin importar lo que haya ahí, ¡Solo he de ir adelante! ¿¡Cierto!? -Empezó a correr con dirección a la sombra-. Solo adelante... ¡Sin importar nada! -Y esperando un milagro Dember saltó hacia las sombras, la criatura gruñó y paso seguido abrió su enorme boca y se abalanzó sobre Dember-. Por nuestra promesa... -Dember cerró los ojos... Y fue tragado por la oscuridad, y mientras desaparecía en las sombras sólo podía sonreír mientras se abrazaba a la poca esperanza que la pulsera de Fiora le daba, la oscuridad le consumía... Una oscuridad que él mismo había creado tiempo atrás...

~Chapter8pt.1End~

Hola^^ Espero les haya gustado este capítulo, espero pronto poder subir la segunda parte del mismo, ¡Hasta la próxima!

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